Redacción El País
La Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU) se desmarcó de las críticas que hicieron otras gremiales a las pautas salariales que marcó el gobierno hace una semana. El presidente de la gremial, el ingeniero Alejandro Ruibal, descartó una “disconformidad” con los lineamientos que presentó la administración de Yamandú Orsi.
Si bien el convenio salarial de la construcción vence en abril de 2026, por lo que queda tiempo aún para ver cómo se aplicarían las pautas anunciadas, ya comenzaron los análisis desde la gremial de la construcción al iniciar una nueva ronda de los Consejos de Salarios
“No estamos manifestando disconformidad con la pauta como sí hizo alguna otra gremial, porque primero lo queremos estudiar más a fondo y queremos ver cómo aplica a nuestra industria”, dijo Ruibal a El País.
Además de considerar que se requiere un análisis mayor, el ingeniero marcó que las pautas planteadas por el Poder Ejecutiva “van en línea con lo que el gobierno anunció de una inflación baja” durante el período de gobierno.
“Acostumbrémonos a convivir con la inflación baja, es lo que nos dijo el ministro de Economía; bueno tenemos que acostumbrarnos a convivir con pautas de estas características, en un mundo con inflación baja”, sostuvo el titular de la gremial.
Con respecto a los lineamientos de dar mayor aumento a los salarios más sumergidos, “es lo que dijo el gobierno, y por eso ganó las elecciones”, marcó Ruibal. “No estamos en contra de ese concepto, hay que ver cómo se aplica a nuestra industria”, añadió, respecto a la pauta diferencial por franjas.
La idea del gobierno, según planteó, es que haya un incremento del salario real —un aumento por encima de la inflación— en la mayoría de los casos, pero sobre todo en los salarios más sumergidos.
El gobierno planteó dividir a los asalariados privados en tres franjas: una que va hasta $ 38.950 —que nuclea a cerca del 30% de los trabajadores—, otra desde ese monto a $ 165.228 —en la que están el 64% de los privados—, y otra desde ese monto en adelante —grupo en el que hay un porcentaje menor de la población—, tal como informó El País.
“Vemos bien la lucha contra la inflación baja y que se cumpla con el formato de franjas. Ahora, yo redoblo la apuesta: creemos que esto debe venir acompañado con una agenda de inversión y desarrollo del país”, manifestó Ruibal.
Agencia de infraestructura en la mira del gobierno
El titular de la Cámara de la Construcción ha insistido desde mediados de 2023 con la creación de una agencia estatal de infraestructura. Con la mira puesta en generar un “banco” de los proyectos más relevantes para el desarrollo nacional, que supongan una especie de “menú” para el gobernante de turno.
El ingeniero destacó que esta iniciativa está inspirada en agencias que ya existen en Australia, Canadá, Nueva Zelanda e Inglaterra, entre otros países. Y aclaró que no se está buscando ni “más burocracia”, así como tampoco “más empleados públicos”, sino que implicaría “reasignar” recursos para este tipo de agencia.
A casi dos años del planteo, Ruibal dijo a El País que el gobierno le ha manifestado que ven “con buenos ojos” la iniciativa, y estimó que se está analizando “dónde alojar” esta nueva agencia. El planteo original de la gremial es incluirla bajo el paraguas de la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND).