Publicidad

Amores malos, errores graves

Compartir esta noticia
Joyce Carol Oates
Larry D. Moore

novelas cortas de Joyce Carol Oates

Cuatro mujeres víctimas protagonizan los cuatro relatos, y cuatro son los hombres victimarios.

El largo título del libro parece recordarnos que la estadounidense Joyce Carol Oates no para de escribir y de confrontar con solvencia y a menudo maestría los mismos temas, esos que giran en torno al ser mujer, manejar las emociones y sobrevivir al dolor. La edición en español de Tan cerca en todo momento siempre. Cuatro nouvelles sobre amores malogrados reúne extensos relatos (más que novelas cortas, aunque el título original apueste en grande: Evil Eye. Four Novellas of Love Gone Wrong, 2013) que habían sido publicados en las revistas Ellery Queen Mystery Magazine, Conjunctions, Fiction y Boulevard. Cuatro son las mujeres protagonistas de estos relatos, que los atraviesan como vulnerables víctimas tanto si toman venganza como si no, y cuatro son los hombres victimarios, hechos de un trazo grueso y espeso que no traiciona la verosimilitud respecto a la realidad pero rebaja la consistencia de lo literario.

El libro se abre con “Mal de ojo”, que puede verse como una relectura del clásico Barba Azul infantil y compararse con la revisión del mismo que hiciera Angela Carter en los años setenta del siglo pasado con “La cámara sangrienta”. Aquí, Oates presenta a un narcisista de manual, Austin Mohr, y a su cuarta joven esposa, inexperta en los sigilos del amor, que reciben la visita de la primera mujer de él, una española de antigua belleza a la que le falta un ojo y una sobrina de esta, tosca y distante. La visita comienza en términos amistosos hasta que revela de golpe las verdaderas intenciones y marca un antes y un después en la esposa reciente, que empieza a comprender cuál es su papel en el drama y comete el grave error de continuar interpretándolo.

En “La ejecución” un estudiante universitario idea un desquiciado plan para matar a sus padres y salir indemne. Tiene toda la frankensteiniana composición de un psicópata y aunque algo sale mal una increíble y a la vez previsible defensa femenina viene en su ayuda. “La plataforma” cuenta la historia de una treintañera que no puede consumar el acto sexual con ninguna pareja. El asunto remite en la memoria a la fascinante Chesil Beach del inglés Ian McEwan, pero no hay nada de la formidable sutileza de aquel en este relato sin espesor, con personajes maniqueos y una resolución apresurada con vengador mesiánico erigido en figura liberadora.

Algo se salva. La historia que da título a esta edición, “Tan cerca en todo momento siempre”, está narrada en primera persona (a diferencia de las anteriores, narradas en la tercera con subjetiva de los protagonistas, muy propio de Oates) y aunque contiene en parte los mismos ingredientes que las otras –un planteo clisé, personajes planos- presenta un tratamiento más complejo. La protagonista es Lizbeth, una buena estudiante de dieciséis años deslumbrada por el primer amor, un chico algo mayor llamado Desmond Parrish, que funciona como el típico sabihondo instructor y “constructor” de mujeres. Mientras su zona de influencia sobre ella crece y adquiere la forma del acoso, la chica va haciendo su proceso interior –más intuitivo que racional- de distanciamiento. El cuento se cierra de forma cruenta y es sutil en el registro final de cómo quedan fijadas en el tiempo las marcas de la vida.

Quizá cada relato por separado no vaya en la línea de la mejor Oates, pero de todos modos el conjunto impresiona, además de que está en la agenda del día. Muestra que en las relaciones humanas ningún error de apreciación es leve; cada una de estas mujeres ha dejado pasar señales de alerta, dormidas o recostadas en una idea romántica del amor de pareja o filial, y el despertar lo paga caro.

TAN CERCA EN TODO MOMENTO SIEMPRE, Cuatro nouvelles sobre amores malogrados, de Joyce Carol Oates. Fiordo, 2018. Buenos Aires, 228 págs. Traducción de Ariadna Molinari Tato. Distribuye Escaramuza.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Joyce Carol Oates

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad