ASTRONOMÍA

Busque la constelación de la Cruz del Sur y dese la vuelta. Hacia el noroeste verá, si las nubes lo permiten, uno de los espectáculos astronómicos más impresionantes: el paso de un cometa que no volverá a pasar por la Tierra hasta dentro de 6.800 años. Se trata de C/2020 F3 o NEOWISE, un cometa recientemente descubierto y que pasó por su perihelio –el punto de su órbita más cercano al Sol–?el pasado 3 de julio.

Al atardecer del miércoles 22 hay chances de ver parte de su cola sobre el horizonte; pero a partir del viernes 24, se podrá ver en toda su extensión. Si bien regaló asombrosas imágenes en el hemisferio norte, hay que moderar las expectativas por estos lares. La altura del cometa no es muy favorable y, al estar más lejos del Sol, su brillo ya “no será demasiado exuberante”, aunque será visible a simple vista, indicó el profesor Raúl Salvo, director del Observatorio Astronómico de Montevideo. Va a ser útil tener a mano un binocular o algún dispositivo fotográfico para verlo mejor.

“Los cometas tienen un grado de impredecibilidad en su comportamiento y en la medida que se alejan del Sol nos dan sorpresas”, comentó. Esto se debe a que no se puede prever su régimen de actividad ni el tiempo por el que permanecerá visible.

En el mejor momento de avistamiento, el NEOWISE tuvo alrededor de seis grados de cola. Esta medida es similar al diámetro de doce lunas llenas o el tamaño de un puño en el cielo. “Esperemos que el cometa colme las expectativas y que siga brillando como hasta ahora”, agregó Salvo en diálogo con El País.

NEOWISE fue descubierto con la ayuda del satélite de la NASA que lleva el mismo nombre a finales de marzo de este año. “Viene de muy lejos con material muy primitivo del Sistema Solar”, explicó el astrónomo. Los científicos consideran a los cometas como una especie de cápsulas del tiempo cósmicas.

Por algún tirón gravitatorio, los cometas son jalados hacia el interior del Sistema Solar y comienzan a hacer una órbita a alrededor del Sol, cuyo calor sublima su hielo y libera gases, lo que provoca la cola. Este tiene dos: una de gas y otra de polvo.

NEOWISE ya se acercó al Sol y ahora está adentrándose de nuevo en el Sistema Solar y no se lo volverá a ver en 6.800 años.

Ha captado la atención internacional, no solo porque no se sabía su existencia hasta hace bien poco, sino porque no se veía un objeto de esta magnitud desde 2007 con el paso del C/2006 P1, también conocido como McNaught. Este había sido calificado como “el más brillante” de los últimos 40 años. Años antes se habían visto el Hyakutake (1996) y el Hale-Bopp (1997).

Con todo, Salvo apuntó: “Hay una generación que nunca ha visto un cometa”.

Los científicos pudieron determinar que NEOWISE tiene unos 5 kilómetros de diámetro y un núcleo cubierto de partículas de hollín oscuras que quedan de su formación hace aproximadamente 4.600 millones de años.

Durante el fin de semana, la distancia del cometa C/2020 F3 de la Tierra era de 109 millones de kilómetros, por lo que su luz tardaba 6 minutos y 5 segundos viajar desde él hasta el planeta.

NEOWISE es el tercer cometa descubierto en el último año. Los dos anteriores fueron el C/2019 Y4 (Atlas) y el C/2020 F8 (Swan), pero resultaron ser una decepción. Atlas, que prometía ser más brillante que Hale-Bopp, se partió en pedazos luego de que su trayectoria lo llevase hacia el Sol. Lo mismo ocurrió con Swan.

 Salvo lamentó que el pasaje de NEOWISE se dé durante la pandemia del coronavirus que impide la realización de actividades entre aficionados y profesionales; no obstante, recomendó que aquel que tenga la oportunidad de salir y verlo, lo haga, dado que no es un espectáculo frecuente. Pero pidió que se evite el intercambio de binoculares o telescopios y que se mantenga el distanciamiento físico entre los observadores.