Cierran homenajes a Timoteo Aparicio

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FLORIDA | ALEXIS TRUCIDO

Los restos del general Timoteo Aparicio llegaron ayer sábado a Florida en una emotiva marcha que ya agrupa a más de 70 jinetes y espera el centenar para hoy domingo.

Sobre el mediodía, la caballada arribó al local "Grumen" ubicado en el kilómetro 79 de ruta 5 en la localidad de Mendoza Chico, pero tuvo un emotivo acto aun más lejos, en la estancia Bella Vista propiedad de la familia Argul-Gómez.

"Batalla de Paso Severino, setiembre de 1870. En este lugar se instaló el hospital de campaña y este es el homenaje del Pueblo Nacionalista en presencia de los restos del Gral. Timoteo Aparicio", leyó en voz alta el presidente de la comisión departamental, Carlos Pérez D`Auria, bajo un cerrado aplauso de público y autoridades departamentales

"El hospital, un viejo galpón de estancia de más de 140 años, se encuentra en las márgenes del hoy lago Paso Severino, donde se atendieron los heridos de guerra de la batalla que Timoteo Aparicio encabezó ante 4.000 hombres", recordó D`Auria, historiador, acompañado por los diputados blancos Luis Lacalle Pou y José Andrés Arocena. Arocena fue el orador en nombre de ambos legisladores y uno de los marcheros que llegó bandera en mano hasta Florida, departamento por el cual es legislador.

"Esto es una gran satisfacción porque lo definimos como un momento histórico en la vida del Partido Nacional y del país todo, puesto que el general Timoteo Aparicio fue el gran constructor de la paz de nuestra nación", dijo.

Arocena definió a Timoteo Aparicio como "un patriota por excelencia y por sobre todas las cosas, un pacificador real para sus tiempos", además de destacar el legado "que también podemos aplicar hoy ante el atropello de algunos iluminados".

"Aparicio siempre impulsó esa comunión con la gente y hasta el pasaje de sus restos va uniendo pagos hermanos", agregó Arocena.

Para el intendente de Florida, Carlos Enciso, que estuvo recorriendo los diferentes puntos en la historia del general, su departamento vuelve a marcar su riqueza histórica.

"Este departamento tiene eso y mucho más, tiene a Artigas, a Lavalleja y más caudillismo aun del Partido Nacional, aunque sobre todo la necesaria capacidad para refrescar el rico pasado y solo así poder mirar hacia el futuro", dijo Enciso.

Anoche la marcha llegó a la Asociación Rural de Florida donde se realizó la presentación del trabajo de investigación y reconocimiento de los restos del caudillo de los doctores Guido Berro y Alicia Lusiardo, y la participación del historiador Eduardo Rosas.

La marcha con los restos de Timoteo Aparicio comenzó el viernes en la Plaza de Deportes de La Paz, en Canelones.

CASA Y CEMENTERIO. Tras una marcha por las principales calles de la ciudad de Florida, hoy domingo se colocará una ofrenda floral en el monolito que recuerda a los "Heroicos Defensores" fusilados en ese lugar el 4 de agosto de 1864 en la Plaza Artigas.

El actual local del Instituto del Niño y del Adolescente del Uruguay (INAU) en Florida, en el 631 de la avenida Alejandro Gallinal, será otro mojón para la memoria, ya que se trata de la casa que perteneció a Timoteo Aparicio y será donde el intendente Enciso descubrirá una placa por parte del Gobierno Departamental.

Al panteón dedicado a los inmolados en las guerras civiles, llegarán finalmente los restos y allí el intendente de Florida y el presidente del Directorio del Partido Nacional, el senador Luis Alberto Lacalle, serán los principales oradores an- tes del descubrimiento de dos nuevas placas en memoria del caudillo blanco, que recuerdan al gestor de la paz del 6 de abril de 1872 por la que se puso fin a la llamada Revolución de las Lanzas.

Pasó buena parte de su vida en el departamento de Florida y desde allí defendió las causas del Partido Nacional. La Batalla de Paso Severino fue uno de los acontecimientos más importantes de su vida de revolucionario. Sus primeros enfrentamientos se producen junto a Manuel Oribe, en 1836, y luego en el asedio a Montevideo, cuando la Guerra Grande y el Gobierno del Cerrito. Durante la presidencia de Bernardo Berro se enfrentó en varias ocasiones a las fuerzas de Venancio Flores. Luego del triunfo de Flores en 1865, el caudillo blanco emigra a Entre Ríos, Argentina. Regresa en 1870 para iniciar la "Revolución de las Lanzas". En Paso Severino, el 12 de septiembre de ese año se enfrenta a las fuerzas leales al presidente Lorenzo Batlle, las que resultaron derrotadas y abandonaron el campo de batalla. La Convención del 6 de abril de 1872 pone fin a esta lucha armada. En enero de 1875, cuando se produce el derrocamiento del presidente José Eugenio Ellauri, el Partido Nacional, con Timoteo Aparicio a la cabeza se ofrece para restaurarlo, lo cual no fue aceptado.