Publicidad

Cabildo Abierto vota la Rendición de Cuentas luego de acordar discutir sus reclamos en el Senado

Los cabildantes habían trancado la negociación este lunes dejando en claro que no votarían el proyecto sí allí no se incluía otorgar incrementos salariales, compensaciones y recursos a militares.

Compartir esta noticia
Diputados votan proyecto de Rendición de Cuentas
Diputados votan proyecto de Rendición de Cuentas.
Foto: Francisco Flores

El gobierno logró zurcir in extremis esta medianoche un acuerdo y salvó la Rendición de Cuentas en la Cámara de Representantes. El voto de Cabildo Abierto, vital para el resultado, llegó luego de que un “acuerdo no explícito” estableciera el compromiso de que los reclamos que los liderados por Guido Manini Ríos pretendían incluir en el mensaje presupuestal en la cámara baja sean discutidos y, eventualmente, aprobados en el Senado.

Los cabildantes habían trancado la negociación este lunes dejando en claro que no votarían el proyecto sí allí no se incluía unos $ 500 millones para otorgar incrementos salariales al personal de las Fuerzas Armadas, compensaciones en el Hospital Militar y recursos para la atención mental de los militares. El compromiso, en el que trabajaron durante toda la jornada el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, y el presidente de Diputados, Sebastián Andújar, es explorar las posibilidades de dar esos recursos en la cámara alta. “No es más que trabajar en los pedidos que ellos tienen en el Senado, reconociendo que hasta ahora no habían sido atendidos”, relató un legislador oficialista a El País. Las idas y vueltas de la jornada arrojaban un panorama sombrío para los intereses del gobierno. “No hay más que los US$ 15 millones” anunciaba a media tarde, inflexible, el director de Finanzas Públicas del Ministerio de Economía y Finanzas, Fernando Blanco. El jerarca acudió al Parlamento a negociar una vez más con los diputados de la coalición y hacía esa aclaración vía telefónica a uno de los interlocutores que buscaban el acuerdo. Blanco se refería a la cifra máxima que la cartera estuvo dispuesta a conceder, que equivalía a todas las reasignaciones acordadas por el oficialismo más la partida de los US$ 3 millones para incorporar al Hospital de Clínicas en el Plan de Salud Mental y Adicciones que busca implementar el gobierno. Eso dejaba fuera de toda posibilidad la eventual inclusión de los reclamos cabildantes en la Rendición.

En un mensaje a la coalición el jerarca fue claro: “Esto debe resolverse en el Senado”.

No obstante, Blanco también mantenía la expectativa por un cambio de actitud en los socios díscolos de la coalición. “¿Va a votar Manini?”, preguntó a los periodistas que aguardaban novedades en el ambulatorio de la Cámara de Representantes.

Manini pasó gran parte de la jornada en su despacho, observando la evolución de los acontecimientos. Ya de tardecita el líder de Cabildo Abierto veía posible el acuerdo. El senador le había adelantado a El País que, de existir un compromiso firme para que sus reclamos sean atendidos en el Senado, su partido votaría la Rendición de Cuentas en la cámara baja. Aunque, en una rueda de prensa en la puerta de su despacho, mantuvo públicamente su tesitura de hacer fracasar el proyecto si sus demandas no eran contempladas. “Los recursos tienen que aparecer, tienen que estar”, reclamaba el conductor de Cabildo Abierto. Allí apuntó específicamente al ministro de Defensa, Javier García: “El sábado pasado se nos anuncia que no había recursos en incluso que el propio ministro no estaba de acuerdo con que se otorgaran esos recursos”, señaló. “Acá no estamos pidiendo nada disparatado”, aseguró el senador. El incremento salarial, dijo, representará una “señal en el olvido”. Manini relativizó el impacto que su negativa a votar la Rendición de Cuentas tendría, tanto para la gestión del gobierno como para el futuro de la coalición. Es que si Cabildo Abierto no votaba, el proyecto fracasaría al no contar con los votos suficientes para llegar a la mayoría ya que el Frente Amplio se opondría, como lo hizo. No habría vuelta atrás, y todo el Estado debería conformarse con el presupuesto votado en 2022. El propio Plan de Salud Mental y de Adicciones, impulsado por el presidente Luis Lacalle Pou y que cuenta con una partida de US$ 20 millones, no podría implementarse por la falta de esos recursos.

Por otro lado, los ministros que representan a Cabildo Abierto que habían firmado el proyecto de ley quedaban en falsa escuadra. Así lo hizo notar el senador nacionalista Jorge Gandini, molesto con la actitud cabildante. “Supongo que los ministros de Cabildo se tendrán que ir”, dijo Gandini en rueda de prensa, en referencia a Raúl Lozano (Vivienda) y Karina Rando (Salud Pública).

En el Partido Colorado, el diputado Conrado Rodríguez recordó que no era la primera vez que desde filas cabildantes se trancaba hasta último momento un proyecto de ley clave para los intereses del gobierno. “Estamos bastante acostumbrados a estos tironeos”, se quejó Rodríguez, al señalar que “cansa” este tipo de accionar.

Finalmente, sobre la medianoche el proyecto fue aprobado con los votos del oficialismo.

Nosotros hemos hecho planteos hace ya un buen tiempo sobre la necesidad del aumento de salarios militares. (...) Acá no estamos pidiendo nada disparatado. (Buscamos) darles una señal a estos servidores públicos que están permanentemente exigidos, que son los que cumplen la mayor carga horaria, que están permanentemente a disposición y con misiones nuevas prácticamente que a cada rato.

Estamos bastante acostumbrados a estos tironeos. (...) No creo que la situación interna de un partido defina lo que se va a votar finalmente en una Rendición de Cuentas. Hay que comprometerse por el país. No puede ocurrir que la política de salud mental y adicciones no tenga recursos, porque si (la Rendición) no se vota en general no va a haber partida incremental para esto.
Si Cabildo Abierto no vota la Rendición de Cuentas dejan al país sin cambios, sin ajustes presupuestales para el próximo año y creo que eso no lo van a hacer porque eso implicaría votar en contra también en los ministerios de Salud Pública y Vivienda. (...) Creo que Cabildo analiza la posibilidad de no votar las reasignaciones. Eso se puede rever en el Senado.

Otra discusión de 45 días

El cronograma fijado por el Parlamento indica que hoy la Cámara de Representantes comience a votar, uno por uno, los 442 artículos más los aditivos incorporados en la Rendición de Cuentas. El 57% será apoyado también por el Frente Amplio.

Para finalizar este proceso el plazo constitucional con el que cuenta la cámara baja vencerá en la medianoche de este viernes. La discusión quedará entonces en manos del Senado, que recibirá oficialmente el texto en la sesión del próximo martes 22 de agosto. Allí el texto será enviado a la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda, que repetirá el largo proceso desarrollado del otro lado del Palacio Legislativo. Allí habrá otros 45 días de discusión. Como se prevén cambios, el proyecto deberá volver luego a Diputados para su sanción definitiva.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad