Redacción El País
Ya quedan pocos detalles a afinar para el debate presidencial donde Yamandú Orsi (Frente Amplio) y Álvaro Delgado (Partido Nacional)estarán cara a cara una semana antes de las elecciones. El evento durará alrededor de una hora y media —la ley establece un máximo de dos horas— y, aunque no habrá interrupciones, la nueva dinámica hará que se puedan responder más en cada uno de los bloques temáticos.
En una reunión en la Corte Electoral, los comandos de campaña oficializaron el viernes cuáles serán los bloques temáticos que abordarán los presidenciables. Se tratarán en el siguiente orden: desarrollo humano —incluidos los temas salud, vivienda, deporte, cultura y discapacidad—, seguridad —convivencia, narcotráfico, cárceles—, economía —macroeconomía, inserción internacional y producción—, educación y la innovación, y trabajo —mercado laboral y seguridad social.
Así lo explicó el viernes de tarde el presidente de la Corte Electoral Wilfredo Penco después de la reunión, y adelantó qué esperar del debate. Primero habrá un mensaje inicial de la Corte Electoral —al igual que en 2019—, y después cada uno tendrá un espacio libre para hablarle a la población.
En una etapa siguiente, se comenzará con los bloques temáticos, siendo el primero desarrollo humano. Una particularidad del debate es que, aunque no se pueden interrumpir, hablarán más intercalado que en la edición de 2019. Primero cada uno tendrá tres minutos, después dos minutos y por último un minuto de cierre de la temática. Así en cada uno de los cinco bloques.
Por último, cada candidato tendrá espacio para dar un mensaje final. Aún queda por definir un punto central: quién será el último presidenciable en tener la palabra. Esto se resolverá por sorteo en un próximo encuentro el martes a las 13:00, el que estiman que será la última reunión antes del debate presidencial a realizarse el domingo 17 en horario central.
Los candidatos comenzarán a llegar después de las 19:30 del domingo, y cada uno podrá estar acompañado de seis asesores más un fotógrafo en el estudio. Además, más allá de esas seis personas, podrán invitar a otras 20 personas para que estén en el lugar donde se realizará.
En la reunión que se hará el martes en la Corte Electoral, además, se especificará quiénes serán los moderadores del debate, para lo cual habrá paridad de género. Ante la consulta a Penco de si los periodistas van a poder hacer repreguntas, contestó que se definirá en ese encuentro pero que, “en principio, la mecánica será similar a la de hace cinco años”.
Otra de las particularidades —que es igual a 2019— es que durante las tandas comerciales no habrá propaganda electoral.
Por otra parte, Penco comentó que la idea es que el debate se “desarrolle con normalidad, tranquilidad y seriedad”. Y que, “más que una discusión entre candidatos”, la idea es que “puedan exponer sus puntos de vista sobre estos temas que son fundamentales para el país”.
También indicó que “hay un muy buen ambiente de entendimiento entre los representantes de los candidatos”, lo que “facilita mucho el trabajo” porque la “ley plantea” que, si bien la Corte Electoral es la “competente en el tema” y establece que es en consulta con la Asociación de la Prensa Uruguaya y el Servicio de Comunicación Audiovisual Nacional, también dice que “tratará de establecer normas” con los comandos de campaña.
Esa ley, además, determina que el debate “deberá observar los principios de trato equitativo e imparcial para con los participantes, así como garantizar la efectiva exposición e intercambio de posiciones entre estos y los periodistas que puedan intervenir, según la modalidad de organización que se disponga”.
Así como también establece que, si un presidenciable no quiere participar (algo que no sucederá en esta ocasión), no recibirá el dinero que da el Estado para los gastos de la segunda elección nacional prevista, que son 10 unidades indexadas ($ 61,3 a la fecha) por cada voto válido emitido a favor de las candidaturas.
El próximo 24 de noviembre la ciudadanía decidirá si Yamandú Orsi (Frente Amplio) o Álvaro Delgado (Partido Nacional) será el próximo presidente. De cara a las elecciones, el presidente de la Corte Electoral, Wilfredo Penco, contó que trabajan con “mucha intensidad”, y que “facilita mucho la labor” la experiencia del llamado a las urnas del 27 de octubre.
La “facilidad” está dada —explicó Penco— en que “casi todos los miembros de las comisiones receptoras de votos que estarán el 24 de noviembre ya estuvieron el 27 de octubre”. No obstante, aclaró que se volverá a hacer una capacitación ya que “no es la misma la elección”.
Además, a los planes circuitales —dónde vota cada persona— les hicieron “mínimos ajustes”.
Penco, ante la consulta de a qué hora se podrá conocer el resultado, respondió: “La Corte Electoral ha implementado técnicas de transmisión de resultados directamente desde las comisiones receptoras de votos —aunque no en todos lados—, lo que facilita mucho. Pero sobre todo en una elección que, si bien será obligatoria y habrá una muy alta participación, son dos hojas de votación. Por lo tanto, la transmisión (de los resultados) por supuesto llegará mucho antes”.