En octubre de 2024, Unidad Popular - Frente de Trabajadores (UP-FT) obtuvo 5.367 votos en Montevideo. Fueron poco más de la mitad de los que logró en todo el país, lo que le impidióa esa coalición obtener representación parlamentaria. Ahora, bajo la premisa de ser "la izquierda que lucha" y con la candidatura de Eduardo Rubio, participará en las elecciones departamentales.
En su programa de gobierno, que lleva por título "por un Montevideo justo y solidario", y al que accedió El País, plantea una plataforma de seis puntos. Entiende "fundamental" el control de los trabajadores sobre las cuentas de la intendencia y de los municipios, que están "hoy totalmente en manos de contratistas y empresarios privados". Así, promete exigir que esas cuentas sean públicas, y así "demostrar que los ingresos fiscales, que surgen casi totalmente de las familias trabajadores, no son destinados a las necesidades populares, sino a favorecer las ganancias de las grandes empresas, que prácticamente no pagan impuestos".
En ese contexto, UP-FT promete cambiar radicalmente una realidad, dice, pautada por los "sueldos principescos" de las autoridades departamentales y municipales. "Nuestro gobierno será de los trabajadores y el pueblo", se afirma. Entre otros aspectos, se propone la revocabilidad de todos los cargos políticos y que intendentes y directores perciban, como máximo, el salario de un obrero especializado, un maestro o un profesor de máximo grado. Y se plantea que el presupuesto departamental sea discutido en asambleas barriales y zonales.
Por otra parte, se propone la remunicipalización de todos los servicios que hoy están en manos privadas, sin importar su naturaleza, y que el ingreso a la función pública sea siempre por concurso.
En cuanto a vivienda, se habla de la recuperación de "las decenas de miles de viviendas vacías" que existen en el departamento, incluyendo los predios baldíos abandonados, con un "fuerte impuesto" sobre las viviendas desocupadas que sirva para financiar proyectos "populares" y topes al precio de los alquileres. Para la eliminación de los asentamientos, se propone un estímulo a la "socialización" y a la "cooperación".
UP-FT propone un "transporte público, popular y solidario" a través de la municipalización, para que "deje de ser un negocio lucrativo". Se plantea un sistema multimodal, que tenga como eje central un tren eléctrico de pasajeros. Además, todas las unidades capitalinas deberán contar con componentes de fabricación nacional.
El programa incluye boleto gratuito todos los días para estudiantes, docentes y funcionarios no docentes de la educación pública en todos los niveles, así como para jubilados y pensionistas con ingresos menores a $ 50 mil, o personas mayores de 65 años.
Y, para que "realmente pague más quien tiene más", el conglomerado propone "incrementar fuertemente" los tributos a viviendas y "autos lujosos", bancos, grandes supermercados y shoppings, hoteles lujosos, casinos privados, "grandes fortunas" y zonas francas. Junto a eso, la eliminación de las exoneraciones impositivas a los "grandes capitales".
Del otro lado, las familias con ingresos inferiores a una canasta familiar no deberán pagar contribución inmobiliaria por la vivienda en la que habiten. "Por el contrario, los terratenientes urbanos, que poseen múltiples viviendas para especular, deben pagar mayores impuestos", se asegura.
El programa de UP-FT incluye un frigorífico municipal y expendios en todos los barrios, que deberán vender a precios subsidiados alimentos de todo tipo. También se propone la instalación de una planta procesadora de frutas y verduras y otra de pescado.
Según el partido, la eventual conquista de posiciones en intendencias, juntas departamentales municipios significaría un "punto de apoyo fundamental en la lucha de los trabajadores. Así, la UP-FT promete utilizar esas posiciones como una "herramienta de cambio de realidad", planteando soluciones y alternativas para los "problemas de nuestro pueblo", a la vez de convertirlas en una "tribuna para denunciar las políticas de beneficio al gran capital y ayudar a la movilización del pueblo explotado".
"Los partidos que alternaron el gobierno nacional y en las departamentales aplican en lo esencial el mismo programa político de sometimiento al Fondo Monetario Internacional", afirma la UP-FT en su programa. "No nos postulamos como nuevos gestores de la misma política capitalista, sino que impulsamos la construcción de una alternativa de los explotados", se afirma.