El primer desafío de la flamante gerenta general, Elina Rodríguez, será enfrentar la negociación del pago de las deudas con proveedores, algunas de las cuales vencen el próximo 1º de julio.

El presidente de Pluna, Carlos Bouzas, dijo ayer a los funcionarios de la empresa en una improvisada reunión para anunciar la asunción de Rodríguez en la gerencia general, que la situación de la empresa "es difícil" dado que el "1º de julio vencen contratos con proveedores".

Rodríguez, quien deberá enfrentar esta situación heredada de la gerencia anterior, dijo a El País que "habrá que discutir y apelar a la sensibilidad de los proveedores sabiendo que los negocios son negocios".

Bouzas comentó a El País que con algunos proveedores se han logrado acuerdos y con otros "se siguen discutiendo, pero todos son conscientes de que necesitan de Pluna porque es su principal cliente".

La figura clave de las negociaciones es el Ministerio de Economía, quien debe determinar hasta qué punto permitir refinanciaciones de deudas. Los atrasos en los pagos con los proveedores son de entre ocho meses y un año, según fuentes del sector.

Una de las mayores deudas que tiene Pluna es con el concesionario del Aeropuerto Internacional de Carrasco, Puertas del Sur, a quien debe unos U$S 2 millones. En este caso se maneja la posibilidad de que se plantee un acuerdo de compensación de cuentas entre el canon que tiene que pagar el concesionario del aeropuerto al Estado y las deudas de la aerolínea. Si bien Pluna no tiene deudas con la petrolera estatal, según aseguró a El País el presidente de Ancap Daniel Martínez, a nivel del gobierno se manejan alternativas para abaratar el costo del combustible que utiliza la aerolínea pero no hay una decisión aún al respecto.

"Se están estudiando alternativas pero es difícil que sea una rebaja lisa y llana del combustible para Pluna porque otras empresas pedirían un tratamiento similar", explicó.

Otra de las negociaciones que deberá enfrentar Pluna es la del aumento salarial dado que los pilotos de vuelos internacionales plantearon ante los consejos de salarios su aspiración de ganar hasta $ 180.000, lo que en algunos casos implicaría un aumento de 300% respecto de los valores actuales.

GESTION. Según la ex representante de los trabajadores en el directorio de Pluna, la aerolínea tiene tres grandes temas para encarar: recomponer la estructura patrimonial, establecer un plan operacional sustentable y desarrollar un programa financiero. Las primeras medidas que tomará en el cargo estarán dirigidas a la "racionalización de los costos" y la implementación de "una política comercial sustancialmente más agresiva". Rodríguez agregó que "hay que recuperar la credibilidad de Pluna".

"Es importante que los uruguayos empiecen a sentir que esta no es la empresa lastre. Pluna no es Lufhtansa, pero el Uruguay no es Alemania; hay que utilizar las ventajas comparativas que dan el ser una empresa que no agrede por su tamaño a los grandes operadores".

La novel gerenta general de Pluna, Elina Rodríguez, dijo a El País que en la interiorización que hizo en los últimos meses sobre los temas gerenciales "se abrió una caja de Pandora", pero no quiso entrar en detalles sobre lo que encontró dado que "más allá de que no comparto muchas cosas de la anterior gestión", su empresa ve en Varig, un socio "clave" en materia de negocios aeronáuticos de futuro.

Rodríguez afirmó que Uruguay y Pluna "más allá del comportamiento societario deben también desarrollar un acuerdo estratégico con Brasil y con Varig", dijo.

Para ella "ello no significa necesariamente compartir todos los elementos de la gestión de Varig que han quedado a lo largo de todos estos años". El gobierno se puso un plazo de seis meses para encontrar al nuevo socio que adquiera el 49% de las acciones de Varig en Pluna.

Rodríguez afirmó que es "correcto" que la aerolínea de bandera uruguaya busque un inversor pero "no para tapar agujeros, sino para generar un proyecto de crecimiento".

La nueva gerenta general de Pluna, Elina Rodríguez, tiene 47 años y hace 28 que trabaja en la aerolínea de bandera uruguaya. Ingresó en 1977 en el área de mantenimiento de la entonces empresa estatal, hasta que por un breve lapso en 1986 dejó la empresa reingresando en 1987 en el mismo sector.

En su segunda etapa en Pluna también desarrolló tareas en el área de asistencia en tierra.

Desde hace años forma parte del directorio de Pluna como representante de los trabajadores y ha representado al gremio en la Mesa Política del Pit-Cnt.