CONSEJEROS PROTESTARON
Nuevos consejeros denunciaron una “persecución a docentes” y Silva dijo que “jamás existió intención” de acallar.
La tarde de ayer, en que asumieron los nuevos consejeros del Codicenen representación de los trabajadores, estuvo teñida de una atmósfera más próxima al folclore deportivo que a la solemnidad que caracteriza a un acto de cambio de autoridades. Ni las palabras protocolares de la escribana que dio lectura al acta, ni los sentidos mensajes de los consejeros salientes -a veces al borde del llanto- lograron disimular la disputa reinante en la planta baja de la sede central de la Administración Nacional de Educación Pública. La de ayer fue una tarde de rosados contra celestes y viceversa.
“Nos cuestionan la representatividad y recuperamos los dos lugares en el Codicen. Ahora votamos ‘Sí’ para recuperar los consejos”, rezaba un cartel colocado a la entrada y que llevaba la firma de los sindicatos de la enseñanza. Era solo la antesala a un auditorio colmado -que duplicó la capacidad prevista en el aforo- y en que el público se dividía según el color de sus tapabocas: rosados versus celestes. Porque la asunción de la maestra Daysi Iglesias y el profesor Julián Mazzoni, ambos representantes de los sindicatos de la educación y que ganaron las elecciones el pasado 30 de octubre, congregó en una misma sala a la plana mayor del Pit-Cnt y del sindicalismo docente, a las autoridades del Ministerio de Educación, del Codicen, a representantes de organismos internacionales... y todos parecían jugar su partido hasta en la gestualidad, en los aplausos y los silencios.
Por eso, cuando el profesor Mazzoni dijo en su discurso de asunción que trabajará “para que sea habitual el intercambio (entre el sindicato y el Codicen) y se terminen las acciones de persecución, que muchas veces van por la vía de las direcciones generales u otros cuadros intermedios”, hubo quien desde la tribuna estalló en aplausos. O bien cuando el presidente del Codicen, Robert Silva, le retrucó que “jamás existió la intención de negar la voz de los docentes”, pero que “la participación no debe obstaculizar la toma de decisiones”, hubo quienes -sobre todo sentados en las dos primeras filas- asintieron con la cabeza.
El tiroteo dialéctico estuvo antecedido por las edulcoradas palabras de los consejeros salientes que alentaron la “concordia” y el “enterrar las hachas”. Hasta hubo risas al unísono cuando el saliente Juan Pérez llamó “Daisy Tourné” a la electa “Daysi Iglesias”.
Pero acorde fueron pasando los minutos, y los voceros, el tono de los mensajes subió la apuesta. “Quiero expresar la preocupación por el permanente recorte del presupuesto de la educación pública”, “proclamamos la autonomía como un principio rector de la educación pública en todos los niveles como forma de preservarla de todo interés de carácter político partidario, religioso, económico (incluyendo a los organismos internacionales de crédito)”, y “la llamada transformación curricular nos parece que se ha iniciado el proceso sin tener en cuenta la opinión de los principales actores, lo que pone en duda desde un principio su futuro éxito”, fueron algunas de las frases combativas del consejero Mazzoni.
Por lo bajo, algún abogado de la ANEP revisaba las normas constitucionales y hasta se preguntaba si el novel consejero estaba incurriendo en proselitismo. Pero el presidente del Codicen, Silva, se encargó de dejar en claro que el consejero tenía el derecho a revindicar sus ideas y, en lugar de silenciarlo, redobló la apuesta: “jamás ha existido la voluntad expresa o tácita de negar las asambleas técnico docentes (…) porque una reforma no se hace sin los docentes, pero tampoco se hace solo con los docentes”.
Incluso el ministro de Educación, Pablo Da Silveira, hizo referencia a la LUC y argumentó que la eliminación de los consejos descentralizados (en que había representación docente) “favorece en la agilidad de la toma de decisiones y una menor probabilidad de bloqueos”. En tanto que desde el sindicato cuestionaron que los bloqueos se producen luego, con la generación del conflicto por “falta de diálogo previo”.
Vacunación no cambiará tiempos de cuarentena
El Codicen resolvió que los escolares vacunados y aquellos sin vacunar realicen la misma cuarentena ante el surgimiento de un brote del covid-19 en su aula. Las autoridades educativas y sanitarias acordaron que tomarán solo las recomendaciones del MSP de reducir los tiempos de cuarentenas y de evitar que se hisope a los estudiantes en su reintegro a clases tras el aislamiento, pero no adoptarán el criterio de cuarentenas diferenciales según el estado de inmunización.