Municipio dice que tiene miedo de enviar inspectores y que hubo amenazas.
Luego de recoger distintos comentarios de los vecinos de la feria de Lomas de Solymar, que se realiza los domingos y es la segunda más grande de Canelones, la Junta Departamental recibió al alcalde de Ciudad de la Costa, Mario López Assandri, y al concejal Ángel Rojas.
Las autoridades del Municipio confirmaron varias denuncias y fueron explícitas con respecto a lo que ocurre en esta feria que alberga a más de 2.000 feriantes y convoca a unas 6.000 personas cada fin de semana.
"Allí hemos visto gente que desea trabajar de manera formal y otra que quiere trabajar de manera informal. Y también hemos visto que hay delincuentes trabajando en el lugar. Cuando decimos delincuentes nos referimos a droga, a contrabando. Incluso hemos visto armas. Por lo tanto, esa complejidad no solo debe ser encarada por el accionar del Municipio, sino también de la Intendencia de Canelones y de determinados niveles de seguridad a nivel nacional", dijo López Assandri.
Según el alcalde, la feria de Lomas de Solymar "se ha vuelto un hito" y su regularización implica atacar diferentes problemas. "Algunos podemos enfrentarlos nosotros, pero con respecto a otros necesitamos ayuda, porque no estamos facultados para actuar. Además, no solo se trata de recursos. Creo que allí vivimos una experiencia residual de lo que ocurre en Montevideo. Son temas residuales de la capital", indicó.
En este sentido, sostuvo que "tenemos que pedir a la Policía que vaya a realizar su trabajo de inteligencia respecto al tema de contrabando, tenemos que frenar a la gente que viene de Montevideo a vender lo que le sobra o a aprovechar la oportunidad".
Temor.
El alcalde aseguró que el contralor de lo que sucede en este espacio público excede las potestades del Municipio y que existe temor de enviar a funcionarios municipales a hacer tareas de fiscalización en el lugar.
"(Los vecinos) tienen razón en cuanto a que no pueden salir de sus casas, respecto a que allí se venden armas, a que se venden drogas, a que a veces prepotean y a que se aferran y dominan su espacio; todo eso es cierto. Pero ningún funcionario de la Intendencia puede ir a hacer frente a su agresión ni a todo lo que manejan: armas, drogas… No es fácil meterse si no hay una planificación previa", indicó.
"No va a salir el señor (concejal) Rojas a meterse en la feria porque lo vuelan. ¡Es así! Ya hubo amenazas", destacó López Assandri.
El alcalde, quien fue edil durante 5 años, dijo que conoce muy bien la situación denunciada por los vecinos. "El problema que plantean lo hemos vivido personalmente, porque hace 25 años que funciona la feria y hace 25 años que vivo en Lomas de Solymar. O sea que el planteamiento que hacen los vecinos no me es ajeno. Aparte, tengo experiencia personal en este tema por haberlo vivido directamente durante tanto tiempo. Es más, pegado a la mencionada feria está la sede de la Comisión de Fomento de Lomas de Solymar, de la cual fui presidente durante dos períodos. O sea que más contacto con esa realidad que el que ha tenido quien habla, es difícil que alguien lo tenga, porque son 25 años como vecino y dos períodos como presidente de la referida comisión de fomento", indicó.
Irregular.
El alcalde relató el crecimiento exponencial que ha tenido la feria en los últimos años, hasta quedar en una situación fuera de control. "Al principio era todo bárbaro. La feria ocupaba una cuadra, dos cuadras. Después pasó a ocupar cuatro, cinco cuadras; a haber miles de personas. También se extendió para los costados. Le quitó el escenario a Lagomar, porque la feria grande era la de Lagomar. En los últimos dos años la feria de Lomas se ha transformado en la segunda de Canelones", sostuvo.
En tanto, el concejal Rojas confirmó que el hecho de que sea una feria irregular ha llevado a que "no concurran inspectores". "Lo único que hay sobre ciertas cosas son denuncias de vecinos, y nosotros actuamos en función de eso", puntualizó.
"Estas denuncias que se realizan en Ciudad de la Costa son secretos a voces. Nosotros trasladamos lo que la gente nos plantea, pero para hacer una denuncia, como funcionarios públicos que somos, necesitamos elementos de prueba. No podemos plantearle al comisario que un vecino nos dijo que frente a la casa de una señora están vendiendo droga. En realidad, al vecino le tengo que decir: Yo hago la denuncia, pero usted venga conmigo. El tema es que los vecinos plantean que no realizan las denuncias porque tienen miedo a las consecuencias. Y es entendible, sin duda. Ante todo esto, nosotros planteamos que estas cosas se van a solucionar en la etapa de regularización", agregó Rojas.
El concejal dijo además que la venta de estupefacientes y armas en ferias de Canelones no es algo nuevo: "En cuanto a la consulta acerca de si en las demás ferias pasaban estas cosas —venta de drogas, armas—, debemos decir que sí; en Lagomar pasaba. Hace alrededor de quince días se realizó una intervención por una presunta venta de droga, con la participación del comisario de la Seccional 18ª. El comisario se contactó con la Dirección de Inteligencia y se realizó un abordaje en la feria. Allí se impidió una situación que al parecer se estaba planificando. Eso fue en una feria regularizada", concluyó el integrante del concejo municipal de Ciudad de la Costa.
ALCALDE DECIUDAD DE LA COSTA.
López Assandri - "Los vecinos tienen razón".
"(Los vecinos) tienen razón en cuanto a que no pueden salir de sus casas, respecto a que allí se venden armas, a que se venden drogas, a que a veces prepotean y a que se aferran y dominan su espacio; todo eso es cierto. Ya hubo amenazas", dijo el alcalde a la Junta Departamental de Canelones, para justificar por qué no se envían inspectores a la feria de Lomas de Solymar.
VIVIR CON MIEDO