Por fin se les dio

La cría de ñandú vuelve a ser negocio. Tras la esperada apertura del mercado europeo para la carne de ese animal autóctono del Río de la Plata, Uruguay puede llegar a producir unos 500.000 kilos en un plazo de tres años y exportar el 100% de los mejores cortes a los países de la Unión Europea (UE), que consumen cerca de 20 millones de kilos de avestruz al año, dijo a El Empresario el gerente del Consorcio Latinoamericano de Exportación (CLE), Alejandro Pizzolón. Así, Uruguay podrá consolidar su lugar de principal productor mundial del denominado "avestruz sudamericano" que llegó a conquistar a cerca de 150 criadores locales en 2001, de los cuales hoy sobrevive sólo una decena que esperó mucho tiempo para poder concretar negocios importantes.

Luego de 10 años de tratativas, los negocios con el viejo continente se multiplicarán apenas se terminen los trámites burocráticos en un plazo máximo de 60 días y se estima que el kilo de carne de ñandú colocado en Europa recaudará en el entorno de US$ 10. "Desde hace tres o cuatro años tenemos casi un negocio con cada país de la UE, principalmente del Norte, como Alemania, Francia, Inglaterra y Suiza", afirmó Pizzolón.

Ya en 2006, los productores esperan colocar dos contenedores cargados en el mercado europeo, o sea unos 25.000 kilos, y Pizzolón estimó que en tres años la producción exportable puede ascender a 500.000 kilos.

El 22 de noviembre Europa habilitó al frigorífico Caltes de Paso de los Toros –especializado en libres y corderos– a faenar ñandúes para vender a ese continente, además de autorizar a varios criaderos para que envíen sus animales a esa planta. En la faena de este animal figura también el frigorífico Casablanca, que procesa lo poco que se vende en el mercado local y lo que se envía a Brasil y Argentina.

En las carnicerías uruguayas la carne de ñandú se vende casi siempre en forma de chorizos o hamburguesas, pero en este momento se agotó porque "no había noticias comerciales, por lo que muchos productores no prendieron las incubadoras y el stock de animales bajó", según informó la secretaria de la Asociación Uruguaya de Criadores de Ñandú (Aucriña), Mónica Demarco.

Para estimar el precio que pueden conseguir los productores, Aucriña toma como referencia lo que se paga en Europa por el kilo de carne de avestruz, o sea entre US$ 10 y US$ 12. Todo esto porque no existe un mercado ni un precio internacional formal para el ñandú, producción por la cual Uruguay sólo podría competir con Argentina que en esto está como "Uruguay 10 años atrás", según afirmó Demarco. Hoy en día Uruguay vende el kilo de ñandú a U$S 6 cuando lo coloca en Argentina y Brasil.

El interés europeo se centra mayoritariamente en la carne que es de cortes sin hueso, aunque la idea de los productores locales es vender también subproductos tales como la piel curtida. Europa es el primer consumidor mundial de los cortes de ñandú y las llamadas "carnes exóticas", cuyas características más valoradas son el bajo tenor graso y de colesterol, así como el escaso nivel de sodio en su composición.

Las posibilidades de comercialización del ñandú son variadas: Uruguay exportó carne a Dubai (Arabia Saudita), en poco volumen y también a Brasil y Argentina. También salieron huevos vacíos al Medio Oriente para artesanos. En Uruguay se venden carnes, reproductores, huesos, plumas y huevos para artesanías y cuero para marroquinería. Hay países que usan las cejas para los pinceles de computadoras, córneas para la medicina humana y órganos para aceites, patés y cremas.

U$S 80

Es el costo estimado de ingresar a faena un ñandú.

Quiénes y cuántos crían ñandúes

En un mes y medio estarán listos los resultados de un relevamiento que encargará la Asociación Uruguaya de Criadores de Ñandú (Aucriña) para conocer la composición exacta del mercado local actual y sus perspectivas. Con fondos del Banco Interamericano de Desarrollo que apoya el proyecto de Aucriña, la gremial contratará a un consultor para responder algunas preguntas básicas para que la producción siga adelante y sea exitosa. ¿Quiénes somos? ¿Cuántos somos? y ¿A dónde queremos ir?, son las preguntas para las cuales buscamos respuestas, afirmó la secretaria de Aucriña, Mónica Demarco.