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8 señales de que tu gato te quiere

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Entender a los gatos no es tan sencillo: sabemos que no son tan expresivos como los perros, que prefieren vivir a su ritmo y que si quieren compañía, la buscan.

“Los gatos tienen fama de ser independientes y poco cariñosos, mientras que los perros son muy dados al humano. La diferencia con los felinos es que con ellos hay que ganarse su cariño”, explica la etóloga Carolina Alaguna.

Esto no significa que no realicen ciertas acciones para demostrar afecto a su familia de humanos. Aquí les contamos algunas.

Esperan en la entrada

No sé cómo sabe que estoy cerca de casa, pero siempre que llego está esperándome en la puerta o viendo por la ventana”, cuenta Lorena Torres, quien tiene a su gata Evee desde hace tres años.

Los felinos tienen un humano favorito en la familia y presienten cuando está llegando a casa; esto, gracias a su oído y olfato agudos, que les permiten anticipar su presencia.

Buenos para acurrucarse

“A veces pueden sentirse molestos, pero a ellos les encanta dormir en el pecho o en el vientre de su dueño. Incluso empiezan a ronronear muy suave, lo que demuestra que están relajados y calmados”, dice la etóloga Alaguna. También significa que disfrutan la compañía y se sienten seguros en el hogar.

Ronronean y acarician

Restregarse es su contacto físico favorito. “Les gusta amasar con sus patitas, y hasta enterrar las uñas, a sus dueños. Este comportamiento les genera placer y solo lo hacen con las personas a las que les tienen confianza”, explica Natalia Andrea Reyes, veterinaria. Si se quedan mirando fijamente, es una buena señal, porque solo lo hacen cuando se sienten muy tranquilos. Suelen pasearse entre las piernas y hasta lamer y morder los dedos.

Guardan los olores

“Cuando los gatos lamen se están apropiando del humano y significa que los están incluyendo en su territorio; guardan los sabores y olores como algo sagrado, y en ese momento te hacen parte de su manada”, cuenta Javier Arias, quien vive con su pequeña gata, Magia.

Se dejan consentir

A diferencia de los perros, los gatos no van a estar siempre cerca moviendo la cola. No se les puede obligar a quedarse quietos porque seguramente van a querer escaparse. Ellos son los que determinan cuándo quieren que los acaricien.

Sabemos que los felinos a veces son esquivos, pero cuando se sienten cómodos y en confianza, se acuestan con sus patas hacia arriba y piden que les acaricien el pecho, su parte favorita.

Permanecen atentos

“Nina, mi gata de 2 años, sabe a qué hora dormimos, así que cuando hay visita en casa hasta tarde, se para en las escaleras y maúlla como avisando que ya debemos ir a descansar”, relata Katheryn Martínez.

Protegen la casa

Los perros ladran cuando escuchan ruidos extraños para alertar a la familia; los gatos también lo hacen, a su manera. Pueden emitir muchos sonidos diferentes, maullidos, bufidos, ronroneos, y cuando sienten que su territorio está amenazado, elevan y esponjan su cola.

Llevan regalos

Los regalos pueden no gustarles a muchos dueños, pero a los gatos les encanta salir a cazar y traerles cosas que a veces son pájaros, ratones o insectos. Llevan estos presentes a casa porque quieren compartir y mostrar que se sienten agradecidos. 

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animalesEL TIEMPO|GDA

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