El dolor de espalda puede ser un síntoma de diversas enfermedades de la columna vertebral. Una de ellas es la espondilosis, que se produce cuando el tejido óseo y el cartilaginoso se desgastan como consecuencia del paso del tiempo.
La Clínica Mayo define la espondilosis como "un término genérico que se utiliza para describir el desgaste natural que ocurre en la columna vertebral a medida que envejecemos".
Sin embargo, las causas de la espondilosis son variadas, y pueden incluir la edad avanzada, lesiones previas en la columna vertebral, una mala postura, la obesidad y ciertos movimientos repetitivos que pueden contribuir al desgaste de los discos y las vértebras de la columna vertebral. También puede ser hereditaria.
Los síntomas más comunes incluyen dolor de cuello o de espalda y rigidez en la columna. Esta enfermedad también puede ocasionar entumecimiento u hormigueo en los brazos o las piernas y debilidad muscular.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la espondilosis es una afección muy común en las personas mayores de 60 años. Se estima que más del 80 % de las personas mayores de 65 años tienen algún grado de espondilosis cervical.
En cuanto al tratamiento, puede incluir cambios en el estilo de vida, como hacer ejercicio regularmente, mantener una postura adecuada y controlar el peso corporal. Además, puede ser necesaria la incorporación de fisioterapia, terapia ocupacional, analgésicos, y en algunos casos, cirugía. La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) ha aprobado varios tratamientos para tratar este desgaste, incluyendo analgésicos de venta libre como el acetaminofén y los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs). También pueden utilizarse esteroides inyectables para aliviar el dolor y la inflamación. No obstante, el tratamiento a seguir siempre debe ser indicado por el médico.
(Por El Tiempo GDA)