1/1:  20120502 800x452 ()

La situación en Salto Grande es crítica. Abril cerró como el mes de menor producción energética desde que comenzó a operar el complejo y UTE gastó en el cuatrimestre US$ 501 millones para abastecer la demanda, 52,5% del presupuesto anual.

El aporte hídrico del Río Uruguay a la represa de Salto Grande es de tan solo unos 800 metros cúbicos por segundo y lo suficiente como para hacer funcionar una de las 14 turbinas del complejo. El mes de abril que culminó se encuentra entre los registros más bajos de producción de energía en los 32 años de funcionamiento de esta obra binacional.

La falta de lluvias en la región y también las bajantes de las reservas de las represas brasileñas han prolongado el estiaje veraniego con el agravante para los intereses de UTE en el caso de Uruguay, es de que no hay pronósticos de lluvias como para alentar una recuperación de los volúmenes de agua así como los del nivel del embalse de Salto Grande que se encuentra en un metro veinte centímetros por debajo de su marca normal.

Esto complica los números de UTE que en cuatro meses generó un costo por abastecer la demanda energética de US$ 501 millones, según estimaciones de la consultora XDT Ingeniería en función de los costos de generación y la importación. La cifra no es menor si se toma en cuenta que la factura energética prevista para este año por el ente energético alcanza a US$ 953 millones, esto es, en cuatro meses se gastó el 52,5%.

UTE cuenta con un Fondo de Estabilización Energética por US$ 150 millones de los cuales el organismo estaría previendo recurrir a más de la mitad de los mismos. Es que el presupuesto para 2012 se realizó previendo una hidraulicidad media y un precio del petróleo Brent a US$ 107,35. Solo ayer el barril de ese crudo se cotizaba a US$ 118,20 y ante la baja operativa en Salto Grande las centrales térmicas se vuelven clave.

BAJANTE. La operativa de la represa de Salto Grande y la ausencia de lluvias, ha determinado además una de las mayores bajantes de este curso de agua a lo largo del río Uruguay en los últimos años. Prefectura de Fray Bentos dijo que la profundidad del río frente a la escala del puerto de Fray Bentos es de 0,10 centímetros, cuando lo normal es un mínimo de 0,80 centímetros de altura.

El Presidente de la delegación uruguaya ante la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, Gabriel Rodríguez, dijo a El País que el panorama es "malo" desde el punto de vista hidrológico y remarcó que el caudal de aporte al embalse a través del río Uruguay en estas últimas semanas apenas es lo suficiente para movilizar una turbina, "seguimos en época de estiaje por llamarlo de alguna manera", sostuvo Rodríguez.

Esta situación de la sensible merma de agua en el río Uruguay se aprecia en las costas frente a la ciudad con un nivel de las aguas en horas del día en unos 20 centímetros sobre la escala del Puerto Salto lo que presenta un panorama en las zonas rocosas de Salto Chico donde el Río parece cortarse y los aventureros aprovechan para internarse en su lecho para llegar en algunos puntos hasta la mitad del curso de agua. Rodríguez señaló que los pronósticos de lluvias sobre la cuenca del río Uruguay no son favorables y no se avizora en corto plazo una mejora como para que permita aumentar la energía producida hidráulicamente en esta central que Uruguay comparte con Argentina.

De acuerdo a los datos aportados por el Presidente de la delegación uruguaya ante la Comisión Mixta, el mes de abril que acaba de finalizar se encuentra entre los peores de la época en baja productividad energética y en cuanto a volúmenes de agua tomando en cuenta desde el año 1980 en que comenzó a funcionar la represa. Rodríguez explicó que tomando en cuenta también el último cuatrimestre, este último en los valores históricos ha sido el más bajo en cuanto a caudales hídricos y de producción. La media histórica para estos meses es de 5.500 metros cúbicos por segundo y esta última ha sido de tan solo 908 metros cúbicos por segundo, lo que refleja la gravedad.

Los grandes consumidores industriales en Argentina comenzaron a sufrir los cortes de energía de todos los años. Pero la novedad en esta oportunidad es que los mismos implicaron recibir un 70% menos del fluido demandado para su producción, informó el diario El Cronista.

Desde el fin de semana pasado más de 200 compañías fueron afectadas que ya vaticinan la reducción en su producción y por tanto una merma en ciertos productos o un incremento en la importación para cubrir los faltantes, según el diario.

En Uruguay los grandes consumidores por el momento no percibieron un corte aunque lo aguardan, dijeron a El País fuentes empresariales. Las empresas que cuentan con contratos interrumpibles sufren la misma situación todos los años, por esto, algunas ya han reconvertido parte de su matriz energética a derivados del petróleo.

En una reunión semanas atrás entre el ministro de Planificación de Argentina Julio De Vido y las autoridades de Ancap se transmitió el compromiso a no cortar el fluido para el abastecimiento de los hogares uruguayos.