Redacción El País
Las pulgas y garrapatas son parásitos comunes que afectan tanto a perros como a gatos. Antes de recurrir a productos químicos, existen alternativas naturales que ayudan a eliminarlos y prevenir su reaparición, con la ventaja de ser menos agresivas para la piel y la salud de tu mascota.
Primero, es importante diferenciar entre unas y otras. Las pulgas, por un lado, provocan picazón intensa, lamidos frecuentes y pequeñas mordidas en la piel. Es posible ver puntos negros en el pelaje (sus heces), huevos blancos diminutos o a los propios insectos al cepillar al animal.
Por otro lado, las garrapatas suelen esconderse en zonas menos visibles, como entre los dedos, detrás de las orejas o en el cuello. Se detectan como pequeños bultos adheridos a la piel, de distintos tamaños. Para facilitar la detección, existen peines especiales de púas finas que permiten atrapar a los parásitos y a sus huevos mientras se cepilla el pelo.
A continuación, alternativas caseras efectivas para sacar pulgas y garrapatas de los animales domésticos.
- Peine metálico de púa fina: básico para eliminar pulgas y huevos con cada cepillado.
- Alcohol y aceite: mezclar dos tapitas de alcohol con una de aceite. Con un paño humedecido frotar la piel del animal. El alcohol actúa como antiséptico y el aceite ayuda a que los parásitos se desprendan.
- Manzanilla: preparar una infusión, dejarla entibiar y aplicarla con algodón en zonas sensibles como orejas, nuca y base de la cola.
- Limón: hervir rodajas de limón en un litro de agua, dejar reposar toda la noche y aplicar al día siguiente con un trapo humedecido en la mezcla, evitando ojos y hocico.
- Levadura de cerveza: puede añadirse a la comida en pequeñas cantidades para repeler pulgas por el olor, o aplicarla directamente sobre el pelaje y retirarla días después.
- Collar casero: humedecer un pañuelo en agua con esencia de romero o lavanda y colocarlo alrededor del cuello por una semana. También pueden usarse gotas de aceites esenciales como cedro, citronela, geranio o albahaca.
- Vinagre: aunque su aroma no sea agradable para el perro, es un repelente eficaz. Puede mezclarse media taza de vinagre con medio vaso de agua y un poco de shampoo para perros en el baño, dejar actuar unos minutos y enjuagar.
- Mezcla repelente completa: combinar una cucharada de vinagre de manzana, otra de vodka, aceites esenciales (eucalipto, lavanda, cedro o romero), jugo de limón y hojas de menta. Hervir con tres tazas de agua, colar y colocar en un rociador para aplicarlo sobre el pelaje, la ropa y las camas de la mascota.
Estos remedios naturales son una buena primera opción para mantener a tu mascota libre de parásitos sin recurrir directamente a químicos. Sin embargo, en casos de infestaciones graves o persistentes, lo recomendable es acudir al veterinario para evaluar el tratamiento más adecuado.
En base a La Nación/GDA