1/1:  20080910 205x198 (El País)

S. Cabrera / A. Navarro

La reducción de los años de servicio para jubilarse (35 a 30) y la baja de 70 a 65 de la edad para la jubilación avanzada son dos de los principales cambios al régimen de pasividades. La reforma puede costar hasta US$ 26 millones al año.

El proyecto de ley del gobierno, dado a conocer ayer y que el Parlamento debe sancionar antes del 25 de octubre, también flexibiliza el acceso a la jubilación por incapacidad y establece subsidios especiales para mayores de 58 años (con 28 o más de servicio) que están en desempleo, en lo que se presenta como un "puente" hacia la causal jubilatoria. Otro cambio, con fuerte valor simbólico, es que a las mujeres se les computará un año trabajado por cada hijo, incluso adoptados.

Desde el gobierno se admite que esto es apenas "una curita" para cerrar una "gran herida", vinculada a las dificultades de acceso a la jubilación. La reforma costará entre US$ 10 y 26 millones al año, según las estimaciones del BPS y dependiendo de la cantidad de gente que acceda a la jubilación.

La financiación de los cambios se hará a través de Rentas Generales, según establece el proyecto de ley. Aunque no precisó cifras, el director de Seguridad Social del Ministerio de Trabajo, Roberto Baz, dijo a El País que los cambios en el sistema implicarán "un costo, que lo pagará toda la sociedad". Y justificó: "El gobierno está haciendo un esfuerzo con esta ley, en atención al perjuicio que se causó desde el propio Estado (con reformas al sistema de seguridad social y en el mercado laboral). No fue este gobierno, pero lo tenemos que asumir como propio".

El proyecto será estudiado primero por la Cámara de Diputados y, luego de sancionarse, habrá una reglamentación, vinculada a aspectos de gestión. La baja a 30 años entrará a regir en julio del próximo año, a pedido del BPS para tener más tiempo de instrumentación. Casi todo el resto del proyecto regiría desde febrero, a los cuatro meses de promulgada la ley.

CAUSA. Las modificaciones, surgidas del Diálogo por la Seguridad Social, parten de dos estudios -uno de Cepal y otro del equipo en representación de los trabajadores del BPS- que llegaron a la conclusión (con muy pocas diferencias entre sí) que a los 60 años apenas el 17% de los trabajadores privados accedería a la jubilación si se mantienen las actuales condiciones. La cifra sube a 24% a los 65 años. En esas bajas proyecciones incide el alto porcentaje de trabajo "en negro".

"Pero sabemos que, aún con estos cambios, mucha gente en el país no podrá llegar a la jubilación. Esto es apenas una curita en una herida muy grande que abrió la ley jubilatoria de 1995 y que no cerrará así nomas. El daño ya esta hecho, la ley ya lleva doce años de aplicación", opinó Baz. El funcionario se refiere a la ley de las AFAP, la 16.713, que subió a 35 los años de trabajo exigidos para generar causal jubilatoria.

Pero el "daño mayor", a juicio de Baz, proviene de la desregulación laboral: "Leyes que flexibilizaron el acceso al mercado laboral, que permitieron despidos y trabajo en negro".

PELIGRO. En el BPS admiten que, en el futuro, el piso de 60 años de edad y el mínimo de 30 años de trabajo podría revisarse al alza si las modificaciones provocan una reducción en masa de la edad real de jubilación, cuyo promedio actual supera los 64 años. De todos modos, el gobierno piensa que eso no sucederá porque el estímulo a seguir trabajando se mantiene, si se observa que es muy baja la jubilación con el mínimo exigido .

Baz afirma que, hoy por hoy, quien cumple con los parámetros de la ley "no se jubila a los 60", sino que espera algunos años más para incrementar la tasa de reemplazo (lo que se ganará), "que es reconocidamente baja". El proyecto de ley establece que se cobrará 45% del sueldo básico jubilatorio (promedio de lo percibido en últimos diez años) si la persona se jubila a los 30 años de trabajo, porcentaje que sube a medida que hay más años trabajados y mayor edad. El máximo es el mismo de hoy: 82,5%. El tope actual del BPS es de $22.000.

"Seguramente en el futuro tendremos que mejorar la tasa de reemplazo, pero todo no se puede hacer. Igual nos pareció prudente tirar una cuerda a los que están muy cerca de la jubilación pero no pueden acceder a ella", advirtió el director.

¿La baja a 30 años no incentiva a que las empresas envíen más personal a la jubilación? Baz no lo cree así y aclara: "Si el trabajador no acepta retirarse antes de tiempo, lo deberán despedir. Que el trabajador acepte jubilarse con el mínimo no parece razonable porque se irá con jubilación muy baja. No hacemos misterios con eso".

CINCUENTONES. El subsidio especial (40% del sueldo) para los desempleados de más de 58 años está asociado a disposiciones del proyecto de ley de seguro de paro, también a estudio del Parlamento, que plantea duplicar el período de amparo del seguro (de seis meses a un año) para los mayores de 50.

Para acceder a ese subsidio, el beneficiario debe estar desempleado al menos desde hace un año y sin haber renunciado al empleo de motu propio. El proyecto habla de desempleo "forzoso", aunque el gobierno no controlará si efectivamente la persona dejó de buscar empleo. Se asegura que no habrá incentivos indeseados, como adelanto de retiros.

En cuanto al cambio en la jubilación por incapacidad, el Ejecutivo dice que la exigencia de un mínimo de actividad en los meses previos a la incapacidad es un "escollo injustificado" y lo mismo sucede cuando la incapacidad se produce tras largo tiempo de inactividad.

