S. Cabrera / L. Nicrosi

-¿Cómo afronta la nueva dirección de la OPP los reclamos sindicales?

-Estoy tapado de conflictos sindicales, de herencias pasadas por contratos mal hechos e irregulares. Y ahora están todos los empleados presionando y empujando, con apoyos parciales del Pit-Cnt, para entrar como funcionarios públicos. Nosotros queremos marcar cuál es la línea del gobierno y dar mensajes.

-¿Y cuál es la línea?

-Es avanzar con mucho cuidado y ser muy restrictivos. Si no vamos a terminar con un Estado enormemente pesado. Hay que ir caso a caso. Queremos que ingresen como funcionarios para tareas permanentes aquellos puestos que las empresas públicas digan que van a precisar en el futuro. No podemos dejar entrar a cualquiera que reclame derechos adquiridos como funcionario. En las áreas estratégicas y neurálgicas los empleados sí deben ser funcionarios. Pero puede haber excepciones: hay funciones que son estratégicas y sin embargo sirve más y es más conveniente que sean prestadas bajo la modalidad del derecho privado.

-¿El call center de Antel por ejemplo?

-El call center es estratégico y, sin embargo, se viene desarrollando muy bien bajo el régimen de derecho privado.

-Esto generó un conflicto con el sindicato de Antel.

-(Enrique) Rubio y yo no habíamos llegado aún a la OPP (cuando empezó el conflicto), pero hay un problema latente y el gobierno tiene que tomar una posición. La idea nuestra es no tener generalizaciones que después nos embreten en demandas. Hay muchas situaciones de trabajadores que entraron por clientelismo político. Es el caso de los guardahilos de Antel: gente que por vinculación política conseguía un montón de contratos, ganaba $ 150 mil y vivía en Europa. Yo no puedo meter a toda esa gente como funcionario, es una irresponsabilidad. En cambio hay otros guardahilos que son muchachos jóvenes y tienen posibilidad de hacer carrera en Antel.

-Sin embargo, el Pit-Cnt ha apoyado conflictos como el de los guardahilos.

-Pero no ha salido el Pit-Cnt con una posición general, unánime, a apoyar.

-¿Tienen claro cuántos trabajadores se desempeñan como contratados en el Estado y no son funcionarios?

-Hay que hacer un buen relevamiento en todo el Estado, para saber cuántas situaciones de este tipo hay. El que no era funcionario, ahora lo empieza a demandar. Nos avisaron que en UTE también están en preconflicto, están los fiscalizadores del Banco de Seguros en conflicto y en el Correo también.

-Son muchos los sindicatos que piden regularizar la situación de sus trabajadores.

-Muchísimos. Lo piden los trabajadores, algunos sindicatos se suben y otros no. Nosotros queremos restablecer la carrera administrativa, el derecho del funcionario, tener formas jurídicas de contratación claras. Justamente porque queremos resolver esto es que se nos vienen los conflictos. Si hubiésemos hecho la plancha como se hizo hasta ahora, estos temas no hubieran saltado.

-¿El nuevo Sistema Integrado de Remuneraciones y Ocupaciones (SIRO) qué va a cambiar?

-Integrará la ocupación laboral con la remuneración de los funcionarios. Es un avance muy grande, un primer paso. Pero hasta que no podamos arreglar las iniquidades salariales -y para eso se necesita dinero- hay que poner un poco de orden en este desorden.

-En los últimos tiempos hubo varios llamados importantes para que ingresen funcionarios, como en el BROU y el BSE. Se ha presentado mucha gente y se mantiene la idea popular de que si uno ingresa al Estado nunca lo van a despedir y va a trabajar poco.

-Sí, y entrás con $ 18.000 laburando en el BPS (se ríe). (Fernando) Calloia me decía que está pagando las tareas mucho más alto de lo que su correlativo paga en el mercado privado. Y es la opinión general de la mayoría de los directores de las empresas públicas. Hay una disfuncionalidad muy grande. Por ejemplo, se crearían muchos más puestos de trabajo si en lugar de hacer entrar gente con sueldos de $ 15.000 en la sección de tarjetas de crédito en el BROU, les pagaran $ 6.000 o $ 7.000 (que es lo que se paga en el mercado). Puedo contratar a 100. Pero el sector público no debe ser utilizado como una fuente de generación de empleo. No hemos podido meterle mano a tareas que no son de calificación alta, como el de ayudante de lavandería, donde se cobra un sueldo que no es razonable en el sector privado. Los sueldos están bajos en el sector privado pero no pueden ser quince veces más altos en el Estado.

