El gobierno vetó uno de los artículos de la flamante ley de seguro obligatorio contra terceros, que entrará a regir en unos seis meses para todos los autos, motos y camiones. En concreto, se observó el artículo 21, que establece cómo se financia el Fondo Nacional de Indemnización, que se crea para cuando el dueño de un vehículo no es identificado, carece de seguro o el auto fue robado. En esos casos, se implementa una cobertura especial para que los vehículos igual queden asegurados contra terceros.
La ley indica que al mencionado fondo se destinarán todos los recursos que provienen de las multas realizadas por no tener seguro, a lo que se suma la contribución del Estado "que resulte necesaria a efectos de hacer frente a las indemnizaciones provenientes de las coberturas especiales".
Ahora el Ejecutivo propone una redacción alternativa, donde se establece que los recursos para la cobertura especial saldrá sólo de las multas y no habrá aporte estatal. El argumento para la observación parcial, incluida en un mensaje que firman el presidente Tabaré Vázquez y los ministros, es que el Poder Legislativo no puede prever gastos "para el erario público, sin especificar los recursos con que serán cubiertos los mismos".
Varios diputados consultados ayer por El País desconocían la observación del Poder Ejecutivo.
COBERTURA. El sistema de cobertura solidaria también podría cubrir a las motos de menos de 70 cc, que durante los primeros tres años no pagarán las primas. Durante el primer año de vigencia, este fondo pagará dos tercios de la suma de las indemnizaciones y el tercio restante queda a cargo de la aseguradora.
El segundo año abonará un tercio y a partir del tercer año todas las coberturas especiales deben ser abonadas por las aseguradoras. Los autos sin seguro recibirán multas equivalentes al promedio del costo de las pólizas en el mercado.
La ley establece que los autos que circulan sin seguro podrán ser "secuestrados" por la Policía, llevados a depósito y recibirán una multa equivalente al costo promedio del seguro. La póliza comprende los siniestros causados por partes desprendidas de los vehículos o por elementos transportados por estos. Los accidentados deberán presentar el reclamo ante la empresa, acreditando su derecho a cobrar el seguro y el daño.