Qué efectos tiene en el cuerpo dejar de masturbarse durante un mes, según explica la ciencia

Redacción El País
Aunque todavía persiste cierto tabú en torno a la masturbación, la evidencia científica la reconoce como una práctica natural y saludable. No solo ayuda a liberar tensiones y bajar el estrés, también mejora el descanso, favorece la concentración y contribuye a un mejor estado de ánimo gracias a la liberación de hormonas como dopamina, serotonina y oxitocina.

Estudios de divulgación internacional estiman que más de la mitad de las mujeres y alrededor del 70 % de los hombres se masturban al menos una vez por mes. Esta práctica, que antes solía estar rodeada de prejuicios, hoy se entiende como una forma de conocer el propio cuerpo y cuidar el bienestar.

Cuando una persona deja de masturbarse, el cuerpo atraviesa una serie de cambios. Un trabajo realizado en China en 2003 observó que, tras una semana de abstinencia, los niveles de testosterona en varones aumentaban hasta un 45 %. Sin embargo, ese incremento se estabilizaba nuevamente a partir del octavo día.

En cuanto a la salud reproductiva, urólogos señalan que la calidad del semen tiende a ser mejor después de dos o tres días sin eyacular. Aun así, otros estudios indican que en hombres con parámetros normales, la movilidad y concentración de los espermatozoides se mantienen aunque la eyaculación sea diaria. Cabe recordar que los espermatozoides tienen un ciclo de vida de unos 74 días, se expulsen o no.

Además, investigaciones de la Universidad Abierta de Inglaterra demostraron que tanto la dieta como la frecuencia de la eyaculación influyen en los niveles hormonales y en la calidad seminal. El organismo masculino es capaz de producir entre 80 y 300 millones de espermatozoides por cada eyaculación.

Para las mujeres, la ausencia de masturbación o de estímulos sexuales puede resultar menos favorable. El orgasmo femenino contribuye a generar calma, alivio de tensiones y sensación de bienestar. Por lo tanto, dejar de tenerlo de manera prolongada puede privar al cuerpo de esos beneficios.

Los especialistas coinciden en que la masturbación, lejos de ser dañina, es un recurso positivo para la salud integral. Es una práctica que aporta efectos a corto y largo plazo: desde mejorar el ánimo y la respuesta cardiovascular hasta funcionar como un ansiolítico natural. Como en tantas otras áreas, la clave está en la moderación y en mantener una relación equilibrada con el propio deseo.

En base a El Tiempo/GDA