-Pero eso iguala para abajo.

-No. Los sueldos de escalafón de conducción que se proyectan para la Administración Central son mucho más altos que los que hoy existen. Hoy las gerencias en la Administración Central están mal pagadas. Yo gano $ 38.000 pero como asesor del presidente cobraba más. Igual no es viable dar un aumento ahora cuando no se puede dar a los maestros. Me duele mucho no resolver todo de un plumazo. No le puedo meter mano a las iniquidades salariales. Aunque tuviese todo el dinero para subir los salarios, tampoco quiero llevar todo hacia arriba. Hay que poner orden antes. Esto me tiene amargado.

-¿En la reforma del Estado está prevista la asociación con privados?

-Lo que prevemos es formar sociedades mixtas entre las propias empresas públicas. Por ejemplo entre UTE y Antel.

-¿Y Antel con un privado?

-No. Eso por ahora no se está pensando. No camina, no está en los planes. Sí que existan formas de funcionamiento bajo el derecho privado (para algunas situaciones). Pero nuestra idea es modernizar el derecho público y demostrar que se puede hacer una empresa pública eficiente. Si yo la paso al derecho privado, estoy habilitando que mañana la empresa pública se privatice. Cambia el directorio y me empiezan a vender acciones de esa sociedad anónima.

El subdirector de la OPP, Conrado Ramos, admitió que "se está incumpliendo" el programa del Frente Amplio, si son ciertas las denuncias de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (Cofe) acerca de situaciones irregulares en el Ministerio de Educación y Cultura y en el canal 5, donde se habrían firmado contratos "cachet" sin llamados públicos. "Ahí hay denuncias de que existen casos muy irregulares. El jerarca político dice: esta estructura no me sirve, necesito traer gente con otras capacidades, entonces contrato por fuera de la carrera administrativa", contó. El programa del Frente Amplio establece que los ingresos en el Estado sólo pueden hacerse por concurso. Pero Ramos opinó que debe haber un equilibrio entre la carrera administrativa y las formas flexibles de contratación "que no te obliguen a casarte con una persona". Explicó que se "analizarán" las normas de inamovilidad porque hay funciones "que hoy las necesito y mañana no". Por eso el gobierno busca formas jurídicas "que permitan tener funcionarios que no sean necesariamente eventuales" y que la única razón para cesarlos no sea la ineptitud, omisión o delito.

También opinó que el gobierno está "en deuda con el tema de información pública", y expresó su deseo de que se apruebe el proyecto de ley sobre transparencia "porque nos obliga a los organismos públicos a dar información".

Lo primero que llama la atención al llegar a la OPP en el Edificio Libertad es que se escucha a una persona hablar en claro acento portugués. Se trata de Alexandre Amorim, un brasileño que es mano derecha de Conrado Ramos. "Es un tipo de izquierda, un cuadro del PT, experto en planeamiento estratégico y ex director de una escuela de gobierno", explica Ramos con una sonrisa de oreja a oreja. Ramos conoció a Amorim a través de una amiga que trabaja en la Facultad de Ciencias Sociales. "Fue a comer a mi casa un par de veces, me enganché charlando y dije: ´éste sabe mucho´".

Nombre:Conrado Ramos

Edad:44 años

Estado civil:Soltero

Otros datos:Doctorado en Ciencias Políticas

La vida ha llevado a Conrado Ramos por Buenos Aires, donde estudió varios años en la década del 80, y por Europa. En el año 1993 viajó a Alemania a hacer un doctorado y cursos de especialización en Servicio Civil y Administración Pública. "Estudié los servicios civiles comparados de casi todo el mundo", explicó Ramos. Trabajó en el Instituto de Ciencias Políticas y fue investigador de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República. No hizo una militancia activa en el Frente Amplio, a pesar de lo cual el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández, lo llevó como asesor a la Presidencia. Desde marzo es subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.