Publicidad

Conor Oberst | Conor Oberst

CD Recomendado | Martín Cajal

Compartir esta noticia
2008-08-02 00:00:00 390x224

Folk-pop | (Merge records)

El cantante y guitarrista de Bright Eyes -reconocida banda estadounidense de indie-rock- llega (o regresa) por fin al rumbo solista. Grabado en México y autoproducido por él, su disco saldrá a la venta recién el 4 de agosto pero ya se encuentra en su sitio web, como parece apuntar la nueva tradición musical: primero a Internet, luego a la calle. Con nombre homónimo, el cantautor trae lo que en rigor es su primer álbum en solitario, porque hace trece años ya contaba con casettes y proyectos musicales propios antes de formar la banda, pero prácticamente inubicables. En este "debut definitivo" lo acompaña una banda llamada The Mystic Valley Band; y va por una senda sonora distinta, no opuesta, pero sí distinta a lo que hace con su grupo. Se advierte que se trata de un trabajo solista, que repasa gustos musicales y que además desangra cuestiones personales.

En él no hay melodías pegadizas, ni canciones de tónica hit ni pisa por zonas musicales originales. Tampoco hay un tema que resalte de forma exagerada sobre los otros. Sin embargo, todo esa suerte de prudencia constituye el principal fuerte del trabajo, varado en el folk y el country por un lado; en el pop y el rock por el otro. En Conor Oberst, el artista sorprende por un motivo simple pero de no tan simple arribo: consigue hacer un álbum. Sin más, porque se trata de una obra de principio a fin pareja. Y sin alardeos musicales, "complejidades" sonoras o facilidad comercial. Pasión, guitarra y voz son el núcleo de este álbum que sobresale en el escenario musical justamente por su sencillez. Algunos artistas tienen la capacidad de imprimir cierta singularidad y un atractivo permanente con su sola voz. Oberst es uno de ellos, guarda una voz que logra familiarizarse de una en el oído y cautivar, caracterizada por una gravedad leve y cierto timbre juvenil. Por momentos, su estilo recuerda a Bob Dylan, en la canción Cape Canaveral a las baladas de Roger Waters (ex bajista de Pink Floyd), en Moab el principio de punteo se asemeja a los delirios guitarreros de Malkmus... Cuando una obra no se queda en la llanura sonora de la mera imitación, ni tampoco vuela a la montaña de lo ambicioso, y transita por un camino medio pero con firmeza, suele lograr una adherencia más rápida y fiel. Un álbum idóneo para escuchar en cualquier momento: atraviesa todos los estados de ánimo.

HOMETOWNS

THE RURAL ALBERTA ADVANTAGE (INDEPENDENT)

The Rural Alberta Advantage es de esas rarezas que vagan por la red. Oriundos de Canadá, en su primer álbum se encuentran voces masculinas y femeninas en perfecta compañía; trazos de xilofón y violín, y ritmos de batería bastante autónomos del "trayecto musical" por el que van transitando en cada canción, pero a la vez precisos. Hometowns es un trabajo de predominancia guitarrera, que tiene como mayor acierto la conjunción que hacen entre cierto sonido tosco y la prolijidad del pop. Como una fotografía de un escenario rural inundado por el sol, o un rodeo enardecido y a la vez festivo: ese es el equivalente visual de este debut de poco más de media hora que cabalga por el folk y el rock-pop.

THE RED ALBUM

WEEZER | (UNIVERSAL)

Punk-rock con mucho pop es lo que Weezer viene haciendo desde hace más de quince años. En The Red Album, su sexto álbum, los norteamericanos siguen con esas guitarras ruidosas pero adictivas a lo Pixies y estribillos bien a lo Greenday. También se encuentran esas versiones a canciones conocidas, tan comunes en la banda, y que siempre logran darles un giro propio y efectivo. Así lo hacen con The Weight de The Band. Weezer no evoluciona pero tampoco retrocede: su fórmula parece ser "larga vida" todavía. Con los pop rabiosos capturan de prima; no así con las baladas, donde tropiezan y no levantan tanto.

EXIT STRATEGY OF THE SOUL

RON SEXSMITH | (YEP ROC )

Hay artistas que hallan una forma de expresar que les resulta, sin necesidad de nada más. De ahí que a Ron Sexsmith le baste con piano y guitarra al frente para componer su último álbum; como si esos dos instrumentos simpatizaran, se conocieran y complementaran. Este canadiense tiene una voz suave y profunda que armoniza con esos sonidos melancólicos que hay a lo largo de todo el álbum. Porque eso consigue en Exit Strategy of The Soul: expresar de un modo exacto cómo es la melancolía en sonidos. Su estilo navega por el soul y algún eco gospel, y por ese pop-folk bien melódico cercano a Paul MacCartney, quien lo inspiró y a su vez elogió.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad