Redacción El País
El senador por el Partido Nacional y exintendente de Cerro Largo, Sergio Botana, pidió al presidente del directorio nacionalista, Álvaro Delgado, "que ni se meta" en los conflictos internos del partido en el departamento de Cerro Largo.
"Que ni se meta en Cerro Largo. Faltaba más. ¿Qué autoridad puede tener Álvaro Delgado para venir a hablar de temas internos?", aseguró Botana en entrevista con Desayunos Informales (Canal 12).
En ese sentido, recordó "una frase de Luis Alberto de Herrera": "El puchero de cada departamento se cocina en cada departamento". Las declaraciones de Botana se dan en el marco del cruce de acusaciones entre el nuevo intendente arachán, Christian Morel, y sus acusaciones a la administración anterior, encabezada por José Yurramendi.
Cuestionamientos en la interna nacionalista de Cerro Largo
Morel asegura que José Yurramendi, a quien le ganó las elecciones, dejó una “situación económica muy delicada” y con casi 500 funcionarios de más. Ese escenario, según dijo, pone en riesgo la capacidad de pago de los salarios de julio porque la comuna arachana tiene cortado los créditos bancarios.
Estos reclamos cruzados entre administraciones es algo que comenzó a preocupar a la conducción del Partido Nacional, tal como informara El País. Y reconocieron que el caso de Cerro Largo arrastra una puja interna desde hace un tiempo. Cabe recordar que Morel fue alcalde del Municipio de Río Branco, mientras Yurramendi era intendente en Cerro Largo.
En una rueda de prensa días atrás, Morel dijo que la intendencia tiene una deuda de $ 1.610 millones con "diferentes organismos y proveedores", lo que se traduce en algo más de US$ 40.000.000. Esto "hace a que la situación económica sea muy delicada" porque "la cuenta en Ancap" está "cerrada" y la comuna no puede "contar con combustibles". También están "lo créditos bancarios cerrados" y no hay "dinero para afrontar el pago de sueldos". Dijo que espera resolver en parte la situación en estos días que faltan para finalizar el mes y cumplir con las obligaciones.
Morel dijo que es necesario hacer una "reestructura en el manejo de los dineros". Como primera medida admitió que "lamentablemente por unos meses" habrá un "corte en la parte cultural y deportiva" y también en parte de la pata social de la comuna. También reconoció que pedirá "colaboración a locales" que son alquilados por la intendencia.
A largo plazo prevé una reestructura a nivel de recursos humanos: "Estamos pasados en 400 o 500 funcionarios, yo pensé que eran 300. Pero no es ese el número que vamos a cesar. Estamos haciendo todos los ajustes, acortando algunos gastos. Lo menos que quiero tocar es el material humano".
De momento ya fueron cesados "70 u 80" funcionarios. "Capaz hubiéramos cesado menos si hubieran renunciado algunos que tendrían que haber renunciado", expresó Morel.
En este sentido, lanzó una crítica a su antecesor: "Otras intendencias tienen superávit y la nuestra, déficit".
El flamante jerarca superó por más de 3.000 votos a Yurramendi en la interna del Partido Nacional en Cerro Largo, un giro importante dentro del oficialismo departamental, pese a que el exintendente contaba con el apoyo del senador Sergio Botana.
La respuesta de Yurramendi a Morel por la crisis económica de la Intendencia de Cerro Largo
En diálogo con Las cosas en su sitio (radio Sarandí), Yurramendi respondió a la mayor parte de los cuestionamientos. Dijo que se trata de una "picardía política" de Morel con la intención de "abrir un paraguas para generar medidas drásticas como cese de personal".
Sobre la interna del partido en su departamento, resumió: "Las diferencias en Cerro Largo entre los blancos son de toda la vida, es parte de nuestra esencia".
Acerca de la deuda de US$ 40 millones, Yurramendi aseguró que por deudas generadas en administraciones anteriores hubo que "generar un fideicomiso" para pagarle a proveedores, y que "seguramente" ese fideicomiso represente "la mitad de la deuda" actual.
Por otro lado, mencionó el "trabajo que se hizo de recambio de luminarias en todo el departamento que se va a ir pagando en el tiempo con el ahorro energético", y mientras tanto "figura en los balances negativos" hasta que se cancele el pago.
"Lo mismo la deuda con el Banco de Seguros del Estado, que nosotros pusimos nuevamente a los funcionarios municipales y a los vehículos en regla, que no existía hace más de diez años. Lo mismo una deuda con Antel, deudas que viene cargando la intendencia desde hace muchos años", apuntó.
Por otro lado, desmintió que haya una gran deuda con Ancap porque la empresa pública "no acumula deuda" sino que solo acepta pagos a mes vencido. "Es como la UTE de tu casa: si no pagás, te corta. Ese consumo es el mensual de la intendencia entre combustible y derivados de petróleo que se usa para hacer bitumen y asfalto para obra pública", explicó.
Yurramendi reconoció que su administración tuvo "déficit", pero aseguró que en eso influyó la pandemia. Mencionó que cuando asumió, en plena crisis mundial, no pensó "correr 200 personas para equilibrar el déficit".
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