INSEGURIDAD
La esposa del hombre que atendía el comercio estaba en el fondo y escuchó al menos tres tiros: cuando llegó encontró a su marido herido en el piso y minutos después murió. Otra persona resultó herida y también falleció: investigan si era un cliente o si era uno de los delincuentes.
En la noche de ayer sábado delincuentes mataron a un almacenero que trabajaba en su comercio de avenida La Estación y Luis Alberto de Herrera, en Toledo.
El hombre tenía 61 años y fue sorprendido por los desconocidos sobre las 23 horas.
Su esposa, que se encontraba en el fondo en su vivienda, contó a la Policía que escuchó al menos tres disparos y cuando fue a ver qué estaba sucediendo encontró a su pareja, ya herido y en el suelo detrás del mostrador. Él le dijo que se agache. Ella se agachó y llegó a escuchar que del otro lado los sujetos decían "vamos, vamos".
Fuentes policiales señalaron a El País que una vez que los rapiñeros se fueron, la mujer vio del otro lado del mostrador a un hombre también herido, pero aún con vida. Su esposo, en tanto, murió en el lugar y así lo confirmaron los médicos que llegaron momentos después.
El herido fue estabilizado por los médicos de la emergencia móvil y trasladado al Hospital de Clínicas con guardia policial. Tenía un balazo en la cabeza y momentos después falleció en el centro de salud.
La Policía investiga si esta persona era un cliente o si era uno de los delincuentes, según informa la Jefatura de Policía de Canelones.
La esposa del almacenero entregó a la Policía un arma de fuego que era propiedad del hombre.
El comercio tiene cámaras de seguridad, pero no funcionan correctamente por lo que lo sucedido no quedó registrado.