Publicidad

Convivencia emocional: El niño tímido o vergonzoso y sus padres

Compartir esta noticia
niño timido

Por Fanny Berger

La psicóloga Fanny Berger señala que el niño tímido presenta una inhibición conductual ante lo no familiar, a veces acompañado de respuestas fisiológicos de ansiedad.

La timidez es un rasgo de personalidad que queda en evidencia en las relaciones interpersonales. El niño tímido tiene miedo a una evaluación negativa y por lo tanto se repliega dentro de sí mismo.

Por ejemplo: sabe contestar a la pregunta que realiza la maestra pero no levanta la mano por miedo a equivocarse y/o que se burlen de él. Otro ejemplo es el niño o joven que ante personas que no conoce se inhibe por los mismos miedos mencionados anteriormente; teme hablar porque siente que puede hacer el ridículo. Otro caso muy común es el del pequeño que quiere invitar a jugar a un amigo pero anticipa que el otro se negará, tiene miedo al rechazo.

Toda persona tímida es introvertida y además posee miedos. No toda persona introvertida tiene que ser tímida, pero si todo tímido es introvertido.

El niño tímido presenta una inhibición conductual ante lo no familiar, lo desconocido, a veces acompañado de respuestas fisiológicos de ansiedad como sudoración, malestar y en determinadas situaciones hasta taquicardia.

Estos pequeños siempre anticipan resultados negativos: “me voy a equivocar”, “ no querrá jugar conmigo”. Es así que corre el riesgo de formar baja autoestima. Todo lo anterior le causa una excesiva necesidad de aprobación y dependencia emocional hacia las personas con las que si se siente cómodo.

Existen distintos niveles de timidez: los más intensos tienen que ser tratados porque corren el peligro de convertirse en una fobia social en la adolescencia o adultez pero es clave aclarar que no todas las personas tímidas desarrollarán una fobia social.

La fobia social está dentro de los trastornos de ansiedad y se define por un miedo persistente e irracional ante situaciones que puedan involucrar el juzgamiento por parte de los demás, como en fiestas u otros eventos social, Es un temor persistente a una o más situaciones sociales o de actuación en público en las que la persona se ve expuesta a gente desconocida o al posible evaluación por parte de los demás". El malestar es muy elevado en situaciones de la vida diaria

Herramientas para padres de niños tímidos

* No hay que forzarlos a realizar conductas que ellos no quieren por timidez como por ejemplo saludar

* No hay que sobreprotegerlos

* No etiquetarlo como “el tímido”

* Reconocer sus propios méritos

* Alentarlos a realizar de a poco, conductas que lo fortalezcan y que no se sientan amenazados, sin presión y con aliento

Timidez y vergüenza no es lo mismo

Queremos transmitir que timidez no es lo mismo que vergüenza.

Esta última es una emoción que pretende ocultar algún supuesto defecto o acción que creemos , podría provocar rechazo. Es una emoción que lleva a esconder los fallos, los supuestos defectos y hace caer en exceso de autocrítica para evitar o minimizar la crítica destructiva o el rechazo de los demás, que el vergonzoso fantasea.

El vergonzoso tiene miedo al fracaso, una fuerte autocrítica negativa que lo hace condenarse y castigarse. En realidad siente vergüenza de él l mismo, de su esencia, por lo tanto siente que no puede esconderse ante los otros.

La vergüenza comienza a desarrollarse a partir de 18 meses, aproximadamente, y se desarrolla a lo largo de toda la infancia. Es una emoción compleja y social porque aparece cuando están con otras personas. La vergüenza es el resultado de la combinación de tres emociones básicas: la rabia, miedo y tristeza.

La inseguridad o la falta de confianza en sí mismos son ingredientes importantes en la aparición de la vergüenza en niños y adultos, por tanto lo primero que debemos hacer para ayudar a los niños vergonzosos es desarrollar su autoestima y aumentar su confianza.

CONOCÉ A NUESTRA COLUMNISTA
Fanny Berger
Fanny Berger

Es psicoterapeuta gestáltica. Se dedica niños, adolescentes y adultos, y trabaja en el apoyo de padres. Implementó “terapia de alcance breve”, que en cinco sesiones trata temas concretos. Es conferencista y escribió varios libros.

Podés contactarla en su web, página de facebooko a través del teléfono celular 099 289 282.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad