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En su todavía breve carrera cinematográfica, a Jessica Chastain se le ha pedido regularmente que grite y llore, y cuando ello ocurre ha descubierto que sus directores están ansiosos por cansarla en los ensayos.

"Ellos me dicen `Contrólate, contrólate`", cuenta Chastain, con cierto orgullo por su capacidad para llorar, "pero yo les contesto que no se preocupen. Tengo un pozo sin fondo de lágrimas".

Ser una llorona de campeonato no es su única virtud. Ha desplegado etéreas vibraciones de la Madre Tierra en El árbol de la vida y ha provocado carcajadas como la exuberante y sexy sureña en el drama de época Historias cruzadas. En Take Shelter, Michael Shannon debió ser el personaje principal, en el papel de un hombre en proceso de deterioro mental, pero es la labor de Chastain como su esforzada esposa quien se convierte en el corazón de ese "thriller" psicológico. En Texas Killing Fields, una descarnada película de intriga, el público descubrió la versión de Chastain de una ruda oficial de policía de pueblo chico. Y también apareció como la leal Virgilia en la versión de Ralph Fiennes de Coriolanus de Shakespeare.

THRILLER. El "festival" Jessica Chastain continúa en Al filo de la mentira, dirigida por John Madden, donde se cuenta la historia (que salta en el tiempo) de tres agentes del Mossad interpretados por Chastain, Sam Worthington y Marton Csokas, que persiguen a un criminal de guerra nazi a mediados de la década del sesenta, y las repercusiones de su misión treinta años después. Preparándose para el papel, Chastain leyó toneladas de material sobre el Holocausto, se entrenó en el arte marcial israelí del Krav Maga, y buscó en YouTube imágenes de una joven Helen Mirren (que interpreta a su personaje en 1997) para memorizar los más pequeños tics faciales e inflexiones vocales de Mirren.

Aunque Chastain parece haber llegado de manera súbita a la gran pantalla, se ha estado hablando de ella en Hollywood desde hace cuatro o cinco años. Comenzó con Al Pacino, quien le otorgó un papel de malhumorada princesa en su película Wilde Salome, basada en la producción teatral que también había interpretado, y la recomendó a Terrence Malick, que la eligió para El árbol de la vida. Entonces Malick, quien también contrató a Chastain para su próxima película (actualmente en posproducción y sin título definitivo, aunque podría ser The Burial), la sugirió a Steven Spielberg, cuya empresa DreamWorks hizo Historias cruzadas; a Jeff Nichols, el director y guionista de Take Shelter; y a John Hillcoat, que incluyó a Chastain en su film de gánsters de la época de la Prohibición The Wettest County in the World, que saldrá este año.

Nacida y crecida junto a cuatro hermanos en un suburbio del norte de California, Chastain describe a su familia como un tanto estrecha, muy clase media y "verdaderamente promedio" (su padre es bombero, y ella sueña poder comprar algún día a su madre, una chef vegana, su propio negocio de comidas). Si tiene que agradecerle a alguien su interés por el arte dramático es a su abuela, que a los 7 años la llevó a ver la producción musical de Andrew Lloyd Webber Joseph and the Amazing Technicolor Dreamcoat.

"Es complicado, piensa uno. ¿Por qué soy actriz?", se pregunta Chastain riendo. "Pero ese fue el momento en que comprendí que actuar es un trabajo, y que era lo que debía hacer".

Luego de la secundaria, con años de obras a sus espaldas, fue a Nueva York, a la escuela Juilliard de Drama. Aún recuerda la reacción de sus padres cuando llegó la carta de aceptación, convirtiéndola en la primera de la familia en ir a la universidad. "Vi el miedo en sus caras", dice.

SALTO. Durante su último año en Juilliard participó en un "casting" e instantáneamente firmó con el productor John Wells (E.R., The West Wing). "En las pruebas, mucha gente trata de llamar tu atención", dice Wells. "Pero Jessica tiene esa habilidad de estarse quieta. Y uno se queda mirando lo que hace".

Lo que vino después fue una especie de educación poscolegio: una gira teatral en una producción con Philip Sey-mour Hoffman, apariciones especiales en Veronica Mars y La ley y el orden: Juicio por jurado. Luego llegaron las películas.

Una forma de apreciar que Chastain está en el tapete es preguntar a cualquier extraño si recuerda haberla visto en una película.

"No quiero desaparecer en mis papeles", dice la actriz, que también actúa en Mama, un film de horror producido por Guillermo del Toro donde interpreta a una ejecutante musical que odia a los niños. "Y me avergüenzo fácilmente, muy fácilmente", agrega. "Me avergüenzo incluso cuando la gente me canta Feliz Cumpleaños".

La primera vez que Helen Mirren y Jessica Chastain se encontraron para buscar la manera de sincronizar sus actuaciones para Al filo de la mentira, la actriz más veterana advirtió de inmediato que había algo que ambas compartían.

"Reconocí en ella un rasgo de mi juventud: la seriedad y la dedicación con que encara el papel", dice Mirren. "Es una muchacha tenaz".

Sam Worthington, que interpreta a su introvertido colega del Mossad, llevó su admiración un poco más allá y concretó una reunión con la directora Ami Canaan Mann, de Texas Killing Fields. (esta vez, Worthington interpreta al conflictuado exesposo de Chastain, quien también es policía).

"Le dije a Ami Mann: `Consigue a es- ta chica. Confía en mí. Es suave y dulce, pe- ro es también un camaleón`", explica Worthington.

Otros colegas han prodigado elogios adicionales hacia Chastain. "De cuando en cuando me encuentro con alguien y me dice: `Oh, Sean Penn estuvo aquí y ha dicho las cosas más agradables que puedan imaginarse de ti`", cuenta Chastain, que actuó con Penn en El árbol de la vida.

"Es como si bus- cara trabajo y me recomendaran. Es agradable", concluye.

Drama en el Sur norteamericano, años sesenta, y el complejo tema de las relaciones entre las razas: señores y sirvientes, diferenciados por el color de la piel. Chastain fue candidata al Oscar como Actriz Secundaria. Ganó su compañera Octavia Spencer.

Espionaje, suspenso y drama en dos tiempos: una misión del Mossad para atrapar a un criminal nazi en los sesenta, y sus efectos treinta años después. Chastain es una de las agentes involucradas. Helen Mirren encarna al personaje en su madurez.

El protagonista (Michael Shannon) sufre extrañas visiones, y duda acerca de si se trata de alucinaciones o de advertencias del Apocalipsis. Su esposa (Chastain) se convierte en su principal apoyo para lidiar con esas experiencias aterradoras.

Un cuadro familiar y el tema de la pérdida de la inocencia, en los años cincuenta. El director Terrence Malick (Días de gloria, La delgada línea roja) exhibe ambiciones cósmicas (empieza con el origen del mundo) y rodea a Chastain con gente como Brad Pitt y Sean Penn.

La historia de venganza y conspiración del clásico de William Shakespeare, libremente adaptada y (como el "Ri- cardo III" de Loncraine) con ropas mo- dernas. Jessica Chastain es Virgilia, y la acompañan Ralph Fiennes (protagonista y director) y Gerald Butler.