Tradición de vacaciones de invierno

Comienza hoy en la sala Linterna Mágica de Cinemateca Uruguaya (Soriano 1227), extendiéndose hasta el viernes 15 de julio, la décimocuarta edición del Festival de Cine para Niños (Divercine). Hay algunos cambios en la organización a partir de este año: Cinemateca será solamente exhibidora en Montevideo del festival, cuya organización quedará a cargo de IMAN (Instituto de Medios Audiovisuales para Niños y Jóvenes). Apoyan al IMAN para la realización de Divercine Unicef, Unesco, el Instituto Nacional del Audiovisual, la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores, el Departamento de Cultura de la Intendencia Municipal de Montevideo, la Embajada de Francia, Saeta TV Canal 10, TV Ciudad, el diario El País, el Plan Deni y Montevideo.com. Este año se presentarán en Divercine 102 títulos de 35 países, entre ellos los agrupados en la muestra Prix Jeunesse, con películas premiadas en el último festival de Munich. Así podrán verse los largometrajes El color de la noche de la noruega Torun Lian; el argentino Marisol, destinado sobre todo a público adolescente; el chino Kindergarten, un documental sobre niños que realizan su primera experiencia escolar; así como las animaciones El delfín de Brasil o El perro guardián, de Estados Unidos, para mencionar solamente algunos de los títulos de mayor destaque o que han recibido mayores elogios internacionales.

La programación está armada empero, una vez más, de acuerdo a criterios de años anteriores. Los films se exhiben en bloques destinados a tres franjas de edades. Cada día a las 14.30 horas va un programa dirigido para los más chiquitos, niños entre cuatro y seis años; a las 15.30 un grupo de cortos para chicos de seis o más, y a las 16.30 un largometraje destinado a edades entre ocho y catorce. Por supuesto, esas clasificaciones tienen solo un valor indicativo, y cada padre debe evaluar en definitiva la capacidad de comprensión o interés de sus hijos a la hora de elegir programa. Quien llegue a las 14.30 y quiera quedarse a ver todo lo que dan puede hacerlo por el precio de una sola entrada, de todos modos. Cinemateca Uruguaya colabora con las exhibiciones, a las cuales tendrán acceso libre los socios de la institución, y descuentos los hijos de esos socios.

HISTORIA. En julio de 1992 la Cinemateca Uruguaya y el Instituto Interamericano del Niño organizaron el Primer Festival de Cine para Niños, con el objeto de dar a conocer una muestra de las producciones cinematográficas destinadas al público infantil que no encuentran canales de difusión a través del circuito comercial. La selección incluía numerosas películas premiadas en festivales internacionales especializados.

A lo largo de los últimos catorce años, Divercine (tal como fuera bautizado por el fallecido Eloy Yerle, responsable en un tiempo de la enseñanza de cine para niños en la Cinemateca) fue consolidando un espacio donde la diversidad de formatos, de culturas y de géneros y la calidad artística de las películas fueron constantes que orientaron la programación. A partir de las primeras ediciones el festival estuvo coordinado y programado con Ana María Sineiro, del Instituto Interamericano del Niño, y desde el segundo año con Ricardo Casas, delegado por Cinemateca, quien continuó en solitario esas funciones después de 1999. En ese tiempo y desde sus comienzos, a través de las subsedes en América Latina del Instituto y los colegas de las cinematecas latinoamericanas, el festival, con el acuerdo de los productores, se extendió a otros países en una red de subsedes.

JURADO. En 14 años de festival han participado en sus jurados personalidades muy variadas, quizás porque no hay profesionales de jurado de festivales de cine y televisión para niños, por lo menos en el Uruguay. Todas ellas han tenido, sin embargo, un vínculo interesante con los niños y/o con el lenguaje audiovisual: profesionales de las letras, de la animación, titiriteros, psicólogos, docentes, directores de festivales, realizadores.

Este año el jurado internacional de Divercine estará integrado por tres personalidades muy diversas que han dedicado empero sus vidas a la producción, la crítica o la elaboración de pensamiento en torno al fenómeno audiovisual: el animador Andrés Lieban, nacido en la Argentina pero radicado en Brasil, responsable del Laboratorio de Animación; el productor y realizador argentino Emilio Cartoy Díaz, fundador y director general de TEA Imagen; el periodista y crítico uruguayo Alejandro Yamgotchian.