AGENCIAS Y EL PAÍS
La muerte del hijo adolescente de John Travolta, el dos de enero pasado, fue solo el comienzo de una etapa terrible para su familia. Luego de eso el actor y su esposa sufrieron un intento de extorsión por parte de los médicos que atendieron al joven.
Una ex senadora de las Bahamas acusada de asociación delictiva para extorsionar por 25 millones de dólares a John Travolta tras la muerte de su hijo, consiguió el miércoles pasado la libertad mediante el pago de una importante fianza.
Pleasant Bridgewater, tal el nombre de la senadora, está acusada de colaborar con el conductor de una ambulancia para exigir dinero al actor a cambio de eliminar un documento relacionado con el tratamiento de su hijo, que falleció tras sufrir unas convulsiones.
Jett falleció mientras estaba junto a su familia de vacaciones en las islas Bahamas. La supuesta causa de muerte fue una apoplejía, es decir la suspensión repentina de la acción cerebral, a causa de derrames sanguíneos en el encéfalo o las meninges. Jett tenía ya antecedentes de este mal y también sufrió en su infancia del llamado síndrome de Kawasaki, o inflamación de ciertas arterias, cuya consecuencia puede ser muy negativa para el corazón y otros órganos del cuerpo.
Pleasant Bridgewater no tuvo que formular declaración alguna de culpabilidad o inocencia durante la comparecencia por el caso.
El documento habría librado a los despachadores de emergencia de toda responsabilidad si la familia se negaba a usar una ambulancia, pero no se usó en el caso de Jett Travolta, según el comisionado adjunto de policía Marvin Dames.
La página web de la farándula TMZ.com ha reportado que Travolta, un avezado piloto, consideró trasladar a su hijo enfermo a Florida en su avión antes de ser conducido al hospital en la isla de Grand Bahama. A último momento habría decidido con su esposa llevarlo en ambulancia. Si existe, el documento probaría este cambio de decisión y podría demostrar que los servicios médicos no tuvieron responsabilidad en la sucesión de hechos que se dieron en el caso de Jett.
No está claro porqué la pareja habría creído que los Travolta pagarían para evitar la publicación del documento. La información sobre el caso se ha manejado con mucha reserva. Varios medios, entre los que estaba El País de Madrid, llegaron a manejar la posibilidad de que la extorsión real estuviese alrededor de una serie de fotografías. En esas fotos, cuya existencia no se ha probado, aparecería el hijo de Travolta en el momento de ser trasladado en la ambulancia.
La fianza de Bridgewater, también abogada de Grand Bahama, fue fijada en 50.000 dólares. La acusada renunció a su cargo en el Senado tras su arresto la semana anterior bajo cargos de ayudar para extorsionar y asociación ilícita para extorsionar. El 11 de febrero tendrá que comparecer nuevamente en la Corte.
El otro sospechoso, el paramédico Tarino Lightbourne, estuvo entre quienes intentaron reanimar a Jett luego que éste sufrió un colapso el 2 de enero. Se declaró inocente de intento de extorsión y asociación ilícita para extorsionar al astro de Hollywood.
El actor y su esposa, Kelly Preston, regresaron a su casa en Florida con las cenizas de su hijo poco después de su deceso y no han hablado en público.