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¿Sabes cuándo es momento de llevar a tu hijo a emergencias? ¿Sabes en qué situaciones es necesario ir al hospital y en cuáles un mensaje al pediatrasería suficiente? Ningún padre se siente cómodo viendo a su hijo enfermo. Y, en la ansiedad por resolver rápido el problema, muchas veces vamos a emergencias sin pensar si es realmente necesario exponer al niño al ambiente hospitalario.
Reunimos a un equipo de especialistas para hablar precisamente de esto. Junto a médicos y especialistas de la Red D'Or, discutimos la importancia de saber identificar cuándo la visita a la sala de emergencias es realmente imprescindible.
Atención a los síntomas
No todo síntoma es razón para salir corriendo al hospital. Pero, según Lenira Rachid, coordinadora de las UCI pediátricas de los hospitales Copa D'Or y Jutta Batista, hay algunos signos que los padres no deben ignorar.
“Los principales signos a observar son fiebre, vómito, deshidratación, respiración rápida o si el niño está muy decaído. Cada vez que sientas que tu hijo no está bien y no puedas contactar al pediatra, llévalo a emergencias”, recomendó.
Esta regla aplica a todos los niños, de cualquier edad. Sin embargo, en los recién nacidos, el cuidado debe ser mayor. “El recién nacido muestra pocos síntomas; puede tener una infección sin fiebre, pero suele dejar de mamar, estar muy tranquilo o adormilado...”, explicó. Por eso, el consejo es claro: en caso de duda, confía en tu instinto. Si no logras hablar con el médico que sigue a tu hijo, ve al hospital.
Es mejor prevenir que lamentar
¿Quién no ha llevado a su hijo al hospital por un problema “menor”? Eso le sucede a todos, incluida la actriz Sthefany Brito. Durante el evento, confesó que, en muchas ocasiones, pecó por exceso al llevar a su hijo mayor, Antonio Enrico, de 4 años, a emergencias.
“Mirando hacia atrás, veo que muchas visitas a emergencias fueron innecesarias. Creo que se debe a la inseguridad de ser madre primeriza. Vicenzo, de dos meses, gracias a Dios, aún no conoce el hospital, excepto por el nacimiento”, comentó.
La decisión de ir o no a emergencias siempre debe basarse en dos factores: el estado de salud del niño y el nivel de confianza de la familia ante la situación. Si, como padre o madre, te dará tranquilidad consultar a un médico en el hospital, no dejes de hacerlo.
“Puedes ir a emergencias para que, en ese momento, examinen a tu hijo y te digan: ‘Está bien, veamos cómo evoluciona’. Para eso estamos allí”, dijo Aline Lisboa, médica de emergencias del hospital Copa D'Or y hematóloga pediátrica.
Pediatra en emergencias vs. pediatra de consultorio
El servicio de un pediatra en emergencias no es igual al del pediatra del consultorio, quien sigue de cerca el desarrollo y salud del niño. Mientras uno observa el progreso general del niño, el otro está para resolver urgencias puntuales.
“La consulta regular con el pediatra permite prevenir enfermedades crónicas y aplicar medidas profilácticas. En emergencias, solo intervenimos en el problema puntual, pero no tratamos la causa subyacente que llevó a la situación”, afirmó la pediatra Aline Lisboa.
Por ello, es importante que el pediatra habitual esté informado si el niño visita el hospital. Si lo consideras necesario, puedes incluso pedir que el médico de emergencias hable con el pediatra que sigue al niño.
“Podemos intercambiar información. En emergencias, preferimos cuando sabemos que el niño tiene un pediatra, porque da tranquilidad saber que habrá un seguimiento en su cuidado y que otro médico está velando por su salud”, agregó Aline.