BIENESTAR
Estirarte al despertar puede ser una acción más que beneficiosa para tu organismo. Sea cual sea tu ánimo, hazlo parte de tu ritual mañanero.
Algo tan insignificante comoestirar al levantartepuede resultar extremadamente beneficioso para tu cuerpo, incluso más que el primer café que buscas para llenarte de energía.
Según expertos, estirarte aún en tu cama es indispensable pues le permitirá a tu cuerpo, recuperar y mantener en óptimas condiciones la tonicidad que necesita. Una buena rutina de estiramiento te dará beneficios que a largo plazo tu cuerpo te agradecerá ya que es la clave en la prevención de lesiones.
Pero, para que tengas suficientes motivos, a continuación te detallamos cinco grandes razones para que nunca dejes de hacerlos y que estos se conviertan en los mejores buenos días para tu organismo.
Oxigenación y circulación
Al estirar tu cuerpo ayudarás a fortalecer tus músculos y la circulación. Estar en movimiento evita que tus músculos se atrofien ya que han estado por un largo tiempo inactivos.
Al estirar, aumenta la circulación ya que los músculos que se contraen estrujan más sangre hacia el corazón y llenan de oxígeno a los pulmones. Cuando te estiras y respiras profundamente, tu sistema linfático se activa y empieza una limpieza general en tu organismo, iniciando la eliminación de toxinas.
Mejor estado de ánimo
Esta simple actividad, libera endorfinas al cerebro. De hecho, según explican, en algunos casos esta acción estimulan levemente la misma región de tu cerebro al conseguir un orgasmo, que se traduce a una acción placentera.
Tu cuerpo reconocerá esta sensación y hará que te sientas bien, además de pensar que ya comenzaste a hacer ejercicio.
Elimina tensión y estrés
El estrés y la tensión pueden ser aliviados estirando el cuerpo (precisamente a esto, es que muchos realizan yoga).
Hoy en día, muchos dolores en la espalda y el cuello son a causa del estrés o por el home office que aún realizan algunos, solo por mencionar ejemplos. Así que comienza tu día estirándote, en la cama o fuera de ella, notarás que te sentirás mucho más animado para comenzar tu día.
Despejarte mentalmente
Cuando el cuerpo está en reposo utiliza menos oxígeno, la respiración se vuelve menos profunda y la sangre circula más lentamente. Los estiramientos te ayudarán a adaptar, de forma más rápida, nuestro cuerpo para la actividad que no espera.
Los estiramientos servirán para activar tu cuerpo, alistar los músculos y la mente dispuesta a todo lo que venga a lo largo del día.
Más conciencia de tu cuerpo
Cuando te estiras, estás naturalmente más concentrado en los músculos. Percibes qué músculos están tensos y cuales necesitan mayor tiempo: la espalda suele ser la que más necesita de éstos.
También ayuda a situarse en el momento actual, lo que tiene grandes beneficios para la salud mental y emocional. Incluso, hay quienes duermen mejor por esta rutina realizada en las primeras horas.
¿Cómo deberías empezar?
Normalmente, antes de estirar debes calentar los músculos, pues de esa forma harás que la sangre fluya hacia ellos y se vuelvan más flexibles. No obstante, en este caso, los músculos ya están más calientes porque has estado en la cama toda la noche.
Entonces, lo que necesitas son unos segundos para flexionar las articulaciones antes de estirarte (consejo: quítate las sábanas y abrigos para tener un poco más de espacio).
Mientras todavía estás acostado, flexiona las extremidades inferiores: levanta las rodillas y los pies; con las rodillas en el aire, sube y baja los pies; gira los tobillos y muévelos hacia adelante y hacia atrás.
A continuación, siéntate en la cama. Mira lentamente a la izquierda y luego a la derecha. Gira los hombros unas cuantas veces; trabaja los codos sosteniendo ambos brazos frente a ti; flexiona las muñecas hacia arriba y hacia abajo; abre y cierra las manos varias veces. Mantén cada estiramiento durante 30 a 60 segundos si es posible.