La realidad demográfica ha llevado a que los países industrializados -que tienen características de población similares a las de Uruguay-, opten por aumentar la edad de retiro para combatir el efecto económico del incremento de los pasivos y su longevidad. El ex presidente del BPS, Rodolfo Saldain, sostiene en un artículo del libro "Nacer, crecer y envejecer en el Uruguay" que "la continuación de la actividad es una de las alternativas que frecuentemente se formulan a la hora de revisar los equilibrios financieros de los regímenes de pensiones de prestación definida. En general, se plantea una elevación de la edad mínima de retiro o una penalización para los retiros a una edad menor". La mayoría de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) reconocen los 65 años como edad de retiro para hombres, con tendencia a igualarla en el caso de las mujeres, según consigna ese artículo.

Por su parte Islandia, Noruega y Estados Unidos tienen una edad estándar de pensión de 67 años mientras que Dinamarca y el Reino Unido, entre otros, quieren incrementarla por encima de 65 años.

Japón elevó a 65 años la edad de retiro, en forma gradual desde el año 2004 hasta el 2013, y en Bélgica el llamado Pacto Generacional implicó una elevación de la edad mínima de 58 a 60 años de edad y de 25 a 35 de servicios.

En marzo del 2007, Alemania aprobó la legislación por la cual la edad normal de retiro se eleva de 65 a 67 años y establece que quienes hubieran cotizado al menos durante 35 años pueden retirarse al cumplir los 63 años de edad.

Francia es el único país de la OCDE que mantiene la edad de retiro en los 60 años, pero al mismo tiempo lanzó en noviembre del 2006 el Plan Nacional de Empleo que aspira a elevar la participación de la fuerza de trabajo de 55 a 64 años y otorga incluso incentivos para permanecer activos por encima de los 65 años.

64,5 es la edad promedio de jubilación actual en Uruguay, según las estadísticas del Banco de Previsión Social (BPS)

6.000 es la jubilación promedio, en pesos, que paga actualmente el Banco de Previsión Social (BPS) en el país.

Cuando participó en el congreso de la Onajpu en agosto pasado, el presidente del BPS, Ernesto Murro, afirmó, lleno de entusiasmo: "Queremos que más gente se jubile. Es un deber, este gobierno quiere que haya más jubilados en Uruguay. Es una barbaridad exigir 35 años de trabajo. Pasaron doce años; mucha gente se jodió en este lapso, ahora lo corregiremos".

Pero desde el gobierno ya se admite que a partir de 2020 será necesario reformar los parámetros asociados a las prestaciones, luego del pasaje por el sistema de seguridad social de por lo menos una generación completa de afiliados a las AFAP.

1.años exigidos para jubilarse

Se configura causal jubilatoria común con 30 años de servicio, en lugar de los 35 actuales. Se mantiene el mínimo de 60 años de edad para jubilarse. Pero la tasa de reemplazo varía entre 45% y 82,5% del sueldo básico jubilatorio, de acuerdo a cuándo se accede a la jubilación. Si se acoge a la prestación con el mínimo de 30 años, la tasa es del 45%.

2.jubilación por edad avanzada

Se podrá acceder a la jubilación por edad avanzada (50% del sueldo básico jubilatorio) a partir de los 65 años de edad, siempre que existan 25 años de servicio. Hoy se piden 70 años de edad y quince de servicio. Para cada año menos de esa cifra exigida, se pedirá dos años más de servicio. Por ejemplo, 69 de edad y 17 de servicio, o 68 de edad y 19 de servicio.

3.jubilación por incapacidad

Se elimina la exigencia de actividad en los seis meses "inmediatamente previos" a la incapacidad, para otorgar la jubilación por incapacidad total y el subsidio transitorio por incapacidad parcial. Si la incapacidad aparece luego del cese de actividad, ahora se elimina la obligación de que no pasen más de dos años de ese cese para obtener el beneficio.

4.subsidio para cincuentones

Otra novedad es un subsidio especial para personas mayores de 58 años de edad y con 28 años o más de servicio. Los trabajadores deben estar en "desempleo forzoso" desde al menos un año y ese desempleo no debe ser por retiro voluntario. El subsidio será del 40% del promedio mensual de los últimos seis meses trabajados, una prestación similar al futuro sexto mes del seguro de paro por despido. El monto no puede ser menor a $ 1.775 ni mayor a $ 14.200.

5.beneficio para las madres

Con el objetivo de contemplar la "situación desigual" entre hombres y mujeres, a éstas se les computará como un año adicional de servicio cada hijo nacido vivo o cada hijo adoptado, si es menor o discapacitado. Se establece un máximo de cinco hijos, es decir, cinco años. Así, una mujer se podría jubilar con 25 años de trabajo, si tiene cinco hijos. Se intenta paliar la menor cotización de la mujer por la maternidad.

6.la entrada en vigencia

El Parlamento deberá votar esta ley antes del próximo 25 de octubre, por disposición constitucional. Entrará en vigencia el primer día del cuarto mes siguiente a la promulgación. Si se vota en octubre, entraría en vigencia en febrero. Hay algunas excepciones: la flexibilización para la jubilación común (35 a 30 años) recién empezará a regir desde el 1° de julio de 2009. En el caso de la jubilación avanzada, las causales para personas de 67, 66 y 65 años de edad, regirán desde el 1° de enero de 2010.