Un héroe ciego y sin miedo

Se trata de otro personaje creado por la fecunda imaginación de Stan Lee, un guionista de cómics que se cambió el apellido porque alguna vez soñó con ser un escritor "serio" y como llegó a confesar: "no quería que mi apellido real figurara como autor de esas historietas infantiles". Claro, Lee nunca pensó que sus creaciones llegarían a convertirse en la piedra angular del imperio Marvel, que hoy cobra millones de dólares por licenciar para el cine las aventuras del Hombre Araña, los X-Men, Hulk y este Daredevil, encarnado por uno de los galanes más codiciados del momento, Ben Affleck.

Como en el caso del Hombre Araña, se trata de un superhéroe con rasgos de vulnerabilidad, pero más acentuados que en el caso de Peter Parker, porque Matt Murdock, el alter ego de Daredevil, es ciego. Murdock pierde su vista luego de un accidente de tránsito, en el que un camión con carga radioactiva le salpica sus ojos. Pero al tiempo que pierde la visión, Murdock experimenta no solo un inusual aumento de las capacidades de sus restantes sentidos: también adquiere un extraño poder extrasensorial, una especie de radar interno que le permite distinguir hasta el más ínfimo detalle de todo lo que lo rodea.

Luego de una extensa preparación en las artes marciales a cargo de un mentor, Murdock alterna entre el ejercicio de la abogacía durante el día y la caza de los criminales en la noche neoyorquina. Hasta ahí, lo medular del personaje creado por Lee. Pero otro guionista también jugó un importante papel en la mitología de "El hombre sin miedo", como también se lo conoce a Daredevil: Frank Miller.

Este, quien también es dibujante, hizo sus primeras armas en el negocio de las historietas justamente con Daredevil. El personaje, que agonizaba e iba a ser cancelado, le fue asignado a un entonces novato Miller. "La Marvel me dijo más o menos ‘a ver qué podés hacer con esto’, porque era un personaje poco popular en ese momento (a principios de los ‘80)". Miller, quien había editado la violenta Ronin, sobre un samurai que viaja a través del tiempo, se inspira parcialmente en esa historia para remodelar a Daredevil. Comienzan a aparecer ninjas mortíferos y junto a ellos una anti-heroína que haría las delicias de los lectores masculinos ávidos de curvas y violencia: Elektra.

El cómic repuntó tanto que Miller pronto se sintió con ganas de hincarle el diente a personajes más populares, algo que logró cuando la competidora de la Marvel, DC Comics, le encargó un álbum completo sobre Batman, que a su vez fue una fuente de inspiración para Tim Burton cuando preparó sus dos primeras entregas sobre el Hombre Murciélago. Pero esos números guionados y dibujados por Miller fueron objeto de adoración por muchos, entre ellos dos amigos: el director de cine Kevin Smith (Cajeros, Dogma, La otra cara del amor) y el actor Ben Affleck (Armageddon, Pearl Harbor).

Luego del estreno, Affleck trató de explicar su admiración por el personaje que viste de rojo y lleva un bastón para ciegos que se convierte en un arma peligrosa: "Es difícil de explicar. Creo que tiene que ver con que cuando era chico, los otros superhéroes me parecían unos boyscouts que vivían en un mundo en blanco y negro. Y aunque parezca gracioso que lo diga alguien que se pone un traje rojo para luchar contra el crimen, encontraba que Murdock era un superhéroe más realista, con los pies sobre la tierra".

En esta película dirigida por Mark Steven Johnson, otro fanático de la historieta, Daredevil se enfrenta a la organización del jefe mafioso Kingpin (interpretado por Michael Clarke Duncan), quien maneja con mano de hierro todas las actividades ilegales en la parte de Nueva York conocida como Hell’s Kitchen. En ese conflicto intervienen también el asesino a sueldo Bullseye, interpretado por Colin Farrell y la ya mencionada Elektra (Jennifer Garner), quien resultó tan popular que ya obtuvo una película propia, actualmente en etapa de preproducción.

Realizada con un generoso presupuesto para los efectos especiales, Daredevil. El hombre sin miedo dominó durante varias semanas el primer puesto de la taquilla en su país y si bien muchos la compararon con El Hombre Araña, el film también fue elogiado por sus propios méritos, entre ellos las virtuosamente filmadas secuencias de acción y peleas, que fueron coreografiadas por expertos chinos.