Publicidad

Todos los hombres del cardenal

Compartir esta noticia

Crítica - Cine

Una película de Oscar que trata un tema difícil y reivindica el papel del periodismo

Foto: NPR

En primera plana debería ser para las nuevas generaciones de periodistas (si es que tal especie aún existe) lo que Todos los hombres del presidente fue para la anterior: un impulso para meterse en el mundo de "la mejor profesión del mundo", según la definía Gabriel García Márquez quien era, nunca hay que olvidar eso, más escritor exitoso que periodista; así era fácil decirlo.

Si aquella película de 1976, dirigida por Alan J. Pakula, mostró el apogeo de una profesión indispensable, En primera plana parece enseñar su último momento de gloria. La insistencia por mostrar los métodos analógicos con que estos reporteros encararon una investigación tan trascendente tiene que querer decir algo. Son los dinosaurios que no saben que están en camino a la extinción. Pero a diferencia de aquellos animalotes, los periodistas son necesarios, dice la película.

La historia, escrita por el director Tom McCarthy y Josh Singer sigue al personal de Spotlight, la unidad de investigaciones periodísticas del Boston Globe, que en 2002 reveló una red de complicidades que llegaban a lo más alto de la jerarquía eclesiástica para cubrir las denuncias a sacerdotes pedófilos. El trabajo le mereció al diario, el premio Pulitzer y a la película seis nominaciones al Oscar.

McCarthy viene de dirigir cosas como Hermanastros pero acá se destapa como un director con el talante como para poder manejar un material tan pesado. Sabe que no hay necesidad de hacer alarde de nada: lo que se cuenta es demasiado duro como para entrar en vanidades de director. Aprovecha un ensemble de actores excepcional (Mark Ruffalo, Rachel Mc Adams, ambos nominados, pero también Michael Keaton, John Slattery, Liev Schrieber) y a mostrar su compromiso con el tema. En ese sentido parece una película de otra época.

El guión se limita a seguir la peripecia de los reporteros que van por oficinas, canchas de golf o vernissages, reclamando datos, buscando cómplices o recibiendo veladas invitaciones a abandonar la tarea. Era inevitable ya que la intención del diario no fue ir contra los casos en particular sino por la propia institución.

Quizás el tono anticlerical esté un poco exagerado (los periodistas son todos honestos y éticos, mientras no hay un sacerdote libre de sospecha) pero eso es parte de lo que acá se quiere decir. La insistencia es una herramienta editorial valiosa aunque discutible.

En primera plana es una película de denuncia, sí, pero también un canto a las glorias de una profesión amenazada.

EN PRIMERA PLANA [****

","

Estados Unidos, 2015. Dirección: Tom McCarthy. Guión: Josh Singer y McCarthy. Fotografía: Masanobu Takayanagi. Música: Howard Shore. Con: Mark Ruffalo, Michael Keaton, Rachel McAdams, Liev Schrieber, John Slattery. Duración: 128 minutos. Estreno: 28 de enero.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

cine

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad