La Nación / GDA
Tras un fin de semana de incertidumbre respecto al estado de salud de Silvina Luna, que continúa delicada y permanece internada en terapia intensiva desde el 13 de junio, por una bacteria que afectó sus pulmones, este lunes se conoció un nuevo parte médico que brinda detalles sobre su actualidad.
“El sábado 1 de julio la paciente requirió asistencia ventilatoria mecánica a causa de su debilidad muscular generalizada. No se encontraron nuevas complicaciones en los últimos estudios. Actualmente, continúa con asistencia respiratoria mecánica, está despierta y con signos vitales estables. Permanecerá internada en el servicio de Terapia Intensiva, donde se le realizarán estudios adicionales y brindarán los tratamientos necesarios”, señaló la dirección médica del Hospital Italiano a través del parte difundido este lunes por la tarde.
Silvina está acompañada y apoyada por su círculo más íntimo: Ezequiel, su hermano, y sus mejores amigas, Analía y Eugenia. Al comunicado médico, sus familiares y allegados sumaron también su agradecimiento por el apoyo recibido: “Simplemente, deseamos agregar que pelea con todas sus fuerzas sostenida por nuestro amor, el de todos ustedes (con sus permanentes mensajes de recuperación) y la implacable labor del cuerpo médico y personal de salud del Hospital Italiano, para quienes no alcanzan nuestras palabras de agradecimiento”.
En tanto, en diálogo con Flor de la V y el resto del panel de Intrusos (América), Fernando Burlando, el letrado que representó a Silvina Luna en el juicio contra Anibal Lotocki, dio algunas precisiones más del estado de la ex Gran Hermano. Luego de reconocer que “el real estado de salud de Silvina es minuto a minuto y segundo a segundo”, ya que su cuadro puede evolucionar o desmejorar de un momento a otro, señaló que ese es el motivo de la prudencia de Ezequiel, a quien calificó como “un ejemplo de hermano”.
“¿Cómo puede ser que esta persona siga operando?”, preguntó luego la conductora del ciclo de entretenimientos sobre Lotocki, que fue condenado a cuatro años de prisión y cinco de inhabilitación para ejercer la medicina tras haber sido encontrado culpable del delito de lesiones graves.
“La condena no está firme y la ley tiene un sistema de protección para todas aquellas personas que no tienen una sentencia firme. Cuando no hay una sentencia firme, hay una presunción de inocencia, más allá de que haya habido una sentencia condenatoria grave”, repasó. “Todo esto hace que uno se sienta como viviendo una gran injusticia, pero es parte de los procesos lamentables de la Justicia, que a veces incluso también son lentos. Esa es otra contradicción: una Justicia lenta no es justicia. Pero bueno, es parte de un debate extra”, aseguró. Cuando Laura Ubfal le consultó de quién depende que la causa avance, Burlando fue prudente: no quiso dar nombres, aunque explicó que depende del Tribunal de Casación.