GUILLERMO ZAPIOLA
Su mayor fama proviene de la televisión, pero ha hecho varias cosas en cine, incluso para Woody Allen. Ahora, Larry David ha vuelto a trabajar para Woody en "Whatever works", de inminente estreno norteamericano.
Para el espectador televisivo, Larry David es fundamentalmente el guionista, director, productor y protagonista de la ácida comedia Curb your enthusiasm. También fue una de las mentes detrás de Seinfeld, una de las series de televisión más exitosas de la historia en Estados Unidos. David tiene en su haber dos Emmy, un Globo de Oro y más de 20 candidaturas a otros premios. Ha hecho fundamentalmente televisión, pero también algo de cine, y ya había interpretado un par de papeles secundarios (en Días de radio, 1987, e Historias de Nueva York, 1989) para Woody Allen. Se ha reencontrado con Allen en su nueva película, Whatever works.
David actúa esta vez junto a Evan Rachel Wood, Henry Cavill, Ed Begley Jr. y Patricia Clarkson. Woody no tiene un papel en la película, cuyo estreno mundial tendrá lugar el próximo 22 de abril en el festival de Tribeca, creado en Nueva York por Robert De Niro y Jane Rosenthal.
Se trata de la primera película rodada por Allen en Nueva York desde el año 2004, cuando hizo Melinda y Melinda. Después vino su etapa europea, que ha incluido Match Point (2005), Scoop (2006) y El sueño de Cassandra (2007) en Gran Bretaña, y Vicky, Cristina, Barcelona (2008) en España.
PERSONAJE. El protagonista de Whatever Works es un neoyorquino de clase alta cuyo modo de vida cambia drásticamente, reemplazado por un estilo mucho más bohemio, cuando inicia una extraña relación sentimental con una excéntrica joven cuarenta años menor que él (Wood). Tras presentar su película en Tribeca, Allen confía en estrenar su película en los Estados Unidos el próximo 19 de junio.
A Allen parece haberle interesado el estilo de "humor malhumorado" que tan típico de David. En efecto, sus personajes como actor (en Seinfeld y Curb your enthusiasm) se han caracterizado por un frecuente mal humor que es uno de sus rasgos más nítidos. Y lo que Woody parece haberle pedido para Whatever works es justamente ese mal humor: el hombre está enojado con casi todo, hasta que se tropieza con una veinteañera que puede cambiarle el carácter.
La comedia puede servir, de paso, para sublimar la obsesión del propio Woody por las jovencitas. Ya había un chiste al respecto en una de las viejas películas de Allen: "Cambio mujer de cincuenta por dos de veinticinco".
COMPROMISO. Aunque David es ya un veterano de la comedia ácida, un protagónico para Allen constituye sin duda un compromiso particular. Pero el actor, libretista y productor se ha estado preparando para él desde los tempranos años ochenta.
Nacido en Brooklyn, Nueva York, hace sesenta y dos años, David se graduó en Historia por la Universidad de Maryland en 1969, y al año siguiente obtuvo otro título en empresariales. Logró una primera fama como monologuista cómico, y pronto fue contratado por la cadena ABC como actor y guionista del programa Fridays (1980 a 1982). Entre 1984 y 1985 fue colaborador del popularísimo Saturday Night Live, aunque nunca apareció como actor en el programa, dato que generó un capítulo de revancha en su posterior y célebre Seinfeld titulado justamente La venganza.
A fines de los años ochenta, Larry David y su amigo Jerry Seinfeld se encontraron en un almacén y comenzaron a burlarse de la cantidad de artículos inservibles que ahí se vendían. Larry comentó entonces que ese tipo de conversaciones nunca se oían en la televisión, y que sería divertido escucharlas. Seinfeld propuso que deberían hacer un programa sobre eso. Allí nació Seinfeld, una serie que se extendió a lo largo de ocho años (1991-1998) y 174 episodios, y que muy pronto entró en la leyenda.
David tuvo menos éxito en su única incursión en cine como director, Sour Grapes (1998), y le fue bien con Curb your enthusiasm (61 episodios entre 2000 y 2007). Pero trabajar para Allen es un ascenso.
El exitoso falso documental sobre un cómico fracasado
Más de una vez le han pre- guntado a Larry David si su personaje de Curb your enthusiasm es el mismo de la vida real, y el actor ha respondido: "Ese es el hombre que a mí me gustaría ser". Pero nunca ha quedado claro si la respuesta es en serio o en broma.
La serie nació en 1999, cuando David recibió una oferta de HBO para realizar un especial de una hora dividido en dos partes: la preparación de su rutina cómica y su presentación ante el público. Todo terminaba saliendo mal, y el personaje nunca llega a presentar su show. Pero el especial se convirtió, sin embargo, en el primer capítulo de una serie que ha podido definirse como un "documental ficticio" de su vida y que ha tenido un dilatado éxito en la pantalla chica.
A diferencia de Seinfeld, Curb your enthusiasm se apoya básicamente en la improvisación. Las historias nacen de la mente de David y, con amplia libertad temática y expresiva.
David fue nominado en 2003, 2005 y 2006 a los Globos de Oro en la categoría de mejor actor de serie de televisión musical o de comedia por su trabajo en Curb your enthusiasm. También, en una encuesta realizada entre cómicos profesionales se vio colocado en el puesto número veintitrés de la lista de los mejores cincuenta cómicos de todos los tiempos. Tiene igualmente un Emmy como escritor de Seinfeld, y premios del Sindicato de Guionistas de Estados Unidos.
Otras dos crónicas neoyorquinas entre comediante y director
No hay un verdadero protagonista en Días de radio (1987) de Woody Allen. Todos los radioescuchas y los hacedores de los programas tienen aproximadamente el mismo espacio de pantalla, aunque un niño parecido a Allen y Mia Farrow sean más reconocibles que los demás. Larry David encarna un papel lateral: el del vecino comunista de la familia de judíos (que remite a la de Woody) que ocupa empero un espacio importante aunque no excluyente en la trama.
David y Allen volvieron a encontrarse nuevamente en Historias de Nueva York (1989), en el episodio en el que Woody y su madre entran en un teatro, y como consecuencia de un acto de ilusionismo que no sale como es debido la veterana es lanzada a otra dimensión y se convierte en una presencia gigantesca y amenazante desde el cielo de la ciudad. La presencia de David es nuevamente episódica: encarna al gerente del teatro donde se inicia todo el estropicio.