De obrero a estrella de Hollywood

| Salto. El australiano confirma su estatus con "Furia de titanes 2" y mantiene su perfil bajo

 20120329 580x600

Sam Worthington no sigue el manual oficial de Hollywood para protagonistas de superproducciones. Pese a que es un actor importante él ha resuelto no seguir el juego al pie de la letra en estos años.

Su película de suspenso Al borde del abismo está todavía en los cines, mientras que Furia de titanes 2 en la que interpreta al mítico guerrero Perseo, se sumó ahora. Por ejemplo, sentado en una lujosa suite de un hotel de Los Angeles para hablar de Furia de titanes 2, se supondría que detallaría los agotadores ejercicios a las 4 de la mañana, esenciales para su cincelado cuerpo, el duro régimen diario que... "La verdad, no me gusta el gimnasio", admite muy honestamente. "Trato de poner ese hecho en mis personajes. De hecho, mi novia vio la película y me dijo: `Sam, corres de una manera muy chistosa. Se ve que se te acaba el aire y que no estás en forma. Es muy real`. La verdad, estaba agotado, pero tenía eso escrito en el libreto, con una sola línea: `Perseo tiene lastimado el trasero y necesita correr un poco más lento`", bromea. "Soy actor de método por chiripa".

Aunque a este australiano no le guste el gimnasio, no se le nota cuando se acomoda en una silla para ser entrevistado. Bronceado, a tono y vestido en una camiseta y pantalones de algodón café claro, sus cuadrados hombros sobresalen por abajo de una cabellera castaño clara, cuidadosamente despeinada.

Y aunque no tenga el lustre de un Robert Redford o un Tom Cruise (todavía hace unos años estaba mezclando cemento y pegando ladrillos en obras en construcción en Australia) ninguno de esos dos actores estelarizó la película más lucrativa de todos los tiempos, Avatar (2009) de James Cameron, que ha recabado 1,800 millones de dólares. Con ese apoyo y con los 490 millones de dólares que recaudó Furia de titanes (2010), Worthington no tiene que preocuparse por parecer estrella. Alguien que parece una estrella de cine es alguien que se parece a Sam Worthington.

Hasta a sus colegas se les dificulta ajustarse a ese estilo tan práctico. Elizabeth Banks, protagonista en Al borde del abismo lo conoció en el apogeo de la locura desatada por Avatar.

"Yo no conocía a Sam", recuerda Banks, entrevistada por separado. "El día que se presentó para el ensayo, llegó tarde y traía el pelo hecho un desastre. Traía una camiseta tan astrosa que parecía sacada del cajón de la ropa sucia. El libreto lo traía en una bolsa de Walgreens. De plano parecía un vagabundo. "Por cierto, nunca se cambió el pelo" agrega Banks riendo. "Se lo dejó así porque tenía que hacer la película``. De hecho, no parece que Worthington haya pasado mucho tiempo con un peluquero desde entonces.

"Estuve en Hawaii hace poco de vacaciones, sin hacer gran cosa"` señala él con una risa animada. "¡Y me encantó!" De hecho, asegura que su aspecto desastrado es deliberado, en reacción a la primera película Aunque esa tuvo gran éxito, Worthington no quedó muy complacido y tiene mejores esperanzas con la segunda parte.

"Cuando veo las cosas en retrospectiva, creo que la primera película fue demasiado genérica y sosa" afirma. "Para la segunda parte, me senté con el director para planear quién iba a ser Perseo, como hombre y como héroe. Yo quería mostrar a un personaje que se ganara la simpatía del público, más que el público dijera que era un personaje que cualquier actor podría interpretar por ser un simple personaje de acción. Francamente, arruiné la primera" concluye con una mueca, "pero ahora tuve más influencia como actor. Tuve la suerte de hacer una continuación en la que tuve voz y pude rectificar los errores cometidos en la primera".

Ahora está trabajando en una continuación de Avatar ¿Worthington será tan dinámico para presentarle sus ideas a Cameron, director con fama de voluntad de hierro? "Ni de chiste" admite riendo. "Lo voy a ver pronto. Y no es que vaya a llegarle con algunas ideas para la continuación. Ya me imagino lo que me diría: `¿Ah, sí tienes ideas? Acuérdate que te puedo reemplazar fácilmente`". Después del entusiasmo despertado por Avatar a Worthington le dio gusto hacer algunas películas como Furia de titanes y Al borde del abismo que simplemente son buenas de ver. "Las dos son películas facilonas" admite. "Por eso quise hacerlas. A veces es bueno hacer una película con la que el público sienta que recibe algo a cambio de su boleto de entrada. Cuando el título nos dice que hay un hombre en una cornisa, ya sabemos qué es lo que vamos a ver".

TRES PUNTOS EN UNA CARRERA DE ASCENSO

Macbeth

2006

Los primeros trabajos registrados de Worthington fueron en el 2000, como secundario en series de televisión. Seis años de trabajo después fue convocado para hacer el papel del título en "Macbeth", una versión moderna del clásico de Shakespeare.

Avatar

2009

Para el público en general la cara de Worthington no era la más reconocible, pero el éxito de esta película de James Cameron representó la oportunidad de saltar a la fama. Lo peculiar es que en la mitad del film no aparece él, sino su alter ego digital, un alienígena con sus rasgos.

Terminator: salvación

2009

Más o menos al mismo tiempo en que terminaba de filmar "Avatar" (pero antes de su estreno) fue fichado para el relanzamiento de la franquicia de "Terminator". A pesar de su presencia y de la de Christian Bale, la película tuvo mala respuesta en la taquilla.

La secuela de Perseo

"Furia de titanes" empieza diez años después de que termina la primera con la heroica derrota del monstruoso Kraken. Perseo (Worthington), el semidiós hijo de Zeus (Liam Neeson), reaccionó a esta épica victoria abandonando la vida de héroe en favor de un oscuro anonimato. Decide que está harto de reyes y dioses. "Es un tipo que realmente quiere llevar una vida tranquila de pescador en su pequeña aldea" explica Worthington. "Y está criando a su hijo, Helio". Pero hay eventos fuera de su control que, finalmente, lo vuelven a meter en el juego cósmico. El poder de los dioses se ha estado desvaneciendo, debido a que se ha reducido la devoción de la humanidad por ellos, y poco a poco están perdiendo el control de los titanes prisioneros. Conforme se debilitan los dioses, los titanes se fortalecen".

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar