Redacción El País
Este martes declararon en la Prefectura de Trouville dos de los 15 pasajeros que viajaban en el ómnibus de Cutcsa que el pasado sábado 26 circuló a alta velocidad y a contramano por Avenida Brasil, impactó contra la rambla y terminó en la playa Pocitos.
Quienes declararon fueron Eloísa y Enzo, los jóvenes que, como se ve en la filmación, se acercan al conductor y tuvieron un breve diálogo con él poco antes del impacto. Las imágenes muestran la desesperación de los pasajeros al observar que el ómnibus iba más rápido de lo habitual y en la senda contraria.
En el video se ve claramente a una mujer que intenta alertar al chofer. Luego, otro pasajero la saca del frente del ómnibus para evitar que, en el impacto, se diera contra el parabrisas.
El abogado, Rafael Silva, cuyo equipo representa a ocho de las víctimas, explicó en rueda de prensa que sus clientes se quebraron varias veces durante la audiencia y debieron pararla. No obstante, la instancia podría volver a repetirse en Fiscalía.
Según Silva, sus clientes no recibieron "ninguna respuesta correlativa a los pedidos de auxilio o de detención" por parte del chofer cuando ellos se acercaron a hablar con él. Por esto, a juicio de Silva, resta conocer "lo que tiene para aportar el chofer". Previo a esta instancia, Silva había adelantado que Enzo y Eloísa declararían "más o menos en la misma línea de otros testimonios que se han recogido en relación a que el conductor parecía muy consciente de esta situación".
Según dijo, sus clientes "trataron de ser lo más detallistas posible y de no omitir ningún dato que pueda ser relevante". A la reconstrucción del siniestro, los jóvenes sumaron un "breve relato de cómo están vivenciando hasta el día de la fecha" el hecho, desde el punto de vista emocional, sumado a las lesiones que padecieron como consecuencia del accidente.
Silva explicó que su equipo trabaja sobre tres teorías del caso y que aún necesitan procesar la información que se extraiga de la pericia mecánica. No obstante, apuntó a que ellos no se quedarán "solo con lo que digan los informes" y que el fiscal puede pedir una ampliación de estas pericias. Tras ser retirado de la playa, el vehículo siniestrado fue guardado en un depósito en el que se le hacen las pericias correspondientes. Tiene una custodia que va rotando cada seis horas.
La defensa insistió en que las víctimas y los usuarios en general del transporte público, "se merecen una investigación con la más alta calidad".
El pasado sábado, y una semana después del accidente, falleció una de las pasajeras. Tenía 55 años y se encontraba internada en el CTI de Médica Uruguaya. Así lo confirmó a El País el vocero de Relaciones Públicas de Prefectura y también el abogado de la víctima, Leonardo Narancio.
Según Narancio, la mujer había tomado el ómnibus 121 de Cutcsa para dirigirse a su trabajo. Al chocar el vehículo, la mujer sufrió fuertes golpes en los riñones y una de sus piernas quedó seriamente comprometida. El viernes, los médicos le realizaron una operación para amputarle esa pierna pero falleció sobre las 8 de la mañana del sábado.
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