El director del Banco de Previsión Social (BPS) en representación del sector empresarial, José Pereyra, y el abogado Rodolfo Saldain —corredactor del proyecto de reforma del sistema jubilatorio a estudio del Parlamento— se enfrascaron en las últimas horas en una discusión virtual luego que el jerarca acusara al jurista de determinadas prácticas alejadas de la ética mientras integró el directorio del organismo.
Todo comenzó cuando Pereyra utilizó este lunes su cuenta de Twitter para denunciar el "clientelismo" que, afirma, imperaba en el organismo por parte de los directores políticos y una serie de "prácticas" a las que los representantes sociales le pusieron fin a partir de 1992.
Entre ellas, que cada director pudiera otorgar 25 jubilaciones por mes y utilizar una tarjeta de crédito a cargo de la entidad. "El presidente del BPS era Saldain, el impulsor de la reforma", recordó el representante empresarial.
🚦CLIENTELISMO. Los directores sociales en 1992 pusieron fin a prácticas realizadas por los representantes políticos en el organismo:
— (Pepe) José Andrés Pereyra De Brun (@pereyradebrun) February 20, 2023
otorgar discrecionalmente 25 jubilaciones por mes y utilizar tarjeta de crédito. El Presidente de #BPS era @r_saldain (impulsor de la Reforma). pic.twitter.com/jYRRy4Q3En
Pereyra, firme opositor a la reforma corredactada por Saldain y que se identifica con el Movimiento Un Solo Uruguay, insistió. "Está en las resoluciones de la época", aseguró. También, apuntó, en un libro que recoge la historia de 20 años de representación sociial en el BPS, el que sostiene consta esa medida. Libro que, señaló, nunca ha sido negado ni cuestionado.
Al respecto mostró una página de esa obra, cuyos autores fueron Silvana Harriett y Gabriel Bucheli, en donde se destaca el rol del dirigente Héctor da Prá en el "comienzo de la experiencia de participación social" en el BPS y su preocupación por la "transparencia y la eficiencia" en la institución. Allí aparecen sus esfuerzos por eliminar la posibilidad de cada director pudiera dar trámite privilegiado a 25 expedientes jubilatorios por mes y la devolución de la tarjeta de crédito Mastercard que utilizaban con cargo al banco.
Pereyra había señalado esta acusación en el propio Parlamento, cuando a principios de este mes le tocó concurrir a la comisión especial que en la Cámara de Diputados analiza el proyecto de reforma del sistema de la seguridad social, del que Saldain es precisamente uno de los redactores.
"En 1992, cuando entran lo representantes sociales al BPS, el presidente era el señor Saldain", recordó. "Y lo primero que le dijeron a Saldain —que hoy pasado el tiempo termina corredactando la reforma— fue: 'Señor Saldain, nones, eh!". Según Pereyra, los tres directores sociales se impusieron y dijeron: "No, tarjeta corporativa señor Saldain, no".
Por la misma vía, Saldain afirmó que lo dicho por Pereyra es "absolutamente falso". El abogado rechazó en ese sentido la existencia de tarjetas de crédito en los nueve años que integró el directorio. También ratificó que en los años previos, como miembro de la minoría, "fui parte activa en eliminar prácticas clientelísticas propias de otras épocas".
Falso. En 1992 el gobierno de Lacalle Herrera integró el directorio del BPS con representantes de trabajadores, empresarios y jubilados. En los años previos, como miembro en minoría del directorio, fui parte activa de eliminar prácticas clientelísticas propias de otras épocas. https://t.co/IqJV5zUN5Y
— Rodolfo Saldain (@r_saldain) February 21, 2023
"Es un invento total", dijo el abogado a El País. Allí recordó que el "pronto despacho" —como se conocía a las gestiones para agilizar jubilaciones—era algo propio de la década de 1960 que "nunca ví en la práctica" en los años que integró el directorio. Saldain apuntó además que, en ese puesto, "jamás tuve tarjeta de crédito".
El representante empresarial acusó además a Saldain de haber ocupado "dos mostradores" al haber integrado al mismo tiempo el directorio del banco y ser empleado de la empresa ANDA.
Allí. apelando a una publicación de Búsqueda de 1993, aseguró que cuatro catedráticos de Derecho Constitucional plantearon que quien ocupara la presidencia del BPS no podía ser parte al mismo tiempo de "uno de los proveeedores" y de una institución bajo control del propio banco.
Al respecto, Saldain explicó que ingresó a ANDA en 1976. En 1982, contó, fue detenido tras haber intervenido en una acto político organizado por los movimientos Por la Patria y Nacional de Rocha bajo el sector ACF para las elecciones internas de ese año. "Se ve que no gustó lo que hablé". Fue procesado por la Justicia militar y preso pro 45 días, tras lo que, dice, fue despedido de la empresa.
Años después, ya retornada la democracia, una comisión investigadora parlamentaria formada a instancias del entonces diputado frenteamplista Eduardo Jaurena (Movimiento Socialista) determinó el reintegro de los que —como él— habían sido despedidos de sus empleos por razones sindicales o políticas.
Saldain ya integraba para esa época el BPS por la minoría, y un informe encargado por el directorio determinó que ambas actividades eran compatibles. El director recordó que tiempo después terminó renunciando a la empresa luego que otro diputado frenteamplista, Thelman Borges (PCU) cuestionara la situación. Eran momentos, apuntó, en que se debatía la propuesta de reformas impulsadas por el gobierno de Luis Lacalle Herrera por lo que, "para no entreverar la discusión", optó por renunciar a ANDA. Así, continuó en el directorio del banco hasta enero de 1993, cuando retornó a la actividad profesional.
Consultado, el abogado dijo desconocer el motivo de las acusaciones de Pereyra y descartó emprender cualquier tipo de acción en ese sentido. "No vale la pena, ya está", concluyó.