"LALO" FERNÁNDEZ
EL ANÁLISIS
Después del trago amargo del vino tinto y al compás de la discreta actuación del resto de los participantes en la eliminatoria ha renacido, seguramente con ritmo de tamboril, el viejo canto de "Siga el baile.. siga el baile" y con él la esperanza de poder subir en la tabla.
Se da la paradoja que si se le gana a Perú se sumarían mas puntos que en la eliminatoria pasada lo que por demás no sería ninguna hazaña. Pero algo es algo y es de esperar además que no se vuelvan a cometer errores como los vividos, por ejemplo Forlán jugando no se sabe de qué, o ubicar tres goleadores siendo lo más peligroso en el partido producido por los defensas.
Además que no sean más los pases perdidos que los acertados y que no se intente hacer llover con centros interminables para morir en las manos del arquero contrario. Vamos... que juguemos a algo además de revolver lo que no está prohibido si la rueda se empantana pero no como argumento principal de la forma de jugar. Tomemos lo pasado frente a los caribeños como una mala tarde y esperemos un cambio.
Si llega no habrá necesidad de quejarse de la frialdad de la gente porque mal puede enfervorizarse nadie con lo visto el sábado. Dejémonos de tonterías, ganemos a Perú y el calor volverá en pleno invierno.