Aquella máxima de que la información es poder, en las últimas décadas adquirió un carácter visionario, que amenaza con aniquilar el pensamiento crítico de las sociedades. La libertad de expresión es la base de la democracia, y del desarrollo de la Humanidad, pero también es una amenaza para el poder, para los plutócratas, y mil millonarios que quieren forjar la sociedad a su gusto. El derecho a la información parece haberse replegado hasta perder todo su sentido, y el resultado está a la vista.
* La tiranía de la mentira, de Cristina Martín Jiménez. Martínez Roca, 368 páginas.