MEDICIÓN

El apoyo de los uruguayos a la democracia cayó nueve puntos en 2018 según el Latinobarómetro, y es el nivel más bajo desde 1995

El apoyo de los uruguayos a la democracia cayó nueve puntos en 2018 según el Latinobarómetro, y es el nivel más bajo desde 1995 cuando comenzó a realizarse la medición. En total el 61% de los uruguayos apoya la democracia. En 2017 esa cifra era de 70%. El pico se alcanzó en 1997 con un 86% de aceptación.

Pese a la baja en el apoyo a la democracia solo un 18% se muestra indiferente a tener un régimen democrático o no democrático ubicándose entre los países menos indiferentes. El régimen autoritario, en tanto, es apoyado por un 16%, según el Latinobarómetro que se basa en una encuesta realizada por Equipos en Uruguay.

La tendencia de lo que ocurre en el país se replica a nivel de la región. Entre 2018 y 2017 el apoyo a la democracia cayó 19 puntos en Paraguay y Ecuador, 10 puntos en Argentina y República Dominicana y 9 puntos en Brasil además de Uruguay.

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Según el Latinobarómetro en la región "han abandonado el apoyo al régimen democrático y prefieren ser indiferentes al tipo de régimen, alejándose de la política, la democracia y sus instituciones". Y agrega que los indicadores muestran "un declive por indiferencia" lo que implica que "son estos indiferentes que votan los que están produciendo los cambios políticos, sin lealtad ideológica ni partidaria y con volatilidad".

Desde 2010 el apoyo a la democracia declina de manera sistemática año a año hasta llegar al 48% en 2018. Al mismo tiempo desde 2010 aumenta de manera sistemática aquellos ciudadanos que se declaran u201cindiferentesu201d al tipo de régimen, pasando del 16% en 2010 al 28% en 2018. La alternativa de este indicador, que recoge las actitudes de quienes prefieren un régimen autoritario, no presenta variaciones muy significativas a lo largo del tiempo, permaneciendo entre un máximo de 17% en siete años diferentes a un mínimo de 13% en 2017, recuperándose a 15% en 2018.

Hay sólo cuatro países en que el apoyo a la democracia se mantiene igual y sorprendentemente en Nicaragua aumenta 11 puntos porcentuales, de 40% a 51% entre 2017 y 2018. En Venezuela, si bien el apoyo a la democracia bajó tres puntos, el porcentaje es de 75%, siendo el más alto de América Latina.

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En ninguno de los países encuestados se llega al 30% de encuestados que consideren "buena" su situación económica. El mejor posicionado es Chile, con el 26%, seguido por Uruguay con el 21. En este sentido, hay siete países (México, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Argentina, Brasil y Venezuela) que no llegan al 10%.

La calificación de buena o muy buena en la situación económica de América Latina pasó de 25% en 2013 a 12% en 2018. La mala, en cambio, llega al 42%.

Al preguntar sobre las expectativas económicas de las naciones, la situación cambia, ya que el 45% de los latinoamericanos consideran que mejorará su situación económica en un futuro. Brasil y República Dominicana son los más optimistas, llegando al 58%, mientras que Uruguay se encuentra entre los más pesimistas con el 34%, al mismo nivel de El Salvador y Venezuela, solo por encima de Argentina (33%). De todos modos, como la expectativa de que la situación económica de los uruguayos empeore es del 14%, por lo que el saldo neto es de 20 puntos.