Rendición establece postergar $ 250 millones para 2018.

El Plan Ceibal cesó ayer a 11 funcionarios, luego de que la Rendición de Cuentas postergara a 2018 la entrega de 150 millones de pesos. Sin embargo, su presidente, Miguel Brechner, dijo a El País que no se trata de un recorte de personal, sino de una "reestructura". El sindicato del Ceibal todavía no resolvió si tomará algún tipo de medida.

"Es una reestructura funcional de áreas del Ceibal que dejan de existir porque fueron absorbidas por otros sectores. Son 11 personas en total", explicó Brechner ayer en horas de la tarde, al mismo tiempo que se llevaba a cabo una reunión de la Asociación de Funcionarios de Ceibal (AFuCe), que no llegó a resolver si tomarán medidas.

AFuCe convocó para hoy a una asamblea para comunicar que denunciará el caso ante el Ministerio de Trabajo y, eventualmente, decidirá si adopta medidas.

Las dos áreas que según Brechner serán reestructuradas y fusionadas son Entregas y Desarrollo Social. En la primera había cinco trabajadores y ahora quedaron tres. En la segunda eran 35 y se mantienen 29.

Los otros tres despidos corresponden a un trabajador que hacía cursos virtuales sobre plataformas del Ceibal, ya que esta área fue unificada con la de Formación; otro fue de la sección Taller y otro de la sección Calidad, todo según explicó el presidente del proyecto.

"Se trata de una reestructura funcional. La decisión fue tomada por el consejo del Plan Ceibal y sus gerentes", precisó Brechner. El presidente añadió que el dinero que se ahorre con estos 11 sueldos irá para "programas, máquinas, tabletas, reparaciones, capacitación, etc.". Y aclaró que "el dinero del Ceibal se queda en el Ceibal", en el sentido de que este ahorro no irá para otra área del gobierno.

Brechner no precisó a El País cuánto dinero implican estos 11 sueldos. Con esto el Plan Ceibal se queda con un total de 314 trabajadores.

Muchos de los gastos que la Rendición de Cuentas difiere para 2018, lo que alcanza un total de 2.588 millones de pesos, tienen que ver con la educación. En la bolsa están la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), con 798 millones de pesos; la Universidad de la República (UdelaR), con 544 millones de pesos; la Universidad Tecnológica (UTEC), con 100 millones; el Plan Ceibal con 150 millones y el Ibirapitá con 100.

Desde su inicio se han invertido en el Plan Ceibal más de 410 millones de dólares. El proyecto nació en 2007, y en este tiempo se han entregado unas 700.000 tablets a alumnos de Primaria, Secundaria, UTU y a los profesores (ver aparte).

Cada niño, adolescente o profesor con "ceibalita" le cuesta al Estado unos 2.000 pesos anuales, lo que representa el 5% de lo que se invierte por año para la educación de un niño.

Las cifras del Ceibal advierten que el 99% de las escuelas públicas, jardines, liceos, UTU, colegios privados y demás centros educativos, tienen conectividad en Uruguay.

En tanto, datos del año 2014 de la Encuesta Continua de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), señalan que el 94% de los hogares del primer quintil con niños de entre 6 y 13 años cuentan con una computadora. Antes de la existencia del Ceibal, esta cifra era del 9%. En el quintil más privilegiado se pasó del 91% al 99%.

Las cifras reflejan que los adultos mayores son los que menos acceso tienen a la tecnología. Solo en el 38% de los hogares del primer quintil había una computadora en 2014.

Al día de hoy hay 700.000 computadoras del Plan Ceibal en manos de escolares, liceales, maestros y profesores. Los niños de primero y segundo de escuela cuentan con tabletas, los de tercero en adelante con computadoras (las más conocidas XO, las de color verde; las últimas de estas ya cuentan con pantalla táctil), y los estudiantes de tercero de liceo en adelante y de UTU cuentan con laptops o netbooks con pantallas de trece u once pulgadas. De estas, 50.000 se han roto en algún momento, algunas para siempre. Para quienes trabajan en Ceibal esto es normal: los aparatos se rompen, dicen.

El Plan que se empezó a instrumentar en 2007 se amplió el año pasado de la mano del Plan Ibirapitá, que reparte computadoras para jubilados y pensionistas. En 2015 se distribuyeron 30.000 tablets para adultos mayores y se espera llegar a 100.000 antes de que culmine este año.

Ceibal trabaja en coordinación con la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento de Uruguay (Agesic), para que cada vez se puedan hacer más trámites a través de la web, tanto en UTE, Antel, OSE y BPS, como en las intendencias de todo el país. A quienes se presentaron en la licitación para proveer al Ceibal de máquinas para jubilados les pidieron un software con el que se pueda hacer estos trámites cómodamente.

LOS AJUSTES AL PLAN CEIBAL