Dos hermanas usan semillas y plantas para hacer desde pesebres hasta muñequitas

29/01/2021, 15:50

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Las hermanas Sosa Días están todo el año recolectando elementos de la naturaleza para realizar las creaciones de Natur_Art, un taller artesanal fundador de la feria Ideas+.

Analía Filosi

El año de las hermanas Plácida y Mercedes Sosa Días está organizado siguiendo los dictados de la naturaleza. La primera, que está por cumplir 90 años, ideó unas artesanías con elementos naturales que hace que cada mes esté marcado por la recolección de una determinada flor, fruto o parte de una planta que le servirá para, por ejemplo, armar pequeños pesebres.

Eso lo hace desde que Nancy Bacelo creó la Feria del Libro y el Grabado en el Parque Rodó. Primero la ayudaba su hermana Sofía y su amiga Bernardina Castells, ambas ya fallecidas.

Al principio elaboraban varias cosas para la feria, entre ellas muñecas de trapo y almohadones.

Pero con el tiempo se fueron inclinando al armado de pesebres o pequeñas muñequitas donde cada parte del cuerpo es un elemento de la naturaleza.

Cuando Bacelo falleció, Plácida fue una de las artesanas que integró el grupo que decidió crear la feria Ideas+ para que este espacio cultural y de artesanías siguiera existiendo cada fin de año.

Las muñequitas hechan con semillas son otros de los clásicos de las hermanas artesanas.

Allí fue que se incorporó Mercedes. “Me sumé porque empecé a ayudar a mi hermana y porque me gusta la manualidad”, contó la socia más nueva de este emprendimiento que tiene como base de operaciones la casa de Plácida en el barrio de Punta Carretas.

Llevan como nombre Natur_Art y es uno de los talleres más tradicionales y típicos de Ideas+ y su feria antecesora.

Fundadoras de la feria a la que no faltan

Natur_Art solo se presenta en la feria Ideas +, en la que han participado de todas sus ediciones sin falta. Son uno de sus socios fundadores. En el correr del año, si los clientes de la feria las contactan para encargarles un trabajo especial, lo hacen. “Teniendo mercadería, no hay problema”, señaló Mercedes Sosa Días. En cuanto a Ideas +, reconoció que este año no fue buena por la pandemia de la COVID-19. “Nos faltó el público mayor, que era el que estaba guardado, y los espectáculos, a los que la gente venía, veía algo y al otro día volvía y te compraba”, acotó la artesana. De todas formas rescató lo positivo de haber podido organizar la exposición.

Mercedes se sumó cuando empezó Ideas+; Plácida está desde la Feria del Libro y el Grabado.

Tienen todo calculado.

Todo lo que usan es salido de la naturaleza y las hermanas Sosa Días tienen bien claro qué sirve para qué.

El recipiente que alberga los pesebreses es de mate, que compran a una fábrica donde ya piden que se los corten de acuerdo a lo que necesitan. “Hay que limpiarlo, lijarlo y barnizarlo”, explicó Mercedes.

Las semillitas que utilizan para armar los cuerpos de la Virgen María y San José son de casuarina o eucalipto. El cuerpito del niño Jesús lo hacen de paraíso o pistacho y el pelo es viruta que les hace un carpintero o también puede ser de cedro, “que es como un choclito que desmenuzamos”, apuntó la artesana a El País.

La cuevita del niño es de un yuyo especial que crece en el pasto y que es muy difícil de conseguir. Las ovejitas las realizan con casuarinas muy chiquitas y las estrellas con semillas de zapallo o calabacín. “Las dejamos secar, las limpiamos y después las doramos”, señaló.

Las brujitas fueron una de las novedades 2020; para el que viene quieren hacer coronas navideñas.

Del fidodendro utilizan la llamada flor del esqueleto de caballo. “La abrimos, la curamos y la barnizamos”, detalló. También hacen pesebres con la tela de la palmera.

Fuera del pesebre elaboran muñequitas con semillas que pueden ser de piña, jacarandá, brachichito, eucalipto o casuarina. Sirve también la piña del cedro, “que se deshoja y queda la parte de arriba con la forma de una flor”, acotó Mercedes.

Lo único que no es natural de todo el material que usan son las cabecitas de los muñequitos, que son de madera y mandan traer de Buenos Aires porque en Uruguay no hay.

La base de los pesebres son los mates, que encargan a una fábrica y ellas limpian y barnizan.

Con las piñas grandes realizan arbolitos de Navidad y en el último año Papás Noel. Sumaron además unas brujitas hechas con eucalipto y un bonete que elaboran en dos partes; las escobas están hechas con los cabitos largos de las flores de las diamantinas.

La otra novedad de 2020 fueron los centros de mesa. “Para la feria que viene tenemos pensado hacer las coronas de Navidad para las puertas”, anunció Mercedes, ya que es una costumbre que cada año incorporen algo nuevo.

Si bien reconocen que la feria de 2020 no fue buena por las circunstancias conocidas de la pandemia de la COVID-19, tienen esperanza que este año la cosa cambiará y recuperarán su público. Para eso trabajan desde fines de diciembre, “porque si te dormís, te quedás sin material para la próxima feria”, sentenció la artesana.

Recolección sin pausa desde el verano

El año laboral-artesanal para las hermanas Plácida y Mercedes Sosa Días comienza cada vez que termina una feria Ideas +, a fines de diciembre. “Preparar una feria nos lleva todo el año, no podemos armarla en un mes, es imposible”, señaló Mercedes.
Todo lo que usan tiene su fecha de recolección, que ellas conocen al dedillo. “Tenemos todo calculado, lo nuestro no es fácil. Trabajamos todo el año porque tenés que recolectar las cosas, clasificarlas, curarlas y barnizarlas. Hacemos todo en serie”, explicó.
Y lo hacen ellas dos solas, nadie las ayuda. Es así que, por ejemplo, en verano se las puede ver con un palo frente a la Escuela Naval, lugar en el que están los árboles de los que sacan las piñitas chiquitas. También en Carrasco encuentran los árboles de jacarandá, que usan para varias cosas. En julio o agosto van por los fidodendros, cuya flor empieza a ponerse beige por esa fecha y es justo en ese momento que la pueden arrancar. En octubre o noviembre recogen los yuyitos que servirán para armar la canastita del niño Jesús. “Tenés que ir mirando por los jardines porque se entreveran con el pasto”, contó la artesana.
El árbol de brachichito les sirve todo el año y lo encuentran en el Parque de los Aliados. “La mayoría de los árboles que están alrededor del parque son brachichito”, señaló. Si van en agosto o setiembre aprovechan también para recoger bellotas.
Todo lo que van juntando lo guardan en la casa de Plácida, en el barrio Punta Carretas. A veces Mercedes se lleva algo para su casa para ir adelantando trabajo de limpieza y barnizado, pero finalmente todo se concentra en lo de su hermana, donde terminan de armar los objetos que estarán en la próxima feria.