Redacción El País
El anuncio no vino en una conferencia de prensa formal ni en un estadio repleto. Tampoco fue acompañado de un video emotivo ni de una ovación de pie. Pero fue contundente. Novak Djokovic, el máximo ganador de torneos de Grand Slam en la historia, rompió el silencio y, por primera vez, se animó a hablar del final de su carrera.

Si cumple con su palabra, el serbio se despedirá del tenis a los 41 años. No será un retiro inmediato ni abrupto, sino planificado, medido, con una meta ya trazada para poner el punto final.

“Lo único que tengo en mente ahora y que es lo único que me motiva son los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028”, reveló en una entrevista con el canal de YouTube @neuspjehprvaka. Apenas una frase. Pero suficiente para que empiece la cuenta regresiva.

Djokovic viene de alcanzar las semifinales en Roland Garros 2025, donde cayó ante el italiano Jannik Sinner, número uno del mundo y finalista del torneo. Y aunque no logró sumar un nuevo título en París, su presencia en las últimas instancias volvió a confirmar que, incluso con 38 años, sigue siendo competitivo en el más alto nivel.

Foto: THOMAS COEX/AFP fotos.

Desde hace un tiempo a esta parte, dejó de mirar el ranking y su calendario gira en torno a los Grand Slams y a ciertos torneos puntuales. Juega cuando quiere, y donde siente que puede hacer historia. Pero ahora sumó un nuevo objetivo más profundo: el oro olímpico, la gran conquista que abrochó en 2024 cuando derrotó a Carlos Alcaraz en París.

“Todavía siento el mismo fuego. Amo el tenis, me sigue encantando empuñar una raqueta. El niño que hay en mí sigue ahí”, aseguró.

Cuando el retiro de Djokovic llegue, se cerrará una era. Se irá el último del Big Three. Y con él, una parte de la historia del tenis.