Redacción El País
Los buzos que integraban el equipo de búsqueda encontraron casi a las 11:00 de la mañana de este viernes los cuerpos de los niños Alfonsina Morosini Ramos, de dos años, y de Francisco Alexander Morosini Ramos, de seis, que fueron llevados a la fuerza por su padre, Andrés Morosini Rechoppa, también hallado muerto.
Fuentes al tanto de la investigación indicaron que los buzos —que trabajan para la Armada Nacional— divisaron el auto y, al acercarse, encontraron los tres cuerpos dentro del vehículo.
Primero se procedió a retirar los cuerpos, y luego se continuó con la tarea de retirar el auto, que estaba sumergido tres metros.
Los cuerpos fueron hallados en el arroyo Don Esteban, en las inmediaciones de un puente en la ruta 20, en el kilómetro 58, en el departamento de Río Negro, a donde Andrés Morosini huyó con los niños luego de retirarlos a la fuerza de la casa de su madre en Mercedes, Soriano.
Aguardan pericias para determinar la causa de las muertes
Ahora los investigadores aguardarán el resultado de las pericias para conocer con exactitud la causa de las muertes.
Se sabía que el auto en que el padre se llevó a los niños fue registrado por las cámaras huyendo desde Mercedes, pasando por el peaje en ruta 2, hacia Fray Bentos. Por este motivo se interpretaba que tenía programada la ruta de huida.
Luego de pasar por el peaje, el BYD rojo de Morosini fue visto en otras dos rutas en el departamento de Río Negro, pero la Policía evitó dar más detalles para no entorpecer la búsqueda.
Algunas pistas hicieron que la búsqueda se concentrara en el arroyo Don Esteban, cerca de la ruta 20. Finalmente los investigadores encontraron el auto sumergido a tres metros de profundidad y, dentro de él, los tres cuerpos.
Según informó Canal 10, la ruta 20, cerca de las inmediaciones del puente sobre el arroyo Don Esteban, se cortó al tránsito y se formó un perímetro en la escena del crimen al que solo pueden entrar los investigadores y los familiares de las víctimas, que acaban de llegar.
Qué es la violencia vicaria
Los asesinatos de Alfonsina y Francisco se enmarcan en un caso de violencia vicaria, que implica ejercer violencia contra niños en el marco de un caso de violencia de género.
Este tipo de violencia tiene como objetivo, en general, dañar a la madre de los niños, a través de sus hijos. En la peor de las situaciones, la violencia termina en un asesinato, como es fue este caso.
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