La actriz Meryl Streep ganadora del Oscar, recibió ayer el Premio Donostia a toda su carrera en el Festival de Cine de San Sebastián. "Puedo explicar su magia en cinco elementos", resumió el presidente del jurado del festival, Jonathan Demme, amigo de la actriz, a quien dirigió en Mensajero del miedo: "Un aspecto impresionante, una mente brillante, una gran imaginación, una profunda valentía y un enorme corazón".
Meryl Streep es "una de las mejores actrices de la historia, un fenómeno artístico y un referente para todos, es completa, dúctil y camaleónica, y tiene una exquisita sensibilidad", elogió el actor español Eduardo Noriega, que le entregó el premio arrodillado.
"Estoy segura que mis padres, que están en el cielo, están de acuerdo con todo lo que han dicho", respondió riendo la actriz, de 59 años, que debutó a los 18 años con Julia.
Streep, que se dijo "culpable" por recibir tantos premios -63 en toda su vida, a lo que se suman 69 candidaturas- subrayó que "cada personaje resulta del trabajo de un montón de gente", por lo que dedicó el premio a sus compañeros del mundo del cine.
"Estoy orgullosa de ser actriz", ... "lo necesito como comer y nos permite unir mundos, países y almas". "Gracias por aguantarme durante tantos años", terminó.
La actriz aseguró en conferencia de prensa, antes de recibir el galardón, que nunca eligió papeles pensando en su carrera, sino "pensando en su utilidad en el mundo".
La actriz, ganadora de dos Oscars por Kramer contra Kramer (1979) y La decisión de Sophie (1982), actualmente en cartel con el musical "Mamma Mia", dijo que no descarta dirigir cuando su hija pequeña, de 17 años, se vaya de casa.
Su larga y variada carrera la achaca a que "cada vez hay más mujeres trabajando en esta industria y están dispuestas a invertir en ciertos temas".
Streep acaba de rodar "Mother superior", en la que encarna a una monja, y "Julie and Julia", de Nora Ephron, sobre una profesora.