Este contenido es exclusivo para nuestros suscriptores.
Una nueva denuncia se presentó contra la agente de Bolsa, Sara Goldring. El sábado 1, un inversionista portugués concurrió a la seccional 6° a denunciar a Goldring por los delitos de estafa y apropiación indebida.
El escrito, al que accedió El País y fue elaborado por la abogada Cristina Herdt, sostiene que el denunciante es un prestigioso empresario cliente del estudio de Sara Goldring de Cukier desde hace más de 20 años.
El documento sostiene que dado que era conocido en el medio uruguayo que Goldring tenía prestigio y amplios conocimientos sobre inversiones, confió en el mismo para que administrase sus ahorros.
Y agrega que las inversiones en acciones, valores de oferta pública, bonos, etcétera, Goldring las hacía a través de dos sociedades anónimas uruguayas -Custodia de Valores Mobiliarios Corredor de Bolsa S.A. y United Brokers S.A Agente de Valores.
La correduría de Goldring, afirma el escrito, promocionaba a sus clientes la realización de inversiones que ella calificaba de rentables y seguras.
“Dada la especialidad y conocimientos en la materia de inversiones de la denunciada, el destino a dar al dinero confiado por el cliente era decidido exclusivamente por Goldring, quien en calidad de comisionista con la facultad de representación, seleccionaba unilateralmente las inversiones que ofrecía como mejores y más seguras oportunidades de inversión y allí efectuaba las colocaciones de los dineros de los clientes”, advierte la denuncia del empresario portugués.
Es decir, se trató “en todo momento de la administración de dinero ajeno llevada a cabo por Goldring respecto de fondos pertenecientes al denunciante y demás inversores”.
El empresario portugués advierte que las sociedades Custodia de Valores Mobiliarios Corredor de Bolsa S.A. y United Brokers S.A Agente de Valores y sus accionistas Sara Goldring y sus dos hijos conforman “un conjunto económico” con dirección unificada. Agrega que la existencia y conformación del conjunto económico y grupo de sociedades fue constatada expresamente por el Banco Central del Uruguay tras la intervención de ambas firmas.
El empresario relata que confió su dinero a Goldring por la confianza, prestigio y trayectoria del estudio y de sus propietarios. “Confianza que salta a todas luces fue violada y abusada por parte de sus propietarios y administradores en claro perjuicio del derecho del actor (el inversionista portugués)”, expresa la denuncia.
Esquema Ponzi
El denunciante alega que, en virtud de un contrato de comisión general, otorgó un poder-autorización a Sara Goldring -a través de United Brokers S.A. Agente de Valores- para que ésta realizase con el dinero del empresario europeo inversiones que, lógicamente, fueran rentables y seguras.
El escrito expresa que, al 31 de diciembre de 2020, Sara Goldring tenía en su poder, a través de la sociedad United Brokers, la suma de US$ 3.626.122 propiedad del inversionista lusitano en la cuenta individualizada con el número 1966. Un año más tarde, el empresario observó que sus inversiones venían en caída libre. Había perdido casi US$ 1 millones en ese lapso.
Un documento de análisis de rentabilidad enviado por Unidad Brokers al 20 de diciembre de 2021, surge que las inversiones del denunciante alcanzaban los US$ 2.767.393. Seis meses más tarde, la cifra cayó a US$ 151.367. “Es decir, de tener la suma de US$ 3.626.122 (pasó) a US$ 151.367, o sea, el 4,16% de su dinero”, dice el escrito. Agrega que Goldring efectuó inversiones “funestas” y “engañó mediante maquinaciones insidiosas” tendientes a hacer creer al denunciante que su dinero estaba seguro y a resguardo.
El empresario señala que, como lo comprobó el Banco Central del Uruguay, Goldring incurrió “en una conducta gravemente ilícita” conocida en el mundo financiero como “esquema Ponzi”, mediante el cual tomó dinero y valores del denunciante para cubrir pérdidas de otras cuentas.
Habría unos 400 clientes afectados
El 17 de noviembre de 2022, la inversionista de Bolsa, Sara Goldring, declaró en la Fiscalía tras ser denunciada por generar pérdidas superiores a los US$ 100 millones a unos 400 clientes en inversiones de alto riesgo en la Bolsa de Valores y luego no informar a los damnificados sobre esos perjuicios.
Según supo El País, Goldring confesó en la audiencia que dio órdenes a los funcionarios de sus dos empresas -Custodia de Valores Mobiliarios Corredor de Bolsa S. A. y United Brokers S. A. Agente de Valores- para que no brindasen información real a los clientes sobre los quebrantos sufridos por inversiones de alto riesgo a intención. Goldring dijo al entonces fiscal especializado en Delitos Económicos, Enrique Rodríguez, que buscaba evitar “una corrida” de los inversionistas en un intento de recuperar algo de su capital. Goldring señaló al fiscal que, en ese marco, todos los funcionarios de sus empresas se beneficiaron sacando sus inversiones, las de sus familiares y amigos antes del colapso financiero de las dos empresas. Y brindó nombres de funcionarios que se aprovecharon por tener información privilegiada.