Llegó a la cartelera uruguaya el 2 de enero y se mantuvo hasta que terminaron las vacaciones de invierno. En esos siete meses, solo en los complejos Movie fue vista por 100.000 espectadores, según datos suministrados por la exhibidora. Ayer, Gato con Botas: el último deseo, llegó servicio de streaming HBO Max, y hoy, a las 22.11 se estrena en el canal HBO.
La primera aparición de este simpático personaje de pelaje naranja que siempre usa un sombrero de ala ancha con una pluma, es amante de la leche, un espadachín temerario y tiene voz de Antonio Banderas, fue hace casi dos décadas, en la película Shrek 2.
Desde entonces sus aventuras han sido muchas. Participó en la tercera y cuarta entrega del ogro verde, y logró crear su propia franquicia. Tuvo una serie en Netflix de seis temporadas, y también un divertido especial interactivo para ese servicio de streaming.
En 2011 estrenó en cines su primera película en solitario (titulada simplemente El gato con botas) que fue nominada al Oscar y presentó nuevos personajes de ese mundo animado. Entre ellos estaba Kitty (Salma Hayek), una gata negra de armas tomar que es tanto su antagonista como interés romántico, y regresa en esta secuela al igual que varios personajes del universo de Shrek.
Y al igual que en Shrek, no faltan las referencias a historias, películas y animaciones. Al inicio, por ejemplo, Gato con Botas le pide a una estrella que le conceda un deseo. Es el mismo poema que recita Gepetto en la película de Disney. Además, aparece la zapatilla de cristal de Cenicienta, la alfombra de Aladin y el bolso mágico de Mary Poppins, entre otros guiños a clásicos de Disney. Y hay referencias a las películas El mago de Oz, Mad Max, Terminator y El bueno, el malo y el feo que los adultos apreciarán.
También hay personajes secundarios de Shrek que vuelven, como Pinocho quien tiene un papel importante en esta historia. Y se suman nuevos como Ricitos de Oro y los tres osos, quienes aquí son una banda de cazarrecompensas en busca del gato; y Perrito, un chihuahua que usa un disfraz de gato y oficia de tearpeuta del minino principal.
Otros personajes clásicos que aparecen son Jack Horner y el Lobo Feroz, los villanos de la película. Horner, al igual que en la canción inglesa del siglo XVIII es avaro y aquí intenta obtener todos los objetos mágicos del mundo, mientras que el Lobo representa a la muerte y aparece cada vez que el protagonista enfrenta un peligro mortal.
Si bien Gato con Botas: el último deseo se desarrolla luego de Shrek por siempre (la cuarta entrega del ogro), no se necesita haber visto ninguna película o serie previa, ya que es una aventura independiente.
La historia comienza luego que Gato con Botas muere en una espectacular pelea. Le cae una campana mientras luchaba por salvar un pueblo de un gigante de piedra. Al despertar, el doctor le dice que está viviendo su novena y última vida.
El saber que ahora es vulnerable, acobarda al personaje que decide esconderse, incluso se deja una barba larga, en la casa de una señora que vive con muchos gatos.
El descanso dura poco porque pronto se entera de una estrella de los deseos que podría ayudarlo a recuperar sus vidas perdidas. Ese descubrimiento llevará al personaje, a sus amigos y enemigos, a entrar al Bosque oscuro, donde, de acuerdo a un mapa robado, se encuentra la dichosa estrella.
Antonio Banderas, quien desde hace 19 años le presta su voz al protagonista dijo al portal Deadline que el origen de la trama se debe a lo vivido durante la pandemia, la posibilidad de la muerte. Y por eso el mensaje de la película es seguir los sueños y valorar la única vida que tenemos.
“Cuando está en su última vida, el Gato con Botas se ha vuelto más humano que otras veces y ahora tiene que cuidar cada movimiento que hace”, dijo el actor español quien presta su voz en la versión original, y en español. Esta vez Salma Hayek solo interpreta a Kitty en la versión en inglés.
Este cambio de comportamiento es importante para Gato con Botas, quien siempre ha vivido despreocupado de su futuro entre aventuras.
Sobre esto, Banderas dijo: “Supongo que fue arriesgado porque llevamos al personaje a una dimensión completamente diferente. Comenzó como un personaje compañero divertido de Shrek, con una personalidad muy fuerte y misterioso en cierto modo, pero sobre odo, divertido. No siempre es un personaje políticamente correcto, pero en este momento en particular, se vuelve más humano, más real. Y puedes relacionarte con él mucho más que antes”.
El hecho que Banderas haya vivido una situación similar, cuando en 2017 sufrió un infarto, tuvo su impacto en la película. En una entrevista con Page Six por esta película dijo que gracias a su problema de salud: “Me di cuenta de que probablemente era una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida porque de lo que no era importante y me preocupaba todos los días por ello, no tenían sentido”, comentó. Eso también le ocurre al Gato con Botas.
El actor también comentó a Deadline que una de sus escenas favoritas es cuando el personaje logra escapar del peligro del Bosque Oscuro. “Cuando entra en pánico y tiene este tipo de ataque de hiperventilación. Allí ves un personaje vulnerable, realmente humano que necesita de los demás para sobrevivir. Y comienza a darle importancia no a su propia soledad y vanidad, sino a la necesidad de tener un amigo, alguien que realmente se preocupe y ponga su mano sobre su hombro, tome todas sus tribulaciones y lo libere de eso”.
Con grandes dosis de acción, una buena combinación de animación 2D y 3D, y un villano muy temible (el uso de la música y el color están muy bien logrados), este Gato con Botas: el último deseo, está por encima de la original, y muy cercana a las primeras dos entregas de Shrek donde había originalidad e irreverencia.
Si bien esta película no tiene escenas post crédito, hay una imagen sobre el final que da a entender que el camino de Gato con Botas y Shrek podría volver a cruzarse en el futuro.