Publicidad

La crisis distancia a Obama pero el tema racial puede frenar su chance

Rumbo a la Casa Blanca. El 53% de los estadounidenses ve al demócrata mejor preparado para afrontar la coyuntura económica El racismo puede ser determinante Debate crucial mañana

Compartir esta noticia
 20081013 600x438

WASHINGTON | AFP, AP, EL PAÍS

DE MADRID Y EL MERCURIO/GDA

La economía será el tema más importante que influirá a los estadounidenses a la hora de votar. Ahí el demócrata Barack Obama lleva las de ganar. Pero el factor racial, reflotado en los últimos días, le puede hacer perder puntos.

Obama lleva meses diciendo que la del 4 de noviembre no será "una elección ordinaria" porque no se viven "tiempos ordinarios". Ya lo decía antes del colapso de Wall Street, pero sus frases adquirieron un nuevo significado tras la crisis financiera. Los votantes, que aún no comprenden del todo cómo se llegó a esta situación, necesitan una inyección de confianza. Y en ese aspecto, el demócrata lidera la compulsa por varios cuerpos. De hecho, la semana pasada el candidato republicano John McCain propuso un plan de rescate para los propietarios de inmuebles amenazados con embargos, pero las encuestas reflejaron que esta iniciativa no tuvo eco.

El 80% de la población está preocupada por el dinero, según una reciente encuesta llevada a cabo por la Asociación Americana de Psicología. Otro sondeo, a cargo de ABC News/Washington Post, indicó que el 55% de los entrevistados afirmaron que la economía será el elemento más importante a la hora de votar. En ese marco muestral, el 53% señaló a Obama como el más competente en la materia. McCain quedó muy abajo, con el 37%.

Ese sondeo de ABC y el Post, divulgado ayer, también está en sintonía con otras encuestas a la hora de hablar de intención de voto: el 53% prefiere a Obama y el 43% a McCain. Esto ocurría antes de que el demócrata anunciara los lineamientos de su política económica, basada en medidas para ayudar a las clases medias. El anuncio tuvo lugar ayer en el vital estado de Ohio (ver aparte). Desde 1964, quien ahí vence se sienta en el Salón Oval de la Casa Blanca. Y el candidato afroamericano lleva ahí una pequeña ventaja de tres puntos.

Pero entre tanto contexto positivo para la campaña de Obama, ese último aspecto, el color de su piel, puede tener efectos negativos que aún no hayan saltado a la luz.

negro. Luego de la mejor performance del candidato demócrata en el segundo debate -tal como había ocurrido en el primero- muchos expertos se apresuraron en dar por cerrada la carrera electoral. Pero en un panel de la CNN, el analista David Gergen frenó las profecías de muchos de sus colegas: "Creo que es muy pronto para declarar la victoria, porque Barack Obama es negro".

Existe una teoría denominada "el efecto Bradley-Wilder" según la cual mucha gente dice a los encuestadores que respalda al candidato negro, en este caso Obama, para no parecer racista. Esta teoría se remonta a las elecciones para gobernador de California de 1982. El entonces alcalde de Los Angeles, el demócrata Tom Bradley, un negro, perdió ante un rival blanco pese a que todos los sondeos lo daban vencedor. En 1989, el afroamericano Doug Wilder logró ser electo como gobernador de Virginia por un escaso margen, cuando las encuestas le daban una ventaja de diez puntos sobre su más próximo competidor, que era caucásico.

Por supuesto que esto no siempre ocurrió. Negros estadounidenses han logrado escaños en el Congreso, alcaldías y gobernaciones. El propio Obama venció en la interna demócrata a un peso pesado como Hillary Clinton y a su hoy compañero de fórmula, el muy experiente Joe Biden, entre otros, todos ellos blancos.

Pero la incógnita ante una instancia cumbre -una elección presidencial- es un escenario inédito. Y un estudio realizado en septiembre por la Universidad de Stanford y la agencia AP concluyó que "el efecto Bradley-Wilder" puede influir en hasta seis puntos porcentuales el desempeño del demócrata en la elección.

Obama no ha usado el color de su piel como elemento de campaña, en especial desde que ganó la nominación demócrata. La vez que encaró con mayor seriedad el tema fue durante la pugna interna con Clinton. Luego que se revelaran dichos confrontacionales de su ex pastor, el reverendo negro Jeremiah Wright (que llegó a justificar el "11-S" y aseguró que la discriminación sigue enhiesta en el país), el candidato dio en marzo un discurso sobre el estado de las diferencias raciales en EE.UU. que fue ampliamente elogiado por la prensa.

Pero el tema reflotó en los últimos días con la declaración del parlamentario demócrata John Lewis, quien en la década de 1960 participó en la lucha por los derechos civiles de los negros, quien comparó el duro tono que había adoptado la campaña republicana con los mensajes segregacionistas que en aquellos tiempos difundía el ex gobernador de Alabama George Wallace. Para muchos, el "antagonismo racial" es una bomba que aún no explotó en la actual campaña.

Las cifras

44% Porcentaje de votantes independientes que optarían por Obama, según AP-GFK. A McCain lo acompañaría el 41%.

26 Diarios estadounidenses de importante circulación estatal o nacional apoyan a Obama; a McCain lo respaldan 11.

Respetar o atacar es el dilema de McCain

El decisivo debate de los candidatos a la Presidencia de Estados Unidos de mañana, el último antes de las elecciones del 4 de noviembre, le presenta un dilema al postulante republicano John McCain. Derrotado en las dos instancias anteriores y retrasado en los sondeos, el senador por Arizona parece dudar entre atacar abiertamente a su rival demócrata, Barack Obama, o mostrarle "respeto".

Cuando la virulencia en la campaña ya estaba subiendo de tono, McCain llamó a sus seguidores a "respetar" a su adversario. Es que en los mitines republicanos, comenzaron a sumarse los insultos a Obama, a quien llegaron a calificar de "terrorista" y "mentiroso".

Al tono duro -muy criticado- le siguió ese pedido de respeto -reconocido hasta por su adversario. Sin embargo, ante la posibilidad de verse las caras por última vez antes de las elecciones, McCain no descartó apelar a la crudeza. "Vamos a darle (a Obama) un azote donde ya saben en el próximo debate", dijo en un discurso el domingo.

Obama y McCain se prepararon para el debate junto con sus asesores durante el pasado fin de semana. AFP

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad