Redacción El País
Una preparación tan simple como mezclar kéfir con kiwi se está convirtiendo en una de las recomendaciones favoritas para mejorar la calidad del sueño de forma natural. Esta combinación, cada vez más presente en rutinas nocturnas y en consejos de especialistas en microbiota, se apoya en dos pilares: la evidencia científica sobre los beneficios del kiwi para dormir y los efectos del éefir en la regulación hormonal nocturna y la salud digestiva.
La doctora Sara Marín, experta en Microbiota y Salud Femenina, resume su potencial: “Si tomás kéfir con kiwi, avena y nueces, aumentarás tu triptófano, serotonina y melatonina natural, y podrás conciliar mejor el sueño”.
Kéfir con kiwi: la receta que potencia la melatonina
El soporte científico más sólido proviene de un estudio publicado en "Asia Pacific Journal of Clinical Nutrition", donde se analizó el consumo de kiwi antes de dormir durante cuatro semanas. En 24 adultos con problemas de sueño, se observó:
- Reducción del 42,4 % en el puntaje de la escala de calidad del sueño.
- Disminución del 35,4 % en el tiempo para conciliar el sueño.
- Mejora de más del 5 % en la eficiencia del sueño.
El estudio concluye que el kiwi por la noche ayuda a quienes tienen dificultades para dormir gracias a su alto contenido de serotonina, antioxidantes y folatos, nutrientes claves para los ciclos del sueño y la estabilidad del sistema nervioso.
El papel del kéfir en el sueño: probióticos y eje intestino-cerebro
El kéfir, por su parte, añade beneficios complementarios. Su abundancia en probióticos favorece el equilibrio de la microbiota intestinal, un actor fundamental en la producción y modulación de neurotransmisores asociados a la relajación y al descanso.
Aunque las investigaciones no se centran exclusivamente en su impacto sobre la melatonina, sí destacan su influencia en la conexión intestino-cerebro, en la respuesta al estrés y en la reducción de la inflamación. Además, aporta pequeñas cantidades de triptófano, precursor directo de la serotonina y, posteriormente, de la melatonina.
Una sinergia para mejorar el sueño
La combinación de kéfir y kiwi potencia la producción natural de hormonas del sueño gracias a la suma de antioxidantes, micronutrientes y fermentos vivos. En sus recomendaciones, también sugiere añadir avena y nueces, que incrementan aún más el aporte de triptófano y grasas saludables que estabilizan el sistema hormonal antes de acostarse.
Dentro de su serie de propuestas para relajarse antes de dormir, la especialista incluye otras opciones como yogur con plátano y almendras —ricos en magnesio y vitamina B6— o kéfir con frutos rojos y anacardos, mezcla repleta de antioxidantes y probióticos que ayudan a bajar el cortisol y a lograr un descanso más profundo.