DANIEL ISGLEAS

Sus jefes dicen que es "una herramienta precisa, flexible y de alto impacto estratégico al servicio" del Estado. La compañía antiterrorista Escorpión del Ejército está altamente entrenada y puede responder en minutos a una emergencia.

El sacrificio es el estímulo de estos hombres, que entrenan a diario en el llamado campo Vidiella, cerca de Toledo, Canelones. Es el mismo lugar donde dos años atrás el gobierno ordenó excavar en busca de restos de detenidos desaparecidos durante la dictadura. El lugar donde no hubo hallazgos significativos ahora abrió sus puertas a los medios de prensa para mostrar qué hace esta unidad de elite. Sus miembros son los comandos mejor y más intensamente entrenados, y lo exhiben con orgullo. El lema es "Patria o muerte", y se puede ver en el área principal de entrenamiento como para que no queden dudas de la entrega de sus hombres a la causa. Y para que se comprenda esta actitud de sus hombres está la otra frase: "Aquí los mejores son apenas buenos".

La compañía Escorpión forma parte del Batallón Paracaidista 14 de Infantería, uno de los destinos más específicos del Ejército. Por lo general, los oficiales ingresan desde los pequeños grados para ir adaptándose a la rigurosidad y demandas del servicio. Todos son paracaidistas y muchos se integran a la unidad de elite antiterrorista. La última vez que entró en acción a gran escala fue cuando se realizó en Montevideo la Cumbre Iberoamericana de presidentes, en diciembre de 2006. Buena parte del trabajo pasa por el entrenamiento y la planificación de las acciones. Por ejemplo, tienen en su poder todos los planos de los edificios públicos de Montevideo para estudiar cómo desplegarse en caso de responder a una emergencia terrorista.

Los enfrentamientos convencionales han pasado de moda, dejando paso a acciones terroristas, más propias de la guerrilla urbana. La compañía cuenta con un equipo de asalto, el apoyo de francotiradores, un equipo de apoyo logístico-administrativo, y un comando de operaciones de nivel táctico y otro superior.

El jefe actual de la compañía es el capitán Julio Jiménez, que recibió a los medios con el jefe del Batallón 14, teniente coronel Dorival Moraes y el jefe de la Brigada de Infantería 5 -de la cual depende el Batallón- el coronel Luis Suárez.

Entre su personal se cuenta el capitán Federico Márquez, que meses atrás, destacado en el Congo al servicio de las Naciones Unidas, participó con otros soldados uruguayos en una acción donde salvó a una familia de civiles que había quedado entre dos fuegos de facciones enfrentadas por problemas políticos internos del país africano. Esa acción les valió a los uruguayos una condecoración del rey de España.

COMO LOS DEMÁS. El Ejército está orgulloso de los hombres de la compañía antiterrorista, que una semana atrás tuvieron una destacadísima actuación en Estados Unidos durante una competencia con equipos similares de 17 países. Tras extenuantes pruebas físicas y militares, los uruguayos quedaron en segundo lugar después de Colombia, país donde el entrenamiento ha dejado paso a la acción directa contra las FARC. "El conflicto permanente de Colombia, el equipamiento, la amenaza real, hacen que ellos tengan sus recursos optimizados", apuntó Moraes, el jefe del Batallón.

Jiménez agregó que los comandos uruguayos "no tienen nada que envidiarle a nadie, ni a los de Estados Unidos, que son primer mundo".

Los uruguayos ganaron respeto en la región, además de una copa. En la prueba, primero fue Colombia, segundo Uruguay, tercero Panamá y séptimo se ubicó Estados Unidos, pese a toda la tecnología con que cuentan sus fuerzas especiales. Uruguay perdió la primera posición porque cometió dos errores, y Colombia solo uno. Los colombianos llevan cuatro años seguidos al tope de la estadística regional.

1 ASALTO A UNA CASA Y LIBERACIÓN DE REHENES

Para los periodistas se implementó una maniobra de asalto y liberación de rehenes con explosivos, gas y disparos de subametralladora. La acción tomó algunos minutos, fue combinada y terminó con la eliminación de los terroristas. Están preparados para actuar con rapidez y precisión quirúrgica.

2 EL FACTOR SORPRESA ES CLAVE PARA EL ÉXITO

Los comandos de la subunidad de asalto y liberación de rehenes actúan al mismo tiempo que quienes ingresan con explosivos. Se descuelgan desde el techo e irrumpen en las habitaciones superiores para eliminar a los terroristas. Los impactos fueron en la cabeza y el pecho.

3 PRECISIÓN CON FUSIL 7.62 MM A 400 METROS

Los "francos" -como se les dice en la interna- eliminaron a dos "terroristas" de cartón dentro de una casa de ficción. Les dispararon a 400 metros de distancia (impacto en el pecho) y a 100 metros (en la cabeza). Los francotiradores actúan de a dos, uno como observador y otro dispara a sus indicaciones.

4 SUBAMETRALLADORAS Y LANZAGRANADAS

Los comandos usan, entre otras cosas, las antiguas pero aún eficientes subametralladoras HK. La renovación de armamento que implementa el Ejército le vendrá bien a los comandos, ya que recibirán armas del primer mundo. Usan HK calibre 7.62 mm, .50 mm y pistolas de 9 mm.