Mitomanía: cómo relacionarse con las personas que mienten de manera compulsiva

Laura Espinoza, El Comercio/GDA.
La mitomanía es un trastorno de la salud mental que implica mentir de manera compulsiva. Va mucho más allá de un par de mentiras piadosas: es un patrón de conducta constante que afecta las relaciones y las dinámicas en la vida cotidiana de quienes lo padecen.

No se sabe con exactitud que factores causan la mitomanía. No obstante, puede considerarse muchas veces que está relacionado a traumas que han ocurrido en la niñez, a ciertas necesidades de atención o también a un trastorno de personalidad, expuso el psicoterapeuta Jair Luján. A veces, una persona que consume sustancias o que tiene el autoestima baja también puede desencadenar mitomanía.

• Pensamientos frecuentes que incitan a mentir.
• Dificultad de controlar los impulsos a mentir.
• Satisfacción cuando mienten y no lo descubren.
• Pocas habilidades sociales.
• Niveles elevados de ansiedad.
• Baja autoestima.
• Estrés por mantener ocultas sus mentiras.

La persona mitómana es consciente de que está mintiendo, pero no puede parar o no ve la necesidad de hacerlo pese a que muchas veces estas mentiras tienen consecuencias negativas, explicó Luján.

“El mitómano construirá mentiras más elaboradas para cubrir las que se han ido descubriendo. Esto termina deteriorando sus relaciones interpersonales y profesionales”, agregó.

No tiene cura, pero si tratamiento con diferentes tipos de terapias, señaló el psicoterapeuta. A veces se recomienda el tratamiento psiquiátrico a través de medicación, sobre todo si se sospecha que la mitomanía está relacionada a algo más grave.

• Entender que la persona tiene un trastorno sw la salud mental y que no lo hace a propósito.
• Apoyarlo en su proceso de terapia, aconsejarlo y escucharlo.
• Establecer límites saludables y mantener la comunicación lo más abierta posible.
• Motivarlo a ir a terapia.