ENJAMBRE

El repaso por las charlas TED recomendadas de Enjambre, mi newsletter de economía y negocios, llega hoy a su fin. En el último mes y medio El Empresario compiló esos breves videos que dejan importantes conceptos para el mundo de los negocios pero también para la vida. A veces no es fácil hacerse tiempo para verlos, pero una buena forma de lograrlo es dedicar un rato cada martes, cuando la newsletter llega con el resumen de los temas económicos importantes de la semana y una charla TED sugerida. Para recibir sin costo Enjambre y otras newsletters de autor de El País, regístrese aquí.

Este miembro de la Royal Society, pionero de la computación cuántica, expone sobre la «guerra cósmica entre monotonía y creatividad» y profundiza sobre las lógicas que hacen prevalecer a la monotonía sobre la innovación.

La neurocientífica investiga cómo el cerebro da lugar a estados emocionales complejos como la depresión, ansiedad o soledad. Sus últimos hallazgos incluyen una herramienta para crear cambios dramáticos en el comportamiento de ratones.

La semana tiene 168 horas: «no tengo tiempo» a menudo significa «no es prioritario». La escritora estudió cómo personas muy ocupadas pasan sus vidas y brinda estrategias prácticas para encontrar más tiempo para lo que nos importa.

El experto en sustentabilidad profundiza en su iniciativa: The Plastic Bank. Con base en Vancouver, es una red mundial de tiendas donde todo, desde la matrícula escolar hasta la energía para cocinar, se puede comprar con basura plástica.

«Si algo matará a más de 10 millones de personas en las próximas décadas será un virus muy infeccioso, mucho más que una guerra. No habrá misiles, sino microbios». Esta charla de 2015 fue casi premonitoria.

La activista dice: «En tiempos inciertos, pensá como una madre», es decir, sabé «priorizar las necesidades de muchos y no caprichos de unos pocos». Lo importante es que esa capacidad se puede (y debe) desarrollar.

La comisaria europea de Competencia, que sancionó a Google y Apple, aboga por construir confianza. Y no solo para que funcionen bien los mercados, sino también las sociedades modernas.

¿Cómo se siente la belleza?, ¿qué sensación trae aparejada?, ¿la reconocés? Este diseñador se propuso abandonar palabras como «forma» y «función» para centrarse en la «funcionalidad emocional de las cosas».